Aclaraci¨®n sobre los pacifistas

Soy conciente de que es pr¨¢cticamente imposible que una entrev¨ªsta de dos horas pueda condensarse en su versi¨®n escrita con todos los matices e ideas que pretende transmitir quien habla, como sucede, en mi caso, con la publicada en este diario el domingo 6 de abril. Es l¨®gico que eso suceda.Sin embargo, en la entrada, titulares y un paso de la entrevista aparecen dos errores que pueden inducir a confusiones al lector. Ni la Coordinadora de Organizaciones Pacifistas de Catalu?a ni la estatal (la CEOP) tienen portavoces fijos. La CEOP eligi¨® a 10 para la campa?a del refer¨¦ndum, tres de los cuales eran de Catalu?a. Yo fui uno de ellos, pero, como todos los dem¨¢s, dej¨¦ de serlo tras la consulta del pasado 12 de marzo.

No pertenezco a la revista Tiempo de Paz, sino al consejo de redacci¨®n de otra revista, En Pie de Paz, cuyo n¨²mero cero apareci¨® en la primera quincena de febrero, recog¨ªendo la experiencia de las publicaciones En Peu de Pau y Euroshima. En Pie de Paz pretende convertirse en lugar de encuentro de gentes que trabajan por la paz, el desarme y el desarrollo, viven en lugares diferentes y provienen de tradiciones diferentes. Nos une la coincidencia en parecidas dudas y convicciones y el empe?o en vertebrar una cultura pacifista que nos permita ir aprendiendo a armonizar la vida personal con la acci¨®n p¨²blica. Como dec¨ªamos en el editorial de nuestro primer n¨²mero, "no es el miedo a morir lo que nos mueve, sino la esperanza de pensar que el hombre puede aprender a convivir sin rnatar".

La veracidad, tina de las se?as de identidad de nuestro proyecto, puede explicar Por qu¨¦ uno se siente inc¨®modo ante errores como los comentados.-