Mirko Novosel, un t¨¦cnico muy especial

Algunos medios radiof¨¢nicos destacados a Zagreb se encontraron de bruces con la noticia de que les esperaba el t¨¦cnico Mirko Novosel para cobrarles 400 d¨®lares (unas 45.000 pesetas) per c¨¢pita si quer¨ªan ofrecer el partido. ?Qu¨¦ hace un t¨¦cnico dedic¨¢ndose a cuestiones tan particulares y tan aparentemente fuera de su competencia? Hay que entender, para ello, la idiosincrasia de los clubes yugoslavos.Mirko Novosel es la Cibona de Zagreb, como era notorio hace tiempo cuando resultaba que el t¨¦lex del club se hallaba ubicado en su domicilio privado. Novosel es quien ficha, contrata, hace y deshace, y es el prohombre de una de las formas de hacer negocio que est¨¢n llevando los yugoslavos en Europa: gusta de cobrar dinero negro y sabe que venden una mercanc¨ªa buena y barata en deportes como el f¨²tbol, el baloncesto y el balonmano.

Pero el caso Novosel es ¨²nico. La Cibona fue el primer equipo que llev¨® publicidad espa?ola en sus camisetas -a¨²n la sigue llevando, la misma que llev¨®, curiosamente, el Partizan de Belgrado en su visita a Barcelona-.

Es una publicidad que se contrata casi sin intermediarios y que escapa al control de las televisiones respectivas. Ahora Novosel le ha sacado un dinero imprevisto a Televisi¨®n Espa?ola y, de paso, quiere hacer pasar por caja a las radios. Y es que el mercado yugoslavo es muy asequible: cotiza en d¨®lares, est¨¢n abiertos a cualquier propuesta y les gusta las peque?as cantidades bajo cuerda. Y siempre tienen prisa para vender. As¨ª, por ejemplo, se envi¨® a Madrid a Petrovic, con prisas y con Novosel cte por medio controlando las comisiones. Un caso muy especial de t¨¦cnico, seleccionador y recaudador.