Javier Mar¨ªas inaugura el II congreso de J¨®venes Escritores

El mito de la eterna juventud es una losa que pesa sobre los escritores j¨®venes; del mismo modo que han convertido a las generaciones precedentes en abuelos prematuros. Relegan a las generaciones subsiguientes a una suerte de parvulario vitalicio. Esta idea fue expuesta ayer por la presidenta de la Asociaci¨®n de J¨®venes Escritores, Care Santos, y otros de sus miembros, en la inauguraci¨®n del segundo congreso anual, que re¨²ne hasta ma?ana, en Alcal¨¢ de Henares, a 125 participantes de diversas comunidades espa?olas y pa¨ªses latinoamericanos, y que comprenden un arco de edades entre los 12 y los 35 a?os.

A la manera de un big brother o hermano mayor ya confirmado, el narrador Javier Mar¨ªas pronunci¨® la ponencia de apertura del congreso, que ser¨¢ clausurado ma?ana por los escritores Luis Landero y Arturo P¨¦rez Reverte. Mar¨ªas, que dijo compartir aquella observaci¨®n, reconoci¨® su pertenencia a una generaci¨®n, en edades comprendidas hoy entre los treinta y tantos y los 50 a?os, que "a la larga terminar¨¢ siendo odiada. Ha sido una generaci¨®n muy voraz, que tuvo la oportunidad de empezar muy pronto, y jubil¨® muy r¨¢pido a sus mayores, y que, adem¨¢s, est¨¢ en activo para mucho rato: no creo que, as¨ª como as¨ª, decaiga su preeminencia". El autor de Todas las almas argument¨® que su participaci¨®n en el congreso obedec¨ªa a su solidaridad con los j¨®venes. Pero con los j¨®venes sin atributos; creo que una asociaci¨®n de escritores es una contradicci¨®n en los t¨¦rminos. No comulgo, en general, con el asociacionismo; pero el hecho de que se produzca entre autores, y adem¨¢s tan j¨®venes, me parece revelador de los tiempos que corren".