Alfons¨ªn presenta su dimisi¨®n formal como presidente de Argentina
CARLOS ARES, El presidente de Argentina, Ra¨²l Alfons¨ªn, y el vicepresidente, V¨ªctor Mart¨ªnez, enviaron ayer al Congreso textos de renuncia a sus cargos, tal como lo hab¨ªa anunciado el primero cuando decidi¨® "resignar" la jefatura del Estado, hace 20 d¨ªas. Con este tr¨¢mite formal se activa el mecanismo parlamentario, pactado entre radicales y peronistas, para acortar el plazo entre las elecciones generales, que se celebraron el pasado 14 de mayo, y el traspaso del poder, que deb¨ªa realizarse el pr¨®ximo 10 de diciembre, seg¨²n lo establece la Constituci¨®n.
La Asamblea legislativa, luego de aprobar el escrutinio de los votos, va a proclamar el pr¨®ximo viernes a los candidatos peronistas Carlos Menem y Eduardo Duhalde, como presidente y vicepresidente electos. El s¨¢bado 8 de julio se reanudar¨¢ la sesi¨®n de ambas c¨¢maras para aceptar las renuncias de Alfons¨ªn y Mart¨ªnez y, de inmediato, el senador Eduardo Menem -en su condici¨®n de presidente provisional de Asamblea- tomar¨¢ el juramento de pr¨¢ctica a su hermano Carlos. Una vez cumplidos esos requisitos, el nuevo presidente se dirigir¨¢ desde el edificio del Congreso hasta la Casa Rosada, sede del Gobierno, para recibir all¨ª la banda y el bast¨®n, los dos s¨ªmbolos tradicionales del poder ejecutivo, que le entregar¨¢ Alfons¨ªn.
Menem, en Buenos Aires
En realidad, el verdadero poder se traspas¨® al d¨ªa siguiente del anuncio en que Alfons¨ªn comunic¨® al pa¨ªs que hab¨ªa aceptado lo inevitable. Desde entonces no se recuerda ninguna medida de gobierno, aparte de los aumentos semanales de las tarifas por los servicios de las empresas p¨²blicas y del cese del estado de sitio, que se hab¨ªa impuesto por 30 d¨ªas.
Menem, que atiende en Buenos Aires y descansa los fines de semana en La Rioja, provincia de la que a¨²n es gobernador, concentra la atenci¨®n y las demandas de la sociedad. Una corte de ministros y secretarios ya nombrados le persigue a todas partes.
El nuevo presidente no podr¨¢ gozar de forma incondicional, como es costumbre en las democracias consolidadadas, de sus primemos 100 d¨ªas en el Gobierno. La desesperaci¨®n de una sociedad acosada por la hiperinflaci¨®n -se calcula un alza del 130% s¨®lo en junio y se espera entre el 180% y el 200% para julio- devora los plazos.
Algunos funcionarios designados han renunciado antes de asumir y otros fueron reemplazados luego de que se anunciara p¨²blicamente su designaci¨®n. El Gobierno de "unidad nacional" propuesto por Menem ha incluido s¨®lo a representantes de la derecha, entre los que aparecen hist¨®ricos antiperonistas. Esa alianza es bendecida por la Iglesia y ser¨¢ protegida por las fuerzas armadas, a las que el futuro presidente piensa "recuperar" con la firma de indultos selectivos para los oficiales que fueron condenados o a¨²n contin¨²an bajo proceso, acusados de cr¨ªmenes y violaciones a los derechos humanos durante la dictadura.
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