El dinero tiembla en Panam¨¢
La crisis desatada hace mes y medio amenaza a uno de los principales centros bancarios del mundo
El temor, la expectativa y la incertidumbre se han apoderado del centro financiero internacional de Panam¨¢ como consecuencia de una crisis pol¨ªtica que ha causado los peores efectos econ¨®micos que recuerdan los propietarios de las 125 entidades financieras extranjeras establecidas en ese pa¨ªs. Seg¨²n c¨¢lculos oficiales, unos 1.000 millones de d¨®lares han sido transferidos a otros lugares m¨¢s seguros desde que, a comienzos del pasado mes de junio, se iniciaron las manifestaciones contra el hombre fuerte del pa¨ªs, el general Manuel Antonio Noriega. La situaci¨®n, sin embargo, no amenaza a¨²n con poner en peligro el mantenimiento de Panam¨¢ como primer centro bancario de Am¨¦rica Latina y uno de los primeros del mundo.
La fuga de dep¨®sitos, a juicio de la m¨¢xima autoridad del Estado en materia financiera, el presidente de la Comisi¨®n Nacional Bancaria, Mario de Diego, "es algo normal, que responde al nerviosismo que produce la forma como cada individuo concibe lo que est¨¢ sucediendo". Conf¨ªa en que, pasado el momento de m¨¢xima tensi¨®n, la parte sustancial del dinero que ha salido vuelva a Panam¨¢. De Diego cita como precedentes los de otros centros bancarios, Hong Kong y Suiza, que en el pasado se vieron seriamente afectados, respectivamente, por los acuerdos entre China 37 el Reino Unido y la congelaci¨®n de las cuentas de Marcos y Duvalier. En ambos casos, los fondos transferidos regresaron a sus bancos de origen al poco tiempo.
Prudencia y espera
La cantidad transferida hasta el momento no supone una cifra alarmante en relaci¨®n con el montante total de 32.167 millones de d¨®lares depositados en Panam¨¢, seg¨²n los datos oficiales de marzo, pero s¨ª ha dado lugar a lo que un banquero extranjero denomina "situaci¨®n de expectativa". Algunos de sus clientes con dep¨®sitos a plazo fijo le han pedido reducir ¨¦ste a 30 o 60 d¨ªas, mientras que ¨¦l mismo ha notado que existen "depositantes esperando antes de tomar una decisi¨®n" y ha dado instrucciones de prudencia inversora.Este banquero asegura que "lo que m¨¢s efecto produjo fue el momento de tensi¨®n que a finales de junio se suscit¨® con Estados Unidos". En esa fecha, un grupo de manifestantes atac¨® la Embajada norteamericana, despu¨¦s de que el Senado de ese pa¨ªs aprobase una resoluci¨®n contr¨¢ el general Noriega. "Parte de la confianza de Panam¨¢ como centro bancario", explica, "est¨¢ basada en la posici¨®n que Estados Unidos tiene en este pa¨ªs. El surgimiento de dificultades en las relaciones con los norteamericanos afectar¨ªa, por tanto, de forma muy negativa
Como factores positivos, esta misma fuente se?ala el hecho de que "hasta ahora no se hayan producido muertos ni violencia ni se haya planteado la crisis como un conflicto ideol¨®gico". En efecto, ninguno de los dos bandos se presenta como enemigo de los bancos extranjeros. Desde luego, no los que desde la oposici¨®n defienden una salida conservadora a la crisis, pero tampoco aquellos que en el regimen exponen planteamientos nacionalistas. El propio Omar Torrijos supo encontrar muy bien el punto de convivencia con la banca internacional desde una perspectiva progresista y socializante.
Los banqueros no ven "un peligro nacionalizador ni a corto ni a largo plazo", y tampoco manejan la posibilidad de la llegada al poder de gobernantes hostiles a sus intereses. El peligro, bajo su punto de Vista, puede venir por el enquistamiento de la actual crisis, lo que podr¨ªa perjudicar a la gobernabilidad y al funcionamiento de los servicios.
Para un representante de la banca internacional, Panam¨¢ podr¨¢ volver a ser el centro seguro y tranquilo que ha sido hasta ahora "siempre que se encuentre una soluci¨®n pronto". "Si la situaci¨®n actual se mantiene tres o cuatro meses m¨¢s, el centro se va a ir drenando poco a poco". La preocupaci¨®n de esta fuente es que, con el tiempo, las comunicaciones empiecen a fallar y la seguridad en las calles se deteriore de tal manera que los clientes de los bancos tengan miedo de viajar hasta Panam¨¢.
Los banqueros y las autoridades financieras paname?as consideran que la situaci¨®n actual no puede separarse de la competencia establecida entre los centros bancarios del continente por el control del mercado. Descartado Bahamas, todav¨ªa muy incipiente, Miami es la gran rival de Panam¨¢, por absorber el dinero de los inversionistas latinoamericanos. Su papel en todo lo que est¨¢ ocurriendo no ha sido determinado, pero un banquero calcula que "gran parte del dinero que ha salido ha ido para Miami".
Un momento cr¨ªtico para el centro paname?o fue la de prin cipios de este a?o, cuando las t¨ªmidas medidas del Gobierno contra el narcotr¨¢fico -la operaci¨®n Piscis pusieron en duda el secreto bancario, condici¨®n imprescindible para atraer dep¨®sitos. Una ley que tipificaba el lavado de dinero y permit¨ªa te¨®ricamente investigar las cuentas relacionadas con el comercio de drogas ahuyent¨® varios cientos de millones de d¨®lares.
Escrupuloso silencio
Desde ese momento las autoridades paname?as se han esforzado por convencer a los bancos de que el m¨¢s escrupuloso secreto sigue vigente y de que, como dice De Diego, "es falso, jam¨¢s ha sucedido ni va a suceder que el sistema bancario se abra a los investigadores".Adem¨¢s, Panam¨¢ sigue ofreciendo ventajas a los bancos extranjeros por otras caracter¨ªsticas de su econom¨ªa. no emite papel moneda -el circulante es el d¨®lar- y no existe control de las transferencias.
Cualquier persona que quiera depositar una determinada cantidad de dinero, no importa cu¨¢l sea, en un banco paname?o s¨®lo tiene que enviar un t¨¦lex con sus datos b¨¢sicos y abrir una cuenta, sin m¨¢s requisitos ni controles. De Diego garantiza que "esto no va a cambiar de ninguna forma". "Ning¨²n hecho pol¨ªtico, cualquiera que sea el resultado final, va a afectar a los principios que han hecho de Panam¨¢ un centro bancario".
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