El Mil¨¢n deja al Barcelona sin la Supercopa
ENVIADO ESPECIAL A las gentes de dinero les gustan grandes casas, enormes fortunas, maravillosos coches, cuadros de valor y familias ricas. A algunos de esos millonarios, a ciertos magnates, tambi¨¦n les entusiasma el f¨²tbol. No tanto en su faceta deportiva como en su vertiente social, y as¨ª, bajo esas coordenadas, llegaron gentes como Josep Llu¨ªs N¨²?ez, Ram¨®n Mendoza o Silvio Berlusconi a las presidencias de clubes.
De todos ellos, claro, el m¨¢s rico, el m¨¢s caprichoso, el m¨¢s poderoso, es Berlusconi, que por algo tiene, s¨ª, el mejor club de Europa, s¨ª el mejor equipo. Y como lo tiene, lo ense?a. As¨ª se divierte el hombre. Anoche volvi¨® a pas¨¢rselo en grande.
Berlusconi tiene todo un ritual que trata de cumplir a la perfecci¨®n. Al mediod¨ªa invita a sus colegas rivales -esta vez fueron N¨²?ez, Casaus y Gaspart- a su mansi¨®n en las afueras de Mil¨¢n. Por la noche, les cita en el palco de San Siro y entonces, s¨®lo entonces, les ense?a su mayor fortuna: el Mil¨¢n.
Eso lleva haciendo con Mendoza, que, pese a ser amigo suyo, ha tenido que encajar ya un 5-0 y un 2-0. Ayer le toc¨® el turno a N¨²?ez. Le invit¨® a comer, le ense?¨® su casa y le endos¨® un milagroso 1-0.
Cruyff fue en las v¨ªsperas, tan osado como siempre, dijo que su equipo no encajar¨ªa el 5-0 del Madrid. Claro, tanto que se limit¨® a jugar a un te¨®rico contragolpe, dejando la iniciativa al Mil¨¢n, utilizando un fuera de juego feroz, pero no disparando ni una sola vez a puerta.
Y eso que Cruyff hab¨ªa asegurado, pedido, sugerido, tras ser eliminado por el Anderlecht en la Recopa, que su equipo deb¨ªa defender su prestigio ganando esta Supercopa. En Barcelona y en Mil¨¢n, el equipo de Sacchi ha sido muy superior, tanto en el aspecto t¨¢ctico -anoche ambos conjuntos volvieron a reducir el terreno de juego a la franja de 30 metros que rodea la l¨ªnea del centro del campo- como en el t¨¦cnico.
Como ya sucediera en el Camp Nou, los italianos tuvieron siempre una mejor transici¨®n defensa-ataque. De poco sirvi¨® el excelente marcaje de L¨®pez Rekarte y Serna sobre Van Basten; el sacrificio de Alexanco, que acab¨® cojo, o el trabajo de Zubizarreta.
Para el Mil¨¢n, el trofeo de anoche era el tercero conquistado en los ¨²ltimos seis meses, despu¨¦s de ganar la Copa de Europa y la Supercopa de Italia. Y ahora se va a Tokio a ganar la Intercontinental. Para el Barcelona fue la s¨¦ptima derrota oficial de los 11 encuentros disputados fuera del Camp Nou, y no lo perdi¨® por 5-0 porque Dios no quiso.
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