Las nuevas t¨¦cnicas reproductivas crean una falsa demanda, seg¨²n las feministas

ENVIADA ESPECIALLa aplicaci¨®n incontrolada de las nuevas tecnolog¨ªas de reproducci¨®n asistida, particularmente la fecundaci¨®n in vitro y la inseminaci¨®n artificial, est¨¢ provocando una demanda sanitaria ficticia, que no corresponde a necesidades reales de la poblaci¨®n, seg¨²n una ponencia debatida en la I Conferencia Feminista Europea sobre Tecnolog¨ªas reproductivas e ingenier¨ªa gen¨¦tica, que se celebra desde el s¨¢bado en Palma de Mallorca, organizada por la asociaci¨®n feminista internacional Finrage y con un centenar de asistentes.

La demanda ficticia es inducida por motivos lucrativos o para facilitar la experimentaci¨®n biogen¨¦tica, particularmente la investigaci¨®n sobre congelaci¨®n de embriones y el embarazo extrauterino. La falta de informaci¨®n sobre los peligros de algunas de estas t¨¦cnicas tambi¨¦n sobre sus resultados efectivos convierte, seg¨²n las ponentes, a muchas mujeres en v¨ªctimas de poderosos intereses econ¨®micos de los laboratorios bioqu¨ªmicos, mientras que es una exigua minor¨ªa de mujeres la que, al padecer problemas de esterilidad irresolubles por otros medios, se beneficia de estos avances.La necesidad de regular la aplicaci¨®n de estas, tecnolog¨ªas se ha traducido en la creaci¨®n de comisiones de valoraci¨®n ¨¦tica en la mayor¨ªa de los pa¨ªses europeos. En ellas, seg¨²n revelaron diferentes ponentes, la participaci¨®n de la mujer ha sido ¨ªnfima y en algunos casos nula, pese a ser ella el objeto central de las investigaciones. La abogada Mar¨ªa Jos¨¦ Varela, secretaria de la Comisi¨®n de Mujeres Abogadas del Colegio de Abogados de Barcelona, realiz¨® ayer una exhaustiva cr¨ªtica a las contradicciones de legalidad en que, a su juicio, incurre el informe elaborado por la comisi¨®n parlamentaria espa?ola, presidida por el diputado Santiago Palacios.

Responsables

Mar¨ªa Jos¨¦ Varela destac¨® especialmente el hecho de que el informe "deja muy claro que los m¨¦dicos no son responsables de nada de lo que sucede en la experimentaci¨®n de estas t¨¦cnicas".La falta de informaci¨®n de las usuarias y de control social sobre lo que realmente. sucede en los centros sanitarios que aplican estas tecnolog¨ªas conforma una situaci¨®n de peligro para la mujer, a la que, seg¨²n las feministas, es urgente poner fin.

Al respecto, las representantes espa?olas denunciaron que en este pa¨ªs no se exija ning¨²n tipo de documentaci¨®n cient¨ªfica especial para aplicar estas tecnolog¨ªas, de modo que cualquier centro sanitario puede emprender programas sobre las t¨¦cnicas m¨¢s arriesgadas sin que se le exijan garant¨ªas sobre su idoneidad. Producto de esta situaci¨®n son, seg¨²n Consuelo Catal¨¢, del Departamento de Salud de la Comunidad Valenciana, sucesos tan graves como el ocurrido en diciembre en Sevilla, que cost¨® al vida a una mujer que se someti¨® a un pro grama de fecundaci¨®n in vitro en un centro privado.

La v¨ªctima, Andrea Dom¨ªnguez, de 38 a?os, de Huelva, fue sometida a una laparoscopia durante la cual se le perfor¨® el peritoneo, con el agravante de que el m¨¦dico no se dio cuenta de ello. El esposo de Andrea Dom¨ªnguez ha interpuesto una querella criminal contra los responsables del centro. Consuelo Catal¨¢ propuso que las organizaciones feministas se constituyan en acusaci¨®n popular en este caso, paradigm¨¢tico, en su opini¨®n, de la grave falta de control con que muchos centros operan.