"En este momento el rostro del PSOE soy yo"

"En este momento hist¨®rico, s¨ª, el rostro del socialismo soy yo", afirma el presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Felipe Gonz¨¢lez, en una larga entrevista concedida al presidente de la agencia Efe, Alfonso Sobrado Palomares, de la que se ofrece un resumen. Gonz¨¢lez asegura que para salir de la crisis econ¨®mica hay que contar con el entorno internacional porque "no hay una v¨ªa de salida nacional que no conduzca al disparate". El presidente del Gobierno resta importancia a las posibles discrepancias con Alfonso Guerra y critica la falta de "proyecto pol¨ªtico del PP" al que acusa de "manejar s¨®lo la erosi¨®n".

Pregunta. En Espa?a hay, tres millones de j¨®venes que pr¨¢cticamente no recuerdan m¨¢s Gobierno que el suyo. ?Qu¨¦ ofrece el partido socialista a este colectivo que tiene dificultades para encontrar trabajo?Respuesta. Las cifras son absolutamente reveladoras. Los estudiantes becados en la universidad representan hoy el mismo n¨²mero que el total de universitarios de hace 20 a?os. Hoy hay el doble de estudiantes universitarios que hace 10 a?os.

Ahora estamos en una situaci¨®n de recesi¨®n, que contribuye a que muchos j¨®venes se cuestionen sus posibilidades de futuro. (...) Tengo conflanza en que el aparato productivo se va a poner en condiciones, de nuevo, para ofrecer las oportunidades de incorporarse al mercado de trabajo.

P. ?Cu¨¢ndo cree que empezaremos a ver el final de la crisis econ¨®mica?

R. Espero que sea pronto, porque se han hecho muchas previsiones de salida de la crisis (...) Pero me gustar¨ªa decir algo m¨¢s, como siempre a contracorriente. Creo que el pa¨ªs est¨¢ en mejores condiciones para afrontar la crisis que hace 10 a?os. Sin embargo, tambi¨¦n tenemos que ser conscientes de que es una crisis internacional y que un pa¨ªs de la dimensi¨®n de Espa?a, aunque lo pretendiera, cometer¨ªa un grav¨ªsimo error intentando resolverla s¨®lo.

Se puede remontar pronto, pero no hay una v¨ªa de salida nacional de esa crisis que no conduzca al disparate y, por consiguiente, que no lleve a males mayores. Lo que s¨ª hay es una v¨ªa para luchar por crear las mejores condiciones de aumentar el empleo en la fase de recuperaci¨®n que, sin duda alguna, vendr¨¢ ?Ser¨¢ en el segundo semestre de este a?o? As¨ª lo espero.

P. Usted ha aludido en algunas ocasiones a las Palabras de Olof Palme, en el sentido de que un presidente del Gobierno debe apoyar a su ministro de Econom¨ªa en un 98% o 99%, y reservarse para s¨ª el 1% o 2% restante ?Ha sido dif¨ªcil mantener esto en los ¨²ltimos meses?

R. Es una buena manera de expresar las relaciones de un primer ministro con su ministro de Econom¨ªa. Afrontar una situaci¨®n de crisis econ¨®mica en un a?o electoral se puede hacer de dos maneras: una, la v¨ªa f¨¢cil creando la imagen de que se est¨¢ alegrando la demanda y de que, de nuevo, se vuelve a recuperar la econom¨ªa, y otra, tomando en serio la situaci¨®n, respetando al pa¨ªs y explicando que la salida f¨¢cil tiene un coste muy alto.

Hay que asumir la responsabilidad de buscar la verdadera salida, aunque esto tenga mala venta, en un momento en que el debate pol¨ªtico est¨¢ lleno de irracionalidades, de falacias y de arbitrismo, sobre todo en el terreno econ¨®mico. No hay f¨®rmulas m¨¢gicas para salir de la crisis en ning¨²n pa¨ªs del mundo. Considerar que todo el mundo es tonto, menos el que est¨¢ proponiendo una salida f¨¢cil de la crisis, es de una arrogancia que no deber¨ªamos nosotros tener.

P. ?Qu¨¦ resultados espera del conjunto de medidas aprobadas por el Gobierno el pasado 26 de febrero para hacer frente al aumento del paro?

R. Las medidas ayudar¨¢n. Decir que ser¨¢n suficientes ser¨ªa una pretenciosidad incre¨ªble. Es curioso que, desde el punto de vista de lo que aportan a la econom¨ªa nacional, esas medidas se parecen en volumen a las que ha presentado el presidente Clinton en Estados Unidos, donde fueron recibidas con una gran euforia, y, sin embargo, aqu¨ª son acogidas por algunos con un enorme escepticismo.

