El PSOE y Euskadi

Deia

Algunos personajes del PSOE no cesan en su obsesi¨®n antinacionalista y no . pierden oportunidad de lanzar sus alfilerazos, a veces aut¨¦nticas difamaciones, contra el nacionalismo vasco. (...)Es normal que un pol¨ªtico profesional, como el vicepresidente del Gobierno espa?ol, entre en pol¨¦mica con un grupo con el que discrepa frontalmente. Lo que es poco ¨¦tico, y no es la primera vez que sucede, es que manipule, simplifique y tergiverse las posiciones nacionalistas, acusando al nacionalismo vasco de no estar comprometido en la lucha contra el terrorismo y de ser insolidario en materia econ¨®mica con el resto del Estado. (...)

Algunos analistas pol¨ªticos est¨¢n convencidos de que el Gobierno socialista ha cosechado tantos y tan rotundos fracasos en sugesti¨®n, muy especialmente en pol¨ªtica econ¨®mica y social, que necesitan presentarse al pr¨®ximo XXX Congreso de su partido con lo que puede considerarse como un triunfo, para as¨ª intentar frenar las graves cr¨ªticas de Izquierda Socialista contra el sector felipista.

Y el ¨²nico ¨¦xito que el Gobierno central puede aportar en este momento es su lucha contra ETA. Para ello est¨¢n utilizando todos los recursos que est¨¢n a su alcance. En ese contexto hay que situar una ofensiva ant¨ªnacionalista, porque el nacionalismo democr¨¢tico' vasco es la ¨²nica voz con autoridad moral capaz de criticar seria y responsablemente la actuaci¨®n socialista en este tema. (...)

Una forma de desviar la atenci¨®n de su propia crisis interna y del fracaso de su gesti¨®n es un hostigamento a lo vasco en todo lo que ¨¦ste tiene de contenido nacional. El rival ya no es s¨®lo ETA, o el arco pol¨ªtico que pueda apoyar a las organizaciones armadas, sino a todas las fuerzas nacionalistas abertzales, muy especialmente al PNV. En este esquema el socialismo quiere resucitar el antivasquismo que hay latente en otros sectores y grupos espa?oles. Lo vasco se convertir¨ªa en el chivo expiatorio de muchos males del Estado y, a la vez, en la pantalla que ocultara la pobreza de las realizaciones del Gobierno socialista y su actual crisis de identidad.

Teniendo como punto de referencia estas claves, en cualquiera de sus versiones, del actual equipo dirigente del PSOE, habr¨¢ que prestar atencion a los futuros movimientos, empe?ado en practicar una estrategia de la tensi¨®n en Euskadi, muy especialmente frente al nacionalismo, en cuanto que ¨¦ste tiene una amplia credibilidad democr¨¢tica por su limpia trayectoria y por el amplio apoyo que tiene en su electorado. (...)

Por muchas estrategias socialistas que se planifiquen contra Euskadi, al final siempre tropezar¨¢n con la sana tozudez de un pueblo que quiere su pleno autogobierno en paz y libertad. Es algo que el actual Gobierno del PSOE, por su fuerte talante autoritario y centralista, no ha terminado de aprender.

22 de agosto