Jasbul¨¢tov y Rutsk¨®i salen de la c¨¢rcel y se suman al acoso conservador a Bor¨ªs Yeltsin
El acoso conservador a Bor¨ªs Yeltsin se estrecha. El ex presidente del Parlamento de Rusia, Rusl¨¢n Jasbul¨¢tov, y el ex vicepresidente del pa¨ªs, Alex¨¢ndr Rutsk¨®i, los m¨¢s temidos enemigos del l¨ªder del Kremlin, iniciaron ayer la serie de prisioneros pol¨ªticos liberados de la c¨¢rcel moscovita de Lef¨®rtovo, en aplicaci¨®n de la amnist¨ªa decretada el mi¨¦rcoles por la Duma (C¨¢mara baja del Parlamento) y que Yeltsin trat¨® por todos los medios de impedir o retrasar. Sus intentos s¨®lo lograron que el fiscal general, Alex¨¦i Kaz¨¢nnik, obligado a elegir entre su fidelidad al presidente y la ley, optase por esta ¨²ltima. Antes que negarse a ejecutar la decisi¨®n, inapelable desde el punto de vista legal, opt¨® por dimitir.
Yeltsin se dirigi¨® ayer a la Duma, dominada por sus enemigos, para pedirle que reconsiderase la decisi¨®n de amnist¨ªa. Fue en vano. El presidente ruso tuvo que limitarse a criticar la puesta en libertad de sus enemigos pol¨ªticos, a los que acus¨¦ de incitar al extremismo".La amnist¨ªa afecta a delincuentes comunes y econ¨®micos y a 74 implicados en el intento de golpe de Estado de 1991 y los violentos des¨®rdenes callejeros de mayo de 1993 y de septiembre y octubre de 1993. La decisi¨®n de la Duma supone la total rehabilitaci¨®n c¨ªvica de 22 l¨ªderes de la oposici¨®n (12 implicados en el golpe de agosto de 1991 y 10 en los sucesos de octubre), y tambi¨¦n el carpetazo y archivo de las investigaciones sobre ambos sucesos.
"Por primera vez en la historia, los diputados han abusado de la confianza del pueblo y se han puesto del lado de los villanos. El presidente de Rusia se reserva el derecho de actuar seg¨²n sus poderes constitucionales", declar¨® el portavoz de Yeltsin, Viacheslav K¨®stikov.
Rusl¨¢n Jasbul¨¢tov abandon¨® la, c¨¢rcel a las cuatro de la tarde de Mosc¨² (seis de la tarde en la Espa?a peninsular) por una puerta de servicio. Dio las gracias por el apoyo recibido, asegur¨® que era inocente, se meti¨® en un coche y desapareci¨® en compa?¨ªa de sus familiares. Posteriormente fueron liberados el general Albert Makashov, que dio la orden de tomar los estudios de televisi¨®n en la tarde del 3 de octubre; Andr¨¦i Dun¨¢iev y VIadislav Ach¨¢lov, que desempe?aron los cargos de ministro del Interior y de Defensa del Parlamento durante el enfrentamiento de octubre, y el ex vicepresidente de Rusia, Alexandr Rutsk¨®i. ?ste sali¨® de la prisi¨®n con uniforme de general y llevando prendida en ¨¦l la medalla de h¨¦roe de la desaparecida Uni¨®n Sovi¨¦tica que gan¨® en la guerra de Afganist¨¢n. Antes de desaparecer en un Mercedes, pidi¨® calma a sus seguidores, que gritaban: "Rutskoi, presidente".
Requisitos legales
De Lef¨®rtovo sali¨® tambi¨¦n V¨ªctor Anp¨ªlov, l¨ªder de los comunistas ortodoxos. A lo largo del d¨ªa de ayer deb¨ªan ser puestos en libertad todos los condenados que hubieran expresado su acuerdo con la disposici¨®n de amnist¨ªa, que apareci¨® publicada por la ma?ana en el diario oficial Rossiskaia Gazeta, tr¨¢mite con el que se cumpl¨ªan todos los requisitos legales para ejecutarla.
Yeltsin se neg¨® a aceptar la ley y confi¨¦ en poder convencer al fiscal general, obteniendo como resultado la dimisi¨®n de un buen amigo y una impresionante derrota pol¨ªtica. Anoche, el presidente acept¨® la dimisi¨®n de Kaz¨¢nnik. ?ste decidi¨® cumplir con su obligaci¨®n antes de marcharse, y los representantes de la fiscal¨ªa acudieron a Lef¨®rtovo con todo el papeleo necesario para poner en marcha la medida legal. Cuatro altos cargos de la fiscal¨ªa se solidarizaron con Kaz¨¢nnik.