Aun as¨ª, hay que tener el valor pol¨ªtico de decir que la recuperaci¨®n del empleo se producir¨¢ en serio. En primavera veremos que hay m¨¢s empleo -y la gente creer¨¢ que empieza a superarse la crisis-, porque ¨¦ste es un pa¨ªs con un empleo de temporada importante, que amortiguar¨¢ un poco el efecto de la crisis.

P. ?Considera definitivamente descartada la posibilidad de un pacto social global?

R. Ser¨ªa extraordinariamente positivo que hubiese esa especie de pacto de solidaridad del que hab¨ªan los alemanes, en el que los agentes sociales y econ¨®micos tienen un protagonismo absolutamente indiscutible.

P. Uno de los objetivos de la gesti¨®n socialista era que Espa?a recuperase el prestigio y su lugar en el ¨¢mbito internacional. ?D¨®nde estamos ahora?

R. Espa?a est¨¢ haciendo un gran esfuerzo (...) de presencia internacional. Creo que cada vez se nos respeta m¨¢s y se nos mira m¨¢s seriamente, a pesar de que, internacionalmente, a veces notamos que hay una labor de desgaste que viene desde dentro.

P. Tras haberse dado la imagen de un alejamiento irreversible entre Felipe Gonz¨¢lez y Alfonso Guerra, ahora parece que el t¨¢ndem vuelve a recuperarse. ?Cree que esta trayectoria es entendida por los electores?

R. S¨ª, creo que... He trabajado con un equipo del que formaban parte Alfonso y otros m¨¢s. Y, desde entonces -no hay m¨¢s que mirar las hemerotecas-, se ha dicho, en repetidas ocasiones, que hab¨ªa distanciarniento, acercamiento, distanciamiento, acercamiento.

Entre Alfonso y yo ha habido un grado de discrepancia, casi permanente, en la apreciaci¨®n de los fen¨®menos pol¨ªticos, desde el principio. Tenemos dos maneras de ver las cosas, o dos personalidades, o como se quiera decir, diferentes, y nos aproximamos a los temas de maneras diferentes. Siempre ha sido as¨ª y siempre se ha mantenido, sin embargo, un grado de comunicaci¨®n, un grado de... no s¨¦ c¨®mo llamarlo, quiz¨¢ de amistad, que no se ha perdido, que se mantiene. Como ¨¦stos son ciclos, ahora empezar¨¢n a apreciar lo contrario y, dentro de otra temporada, dir¨¢n que las divergencias son otra vez m¨¢s fuertes. Creo que eso debe tener poca significaci¨®n (...)

Esto no niega la evidencia de que, a toda idea pol¨ªtica, a todo proyecto pol¨ªtico, hay que ponerle un rostro (...) Es imprescindible. Una idea pol¨ªtica sin rostro tiene mucha m¨¢s dificultad de ser comprendida (...)

P. El rostro del PSOE es el suyo, o... ?

R. S¨ª, en este momento hist¨®rico, s¨ª.

P. Se ha dicho que hay un rechazo personal de Felipe Gonz¨¢lez a la idea de presidir un Gobiemo de coalici¨®n. En el caso de que los resultados electorales obligasen ?estar¨ªa usted al frente?

R. Lo que m¨¢s me preocupa, cuando se habla de esto, y yo no hablar¨¦ hasta que no se produzca el resultado electoral, es que haya una situaci¨®n de gobernabilidad, de estabilidad pol¨ªtica. Creo que un pa¨ªs como Espa?a no debe menospreciar la necesidad de la estabilidad pol¨ªtica, que garantiza que los proyectos contin¨²en adelante (...) En cualquier caso, hay que trabajar para tener una mayor¨ªa suficiente.

P. El PP, a la vista de las encuestas, se ha convertido en una alternativa de gobierno. ?C¨®mo juzga el proyecto de este partido?

R. Creo que no tiene un proyecto pol¨ªtico todav¨ªa definido. Y eso no excluye que, para un n¨²mero importante de ciudadanos -cosa que me parece positiva-, pueda ser una posible alternativa de gobierno. Pero el elemento que le falta es definir un proyecto pol¨ªtico, no hacer s¨®lo la pol¨ªtica de la erosi¨®n, del desgaste, es decir, no hacer la pol¨ªtica que uno puede ver el d¨ªa anterior en titulares o editoriales de determinados medios de comunicaci¨®n. Eso no es un proyecto pol¨ªtico.