Se fuga uno de los acusados del incendio en el que muri¨® el padre del teniente coronel Cortina
Guillermo Isaza, uno de los tres acusados de haber provocado el incendio que el 26 de mayo de 1983 destruy¨® la vivienda de la calle de Biarritz de Madrid y origin¨® la muerte de Antonio Cortina, padre del teniente coronel del mismo apellido absuelto de haber participado en el golpe fallido del 23-F, se encuentra en paradero desconocido y pesa sobre ¨¦l una orden de b¨²squeda y captura, seg¨²n informaron fuentes jur¨ªdicas.
Isaza, al igual que otro de los procesados por estos hechos, Isa¨ªas V¨¢zquez Ovalle, fue puesto en libertad provisional en agosto pasado, despu¨¦s de cumplir dos a?os de prisi¨®n preventiva a la espera de juicio, que no se ha celebrado. Isaza aprovech¨® la salida de la prisi¨®n para huir, mientras que V¨¢zquez Ovalle, seg¨²n las citadas fuentes, contin¨²a escrupulosamente el r¨¦gimen de presentaciones ante la Audiencia Provincial.Se da la circunstancia de que Isaza es f¨¢cilmente reconocible, pues tiene inmovilizado el brazo derecho. Un informe forense aportado al sumario dictamin¨® la invalidez eventual de Isaza, que a principios de 1983 perdi¨® todo movimiento en ese brazo.
El tercer procesado, el colombiano Luis Carlos Pulido, permanece en prisi¨®n, a pesar de haber cumplido el plazo de prisi¨®n preventiva marcado en la ley, porque ni ¨¦l ni su abogado, designado de oficio, han solicitado la libertad provisional.
50 a?os de c¨¢rcel
El abogado de la acusaci¨®n particular ha solicitado penas por un total de 50 a?os de reclusi¨®n para V¨¢zquez Ovalle, Isaza y Pulido, como presuntos autores de delitos de asesinato e incendio. El fiscal, que ha retirado la acusaci¨®n por falta de pruebas sobre las que sustentar la acusaci¨®n, ha pedido en tres ocasiones la libertad de los tres acusados.La Audiencia Provincial mantuvo los procesamientos y la situaci¨®n de prisi¨®n para los tres implicados, de acuerdo con la acusaci¨®n particular, y se?al¨® que est¨¢ acreditado que Antonio Cortina falleci¨® por intoxicaci¨®n de mon¨®xido de carbono a ra¨ªz de un incendio provocado.
La sala a?adi¨® que los procesados hab¨ªan reconocido ante la polic¨ªa que entraron en la vivienda del fallecido y que al ser sorprendidos por el anciano le inmovilizaron, le pusieron un coj¨ªn en la cara y prendieron fuego a la vivienda para borrar pistas.
Aunque posteriormente todos ellos alegaron haber sido forzados a prestar la declaraci¨®n autoinculpatoria, seg¨²n la Audiencia hay m¨¢s de un testigo que afirma que el procesado que m¨¢s detalles hab¨ªa dado sobre los hechos al ser puesto en libertad se vanagloriaba de haber sido el autor de los hechos y haber conseguido la libertad alegando malos tratos de la polic¨ªa. (Se refiere a Luis Carlos Pulido, que fue puesto en libertad provisional a los pocos d¨ªas de los hechos, al parecer por un error del juez, ya que inmediatamente ¨¦ste orden¨® su ingreso en prisi¨®n).
Otro de los procesados, que reconoci¨® su participaci¨®n en comisar¨ªa, prest¨® su declaraci¨®n asistido por un abogado. Este letrado manifest¨® ante el juez que la declaraci¨®n hab¨ªa sido de desarrollo normal, aunque intensa.
Los acusados afirmaron haberse apoderado de una cantidad de dinero, que era el objetivo de la entrada en la vivienda, y que tuvieron que marchar precipitadamente al ser sorprendidos por el difunto.
Luis Carlos Pulido, colombiano de 40 a?os, fue detenido en agosto de 1983 y confes¨® ante la polic¨ªa ser autor material de la muerte de Antonio Cortina en su domicilio de la calle de Biarritz, n¨²mero 3. Precisamente esa vivienda sali¨® a relucir en el consejo de guerra por el golpe de Estado frustrado del 23-F, ya que el teniente coronel Tejero asegur¨® que se hab¨ªa reunido en ella con el entonces comandante Cortina, del CESID, mientras que ¨¦ste neg¨® que la reuni¨®n hubiera tenido lugar.
Pulido, en su declaraci¨®n, implicaba tambi¨¦n a Isaza y V¨¢zquez, que fueron detenidos a los pocos d¨ªas, cuando ¨¦l se encontraba ya en libertad provisional.
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