Defensores y fiscal coincidieron en evitar preguntas para profundizar en el esclarecimiento de la 'trama civil' del 27-O

Los procesados y testigos en el consejo de guerra por el presunto intento de golpe del 27 de octubre de 1982 no han aportado ning¨²n dato nuevo sobre la trama civil que, seg¨²n informaciones oficiales de entonces, apoyaba la supuesta maniobra involucionista preparada. Ni el fiscal, coronel Fernando Bartolom¨¦, ni los abogados defensores han formulado, a lo largo de las sesiones del consejo de guerra, ninguna pregunta con intenci¨®n de esclarecer la existencia de dicha trama.

Entre los documentos ocupados el 2 de octubre de 1982 al coronel Luis Mu?oz figuraba la estructura y organigrama de unos comandos de obediencia ciega, 80 en total, que deb¨ªan estar integrados por civiles y militares y ten¨ªan como misi¨®n el estrangulamiento y neutralizaci¨®n de los principales resortes de poder del Gobierno y del Estado. Estos comandos ten¨ªan que iniciar su actuaci¨®n a partir de las ocho de la ma?ana del d¨ªa 27 de octubre de 1982, dentro de la llamada operaci¨®n Halc¨®n.

A principios de octubre de ese a?o fueron interrogados por la polic¨ªa los paisanos Juan de Dios Rubio G¨®mez, el Nazi; Carlos Jos¨¦ Echalecu Gonz¨¢lez, Jos¨¦ de la Torre Sanz, Jos¨¦ Carlos Escobar y otros, todos ellos relacionados con organizaciones ultraderechistas. En sus declaraciones a la polic¨ªa, varios de ellos reconocieron que hab¨ªan visitado en la c¨¢rcel al capit¨¢n de la Guardia Civil Francisco Acera Mart¨ªn, condenado por su participaci¨®n en el 23-F.

Echalecu dijo a la polic¨ªa, seg¨²n consta en el sumario, "que se encontraba en contacto directo con un capit¨¢n de la Guardia Civil (Acera), que recib¨ªa instrucciones directas de ¨¦l y que la idea, en l¨ªneas generales, consist¨ªa en crear una estructura civil formada por tres clases de grupos, compuestos por tres o cuatro individuos y con un funcionamiento an¨¢logo a las c¨¦lulas comunistas o comandos de ETA". A?adi¨® que todo "desembocar¨ªa en una participaci¨®n activa como comandos operativos de acci¨®n en apoyo a un inminente golpe militar".

Echalecu y sus compa?eros rectificaron ante el juez similares declaraciones. Ayer declararon en el consejo de guerra, como testigos, Echalecu, De la Torre y Arturo Herr¨¢ez. Los tres dijeron que no conoc¨ªan a los procesados, y cuando, a preguntas del fiscal, Echalecu reconoci¨® que un tal Dami¨¢n Garc¨ªa Gasc¨®n, ex funcionario de la polic¨ªa, le hab¨ªa presentado al capit¨¢n Acera en la c¨¢rcel, el fiscal dio por terminado el interrogatorio y no le pregunt¨® el motivo o contenido de dicha entrevista.

Se da la circunstancia de que la sesi¨®n del consejo de guerra de ayer fue seguido entre el p¨²blico por el propio capit¨¢n Acera. A t¨¦rmino de la sesi¨®n de la tarde, y poco antes de abandonar el recinto del Gobierno Militar de Madrid, salud¨® y charl¨® durante unos segundos con el procesado teniente coronel Juan Fern¨¢ndez Hidalgo, quien no pernocta en dicho recinto debido a que se encuentra en libertad provisional.

En relaci¨®n con los mismos hechos prest¨® declaraci¨®n, tambi¨¦n como testigo, el sargento Juan Montero Ram¨ªrez, actualmente en la prisi¨®n militar de Alcal¨¢ de Henares por estar condenado a tres a?os de prisi¨®n por tenencia de explosivos. Montero tambi¨¦n fue detenido en octubre de 1982 y fue interrogado sobre los comandos de obediencia ciega. "Me parec¨ªa aquello una broma", afirm¨® ayer el sargento.

Su testimonio lo prest¨® acompa?ado de un subteniente de la Guardia Civil y de un guardia, armado con un subfusil, quienes le acompa?aban en su desplazamiento desde Alcal¨¢ de Henares. Con excepci¨®n de este suboficial, los dem¨¢s paisanos interrogados en octubre de 1982 sobre la trama civil fueron puestos en libertad antes de finalizar dicho a?o sin ning¨²n cargo en su contra.

A petici¨®n del letrado Adolfo de Miguel, declar¨® tambi¨¦n el testigo Luis Comyn Maturana, abogado y conocido de los coroneles procesados. El letrado Zugasti le pregunt¨® si hab¨ªa recibido propuestas para formar parte de la trama civil, y el testigo respondi¨®: "?A m¨ª...? Con 62 a?os, arteriosclerosis, Parkinson, un bast¨®n..., dif¨ªcilmente han podido proponerme para una trama civil".

Durante las distintas fases del proceso no fue interrogado en ninguna ocasi¨®n el capit¨¢n Acera. Tampoco lo ha sido Jos¨¦ Mar¨ªa de Oriol y Urquijo, con quien se entrevist¨® en dos ocasiones, poco antes de su detenci¨®n, el teniente coronel Jos¨¦ Enrique Crespo, uno de los cuatro acusados que se sientan en el banquillo en este proceso.