El Zaragoza no pudo marcar en las Gaunas y deja el liderato

El Zaragoza se aleja un poco del liderato y, el Logro?¨¦s se afianza en la cola. Las Gaunas parec¨ªa una sucursal de La Romareda. La zaragozaman¨ªa en pleno naveg¨® Ebro arriba y se vino a Logro?o con su o¨¦, o¨¦, o¨¦, sus banderas y sus globos de colores. Azul y blanco, y con puesto de mando en la tabla, puesto de mando que perder¨ªa en favor del Deportivo. Vinieron los ma?os a Logro?o a por los dos puntos, pero se dejaron parte del bot¨ªn.El Zaragoza fue el primero en asentarse sobre un terreno resbaladizo que invitaba m¨¢s al cuerpo a cuerpo y a la batalla campal que a una distribuci¨®n ordenada del personal y una circulaci¨®n fluida de la pelota. En consecuencia, antes de cumplirse el minuto 5, el portal de Ochotorena sinti¨® el roce del gol en tres ocasiones consecutivas.

Los hombres de V¨ªctor Fern¨¢ndez demostraban que saben hilar juego con maestr¨ªa. Y los de Paunovic, que hasta ahora s¨®lo saben sumar restando, cavaban trinchera y tiraban de arte destructivo para destejer la avalancha ma?a.

Contraataque

La presi¨®n zaragocista encogi¨® al Logro?¨¦s tanto que s¨®lo se estir¨® al contraataque. Matute y Markovic, abandonados a su suerte, lograron desbordar la presa aragonesa del fuera de juego en el minuto 20,. pero Cedr¨²n repres¨® las aguas del susto y el curso del partido volvi¨® a su cauce: los riojanos achicando cuero a pozales y los aragoneses jarreando balones que llegaban como pedrisco hasta el espacio a¨¦reo de Ochotorena. Los visitantes se nutr¨ªan de apoyos y pases, mientras a los locales s¨®lo les quedaba la sopa boba y ben¨¦fica de los rechaces y el bander¨ªn salvador del juez de l¨ªnea.

El Zaragoza resurgi¨® del vestuario emitiendo en onda de firmeza ofensiva e hizo que el Logro?¨¦s sintonizara una banda de dudas defensivas que le presagiaba un fin de programa aciago. Pero el fin no llegaba y los minutos parec¨ªan de relleno de teatro antiguo, ¨¦se que hablaba de la honra, algo que, como el bal¨®n en Las Gaunas, cuesta mucho recuperar y poco perder. Markovic pudo romper el traj¨ªn y la malla de Cedr¨²n, pero lanz¨® fuera. Y el pitido ¨²ltimo zanj¨® la brega. El empate dej¨® insatisfechos a los visitantes ma?os y moderadamente preocupados a los locales.