El Gobierno franc¨¦s pide un 'esfuerzo suplementario' de austeridad

La nueva pol¨ªtica de austeridad econ¨®mica francesa, forzada por el fracaso de los socialistas en los ¨²ltimos comicios municipales, inspira un escepticismo creciente, sobre todo en el interior de la mayor¨ªa gobernante integrada por los socialistas y comunistas. El ministro de Econom¨ªa, Jacques Delors, responsable n¨²mero uno de la estrategia del rigor, acaba de anunciar un "esfuerzo suplementario" en el sentido de las restricciones, y los partidarios de la pol¨ªtica proteccionista (socialistas o comunistas) le atacan sin duelo.El super ministro, de Econom¨ªa, Finanzas y Hacienda, Jacques Delors, tras haber ladeado a quienes, en la mayor¨ªa gubernamental, eran partidarios de retirar el franco del Sistema Monetario Europeo (SME) para iniciar una fase de econom¨ªa proteccionista, le present¨® al pa¨ªs su pol¨ªtica de rigor, destinada a restablecer los grandes equilibrios sin cortapisar el libre juego de la econom¨ªa de mercado. Menos de un mes despu¨¦s, Delors ya amenaza con retirarse a la vida privada si, en el plazo de los pr¨®ximos seis meses, no alcanza sus objetivos m¨¢ximos: rebajar en un 50% los 93.000 millones del d¨¦ficit del comercio exterior y conseguir que la inflaci¨®n no supere el 8%. A esta postura suicida lo empujan, un d¨ªa y otro, sus adversarios socialistas.

En pocos d¨ªas, todo el entramado de la austeridad francesa se ha resquebrajado como consecuencia de la nueva cabriola del d¨®lar. Delors hab¨ªa hecho todos sus c¨¢lculos para restablecer los equilibrios macroecon¨®micos, bas¨¢ndose en un d¨®lar a siete francos. Pero cada d¨ªa que ha pasado de la semana actual, la divisa americana se ha superado a s¨ª misma y, ayer, se cotizaba a 7,57 francos. El hecho es considerado como catastr¨®fico. Delors, inmediatamente, ha sacado las consecuencias inmediatas: "Es menester un complemento de esfuerzo", lo que quiere decir que los planes anteriores ser¨¢n revisados y que, en ¨²ltima instancia, ¨¦l mismo duda ya seriamente de que a finales de 1983 se rebajen sustancialmente el d¨¦ficit del comercio exterior y la inflaci¨®n.