Los medios denocr¨¢tico-radicales, que durante vanos d¨ªas han estado presionando al fiscal general de Rusia, acogieron con extremo disgusto la puesta en pr¨¢ctica de la amnist¨ªa. La fracci¨®n parlamentaria Opci¨®n de Rusia, que dirige el art¨ªfice de la reforma econ¨®mica, Yegor Gaidar, calific¨® la liberaci¨®n de los amnistiados como una "revancha de los comunistas y fascistas" que, a su juicio, amenaza a todo el pueblo, porque puede socavar la estabilidad pol¨ªtica y la paz en Rusia.
Opci¨®n de Rusia etiquet¨® como "traidor" a su antiguo aliado, al l¨ªder del Partido de la Uni¨®n y la Concordia de Rusia (PUCR), el ministro Sergu¨¦i Shajr¨¢i, que fue uno de los principales impulsores del paquete de decisiones parlamentarias que permiti¨® la aprobaci¨®n de la amnist¨ªa. Shajr¨¢i manifest¨® que la amnist¨ªa coincide con los intereses estrat¨¦gicos del presidente y del Gobierno. En su opini¨®n, el pa¨ªs est¨¢ paralizado y ninguna fuerza puede imponerse sobre otra, por lo que los problemas deben resolverse en las urnas en 1996, y no en las barricadas. Otros pol¨ªticos dem¨®cratas, como V¨ªctor Sheinis, piensan que la liberaci¨®n de los adversarios de Yeltsin tiene aspectos positivos, ya que supone la salida a la arena pol¨ªtica de un competidor para VIad¨ªmir Zhirinovski en su propio terreno.
Est¨¢ por ver cu¨¢les ser¨¢n los pr¨®ximos pasos de Yeltsin a, tenor de las amenazas proferidas. Alexandr Proj¨¢nov, el director. del semanario de oposici¨®n Zavtra (Ma?ana), dijo que el presidente aprovechar¨¢ el problema de la delincuencia y la crisis econ¨®mica como excusa para decretar un estado de excepci¨®n que, de hecho, ser¨ªa pol¨ªtico.
La dimisi¨®n de Kaz¨¢nnik puede extender al Consejo de la Federaci¨®n el clima de enfrentamiento con el presidente que se respira en la Duma, ya que la C¨¢mara alta debe dar el visto bueno al candidato a fiscal que proponga el presidente y puede tener sus propias opiniones en esta materia. Sobre todo, tras el ejemplo de Kaz¨¢nnik.
Espera sobre la nieve en Lef¨®rtovo
"Alexandr Rutsk¨®i puede ser el pr¨®ximo presidente de Rusia", asegur¨® ayer Alexandr Proj¨¢nov, el ide¨®logo de la uni¨®n de los nacionalistas y los comunistas de Rusia, que estaba entre las aproximadamente 300 personas que montaban guardia en espera de la liberaci¨®n de los l¨ªderes opositores junto a la c¨¢rcel de Lef¨®rtovo, en un hist¨®rico pero descuidado barrio de Mosc¨².El d¨ªa era soleado y fr¨ªo, y mucha gente llevaban desde primera hora de la ma?ana a la intemperie, sobre la nieve. Algunos agitaban banderitas rojas de la Uni¨®n Sovi¨¦tica. Los familiares de los presos, entre ellos Liudmila, la esposa de Rutsk¨®i, y Ra¨ªsa, la esposa de Jasbul¨¢tov, entraron en la instituci¨®n penitenciaria.
Gritos de j¨²bilo y empellones y carreras entre los periodistas, que constitu¨ªan aproximadamente la mitad de los congregados, acogieron la salida de Jasbul¨¢tov, de aspecto cansado y que se. meti¨® en un autom¨®vil sin hablar. Luego salieron los dem¨¢s. Algunos, como el general Albert Makashov y el ex vicepresidente Alexandr Rutsk¨®i se hab¨ªan dejado barba durante su encarcelamiento de cuatro meses. Rutsk¨®i, un poco torpe en su caminar, ten¨ªa un aspecto envejecido bajo su pelo m¨¢s canoso que en el pasado.
Los liberados trataron de desaparecer lo m¨¢s r¨¢pidamente posible. La excepci¨®n fue V¨ªctor Anp¨ªlov, que areng¨® a sus partidarios con un meg¨¢fono.
El l¨ªder nacionalista radical VI¨¢dimir Zhirinovski apareci¨® en Lef¨®rtovo para declarar que al pueblo le corresponde decidir qui¨¦n ser¨¢ presidente, si ¨¦l o Alexandr Rutsk¨®i. En otra prisi¨®n de Mosc¨², la de Matr¨®skaya Tishin¨¢, fue liberado el jefe nazi Alexandr Barkashov.
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