El Parlamento Europeo debe tomar parte en la aprobaci¨®n de la Carta Social de la CE, seg¨²n su presidente

"El Parlamento Europeo tiene que tomar parte en la aprobaci¨®n de la Carta Social de la Comunidad Europea", declar¨® ayer a este peri¨®dico Enrique Bar¨®n, presidente de la Euroc¨¢mara. Bar¨®n, que se ha entrevistado en Par¨ªs con el presidente Frangois Mitterrand y el primer ministro Michel Rocaxd, cree que la presidencia franeesa de la CE plantear¨¢ en la pr¨®xima cumbre de Estrasburgo la ref¨®rma. institucional de la Comunidad si cuenta con el apoyo de otros pa¨ªses, en especial de la RFA.El primer acto de la gira europea iniciada por Bar¨®n tuvo por escenario Par¨ªs, el jueves y el viernes. La participaci¨®n del Parlamento Europeo en la aprobaci¨®n de la Carta Social y en la conferencia intergubernamental para la uni¨®n monetaria fueron los temas claves del encuentro."Mitterrand, en su papel de presidente de turno de la CE", afirma Bar¨®n, "rnostr¨® una coin-cidencia grande con nuestros planteamientos, porque entiende que contar con un aliado como el Parlamento nunca est¨¢ de m¨¢s". Y los eurodiputados reclaman con insistencia "un mayor equilibrio democr¨¢tico dentro de, la Comunidad", que permita compartir el monopolio legislativo de los Gobiernos.

El posible veto brit¨¢nico y la actitud de algunos tapados, como Holanda y Portugal, en opini¨®n de Bar¨®n, mantienen la incertidumbre sobre la aprobaci¨®n de la Carta Social Europea en la pr¨®xima cumbre de Estrasburgo, los pr¨®ximos 8 y 9 de diciembre. La presidencia francesa est¨¢ preocupada porque su protagonismo se quede reducido a la simple fijaci¨®n de una fecha para la conferencia intergubernamental sobre la uni¨®n monetaria. Por eso, seg¨²n fuentes comunitarias, no se descarta que "intente salvar la cumbre por elevaci¨®n, con una propuesta de reforma de los tratados de la CE".

La extensi¨®n de la regla de la mayor¨ªa a los campos de decisi¨®n en los que a¨²n rige la unanimidad requiere muchos apoyos, en especial el de la RFA. S¨®lo de esa manera se puede intentar vencer la intransigencia de Margaret Thatcher. El problema es .c¨®rno forzarle la mano a un Helmut Kohl condicionado por las elecciones alemanas de diciembre".

La falta de temas est¨¢ impulsando a Francia a presentar otras propuestas. Adem¨¢s de la pol¨ªtica de medio ambiente, est¨¢ en estudio un plan contra la droga que Mitterrand espera perfilar en su pr¨®xima visita a Latinoa ,m¨¦rica. El Gobierno franc¨¦s est¨¢ preocupado por la regulaci¨®n de sectores como el transporte a¨¦reo y las telecomunicaciones, incluida la televisi¨®n, pero sin olvidar el ordenamiento y control de estos mercados, que caen cada vez m¨¢s en manos de la penetraci¨®n norteamericana y japonesa.

En cuanto a la Carta Social, Bar¨®n acepta su aprobaci¨®n como una declaraci¨®n solemne que se incorpore al acervo constitucional de la CE, "Pero se trata de darle luego su m¨¢ximo sentido a trav¨¦s de un programa de desarrollo legislativo y resolver as¨ª en la pr¨¢ctica la pol¨¦mi?a sobre su car¨¢cter vinculante. "El Parlamento", dice, "tambi¨¦n tiene que desempe?ar un papel en esta fase, y es necesario extender el procedimiento de cooperaci¨®n al espacio social". Este mismo planteamiento fue hecho hace un mes al presidente de la Comisi¨®n Europea, Jacques Delors.