Las ofertas de compra del Banco Atl¨¢ntico provocan tensiones en la Administraci¨®n

La presentaci¨®n de una oferta conjunta para adquirir el Banco Atl¨¢ntico por parte de capitales ¨¢rabes -libios y kuwait¨ªes principalmente- y del Banco Exterior de Espa?a, con mayor¨ªa de capital p¨²blico, est¨¢ levantando polvareda en la Administraci¨®n, incluso entre los que defend¨ªan en un primer momento esta alternativa. La adjudicaci¨®n a esta oferta mixta, aunque se contempla como la menos mala, no contenta ni a los que consideran que el Atl¨¢ntico deber¨ªa quedar en manos del Estado ni a aquellos que defienden posiciones distintas.

El Consejo de Ministros que debe decidir la venta final tiene que inclinarse por una oferta p¨²blica, mayoritariamente de capital extranjero, y una privada que se interpretar¨¢ como un cap¨ªtulo m¨¢s en la lucha por ocupar un mejor puesto en el ranking de tama?o de la banca espa?ola.La comisi¨®n de reprivatizaci¨®n de las empresas de Rumasa estudi¨® ayer las dos ofertas para la adjudicaci¨®n del Banco Atl¨¢ntico, el mayor de los que fueron expropiados el 23 de febrero del pasado a?o. Dos son las entidades que han presentado ofertas conforme al pliego de condiciones: el Arab Banking Corporation, escoltado por el Banco Arabe Espa?ol y el Banco Exterior de Espa?a, y el Banco de Bilbao.

Ninguna de las dos ofertas sirven de pretexto para las intenciones del Gobierno. Diversos informes que han llegado a manos del Ejecutivo se?alaban la conveniencia de reprivatizar todo el entramado de Rumasa, menos precisamente el Banco Atl¨¢ntico. Los redactores de estos informes se?alaban la necesidad de que este banco, uno de los mayores de los que han pasado por situaciones delicadas, permaneciera en el ¨¢mbito del sector p¨²blico, lo que no significaba que pasara a depender del Exterior. Se pensaba que lo mejor era que continuara conectado directamente con el Patrimonio del Estado, que en esas manos se procediera al saneamiento que se considerara necesario y que, posteriormente, quiz¨¢ en un plazo de tiempo no inferior a cinco a?os, ser¨ªa el momento de plantearse una posible fusi¨®n entre el Exterior y el Atl¨¢ntico.

Reprivatizar a toda costa

Los deseos de la Administraci¨®n de mostrar una voluntad reprivatizadora completa -cuya piedra angular ser¨ªa el Atl¨¢ntico-, ha hecho que esta alternativa no se considerara y se buscaran todas las posibles salidas del sector p¨²blico.El documento elaborado por expertos pr¨®ximos al grupo parlamentario socialista se?alaba que lo deseable ser¨ªa que se reprivatizaran todos los bancos de Rumasa, a excepci¨®n del Atl¨¢ntico, y que fueran adjudicados a los bancos medianos espa?oles o a grandes bancos extranjeros. La soluci¨®n adoptada parece la contraria. Al Atl¨¢ntico ha acudido un gran banco nacional -el Bilbao- y un banco extranjero, grande en cuanto a capital, pero no especialmente ligado a negocios espa?oles.

La oferta mixta ABC-Exterior, que cuenta al menos con el benepl¨¢cito de los representantes de la mayor¨ªa del capital de este ¨²ltimo banco -el Estado- se interpreta en algunos medios financieros como una "soluci¨®n vergonzante" que acepta que un gran banco, sin especiales problemas, cambie a manos extranjeras antes de que se proceda a una soluci¨®n de control p¨²blico. Parece claro que la decisi¨®n del consejo de administraci¨®n del Banco Exterior de sumarse a la oferta conjunta no se tom¨® sin el conocimiento de las autoridades econ¨®micas y monetarias.

La alternativa del Bilbao, que se interpretar¨¢ siempre como una carrera por ocupar posiciones en el ranking, aunque se diga lo contrario, tampoco satisface, porque implica reconocer que el camino de la concentraci¨®n bancaria pasa por la compra de entidades en dificultades y no por decisiones aut¨®nomas de los distintos ¨®rganos de control de los bancos.