ETA: as¨ª de claro

Dos dirigentes de ETA Militar han hecho unas declaraciones a Le Monde en las que, adem¨¢s de los t¨®picos habituales, de las muchas "justificaciones" y las inexistentes razones que avalan su trayectoria asesina, ponen la guinda, la expresi¨®n clave que los espa?oles debieran grabar profundamente en su conciencia cuando alguien -todav¨ªa hay alguien que lo hace- hable del romanticismo de la lucha armada de los etarras. Dice uno de los dos cabecillas de ETA: "Aunque Espa?a se convierta en un modelo de democracia, el sentido de nuestra lucha no cambiar¨¢".Tienen raz¨®n y pocas veces se ha dicho una verdad tan clara y tan terrible al mismo, tiempo. El sentido, el contrasentido -que tiene su l¨®gica interna, desde luego- de la lucha terrorista no puede cambiar. Debe cambiar, eso s¨ª, la terminolog¨ªa, a fin de que nadie se enrede en las palabras. No pueden hablar impunemente de lucha; la palabra exacta, desnuda de intenciones, es actividad, actividad terrorista, t¨¦rmino que se despliega en abanico de desgracias como asesinato, extorsi¨®n, secuestro, atraco, chantaje, etc¨¦tera. Y debe cambiar lo que se ha llamado m¨ªstica del terrorismo. Llam¨¦mosle por su nombre, digamos que se trata de asesinos a sueldo, sin otra m¨ªstica que el dinero, que se ti?e, si acaso, de ideolog¨ªa postiza a efectos de imagen.

15 de enero