Juan Guerra utiliz¨® dependencias del Estado desde principios de 1983 hasta mayo de 1989
El despacho utilizado por Juan Guerra en la delegaci¨®n del Gobierno en Andaluc¨ªa permaneci¨® abierto desde los primeros meses de 1983 hasta mayo de 1989. En este per¨ªodo de tiempo, el hermano del vicepresidente del Gobierno utiliz¨® los servicios de ordenanzas y conductores, pero tambi¨¦n de ciudadanos particulares, ajenos a la estructura de la delegaci¨®n y fuera de todo control por parte de los diferentes responsables -Leocadio Mar¨ªn, Tom¨¢s Azor¨ªn y Alfonso Garrido- que se sucedieron en dicho organismo del Estado.A finales de mayo de 1989, Carlos Sanju¨¢n, secretario general del PSOE de Andaluc¨ªa, indic¨® a Juan Guerra que no deb¨ªa aparecer m¨¢s en p¨²blico con el vicepresidente del Gobierno, tras haberle retirado previamente el uso del despacho. El mitin celebrado en la localidad sevillana de ?cija, el 29 de mayo de 1989, fue el primer acto electoral en que Juan Guerra ya no apareci¨® junto a su hermano.
Unos meses antes, dos de los tres socios de la empresa Construcci¨®n Modular Andaluza hab¨ªan decidido vender las acciones de la misma que estaban en su poder. Juan Guerra -representado en esa sociedad por un testaferro- manej¨® la operaci¨®n de venta de la compa?¨ªa a un grupo de inversores de Jerez, entre los cuales se encontraba Sebasti¨¢n Romero, militante del Partido Andalucista y hombre de confianza de Pedro Pacheco, el alcalde jerezano.
Las negociaciones para la venta se realizaron en el despacho de Jos¨¦ Luis Arredondo, abogado de Jos¨¦ Garrido, que era el consejero-delegado de la compa?¨ªa y ahora es tambi¨¦n el presidente de Puerto Zahara, la empresa que aspira a urbanizar terrenos militares en Barbate (C¨¢diz).
En el bufete del abogado Arredondo se redactaron hasta media docena de documentos de compra-venta diferentes. "Desde aqu¨ª", explica el abogado, "se realizaron numerosas llamadas al despacho de Juan Guerra en la Delegaci¨®n del Gobierno". Fue justamente Juan Guerra el que modific¨® las condiciones de venta de Construcci¨®n Modular Andaluza al grupo de Jerez.
?ste es el ¨²ltimo negocio de Juan Guerra que ha podido documentarse durante su estancia en la Delegaci¨®n del Gobierno. ?sta ¨²ltima fue inaugurada a principios de 1983, en la Torre Sur de la plaza de Espa?a -de la que fue desalojada la Guardia Civil- y el primer delegado socialista, Leocadio Mar¨ªn, adjudic¨® un despacho "al servicio del vicepresidente del Gobierno", por indicaci¨®n de Rafael Delgado, secretario de Alfonso Guerra.
El vicepresidente ha usado esas instalaciones apenas unas cuantas veces. En ellas se qued¨® su hermano. Leocadio Mar¨ªn lo ha confirmado: Juan Guerra no tuvo nombramiento oficial, ni contrato, ni era funcionario de la Administraci¨®n.
Ning¨²n documento
"La presencia de Juan Guerra en la Delegaci¨®n del Gobierno no se deb¨ªa a ning¨²n documento", reconoce Tom¨¢s Azor¨ªn, el sucesor de Leocadio Mar¨ªn. Azor¨ªn pensaba que aquel despacho "estaba a disposici¨®n del vicepresidente del Gobierno".
Las dependencias utilizadas por Juan Guerra ya no existen: tras su desalojo, se han hecho obras all¨ª. Pero M. D., funcionaria de la Administraci¨®n del Estado, con m¨¢s de tres a?os de servicio en la Delegaci¨®n del Gobierno en Andaluc¨ªa, recuerda perfectamente el despacho de Juan Guerra. "Estaba en el pasillo que conduc¨ªa a la secretar¨ªa general. Se iba desde el patio central de la torre Sur y no comunicaba con ninguna otra dependencia".
Juan Guerra se presentaba sin horarios fijos y a veces pasaban semanas sin que apareciera por all¨ª. Carec¨ªa de n¨®mina -su ¨²nico sueldo conocido lo pagaba el PSOE- y no contaba con habilitaci¨®n de gastos, aunque usaba algunos servicios generales. "Hab¨ªa gente con ¨¦l, guardaespaldas y ayudantes, no siempre los mismos", recuerda la funcionaria.
Francisco Garc¨ªa de la Borbolla, ex senador del PSOE por Sevilla, visit¨® ese despacho en una ocasi¨®n, en el a?o 1984. No quiere revelar cu¨¢l fue el tema que le condujo hasta ese lugar, pero s¨ª dice lo siguiente: "Fui a resolver un asunto a la delegaci¨®n y me dijeron: eso h¨¢blalo con Juan Guerra. As¨ª que fui a verle a su despacho, que era grande, y all¨ª estaba ¨¦l como yo estoy en mi casa. Le habl¨¦ del asunto, ¨¦l cogi¨® el tel¨¦fono y me envi¨® a Fulano, de su parte. No he vuelto a verle m¨¢s".
Silencio del delegado
El actual delegado del Ejecutivo, Alfonso Garrido, se ha negado a dar explicaciones sobre el uso de ese despacho desde finales de 1987, en que ¨¦l tom¨® posesi¨®n del cargo, hasta los primeros meses de 1989, en que cumpliment¨® la orden de cerrarlo. Precisamente es el per¨ªodo en que el hermano del vicepresidente del Gobierno organiz¨® el grueso de sus negocios.
La investigaci¨®n oficial en marcha no incluye, hasta el momento, constancia de que en ese despacho se hayan efectuado transacciones comerciales, entregas de dinero u otras irregularidades de este tenor.
El uso de dependencias del Estado por un ciudadano particular, su presencia frecuente junto al vicepresidente del Gobierno y la confusi¨®n entre partido y Estado permanecen en el ¨¢mbito de la pol¨ªtica.
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