La Violencia vuelve a Estambul mientras los alevis entierran a sus muertos

El barrio de Gaziosmanpach¨¢ de Estambul, escenario de sangrientos disturbios desde el pasado domingo, se despert¨® ayer con himnos f¨²nebres. Los centenares de manifestantes alevis que segu¨ªan al pie de las barricadas arrancaron a las fuerzas de seguridad turcas un acuerdo para poder enterrar en paz a sus muertos. Al menos 15, seg¨²n las autoridades de Ankara. Pero los dirigentes alevis de Estambul, que elevan a 26 el recuento de fallecidos, se enfrentaron ayer a un nuevo brote de violencia, esta vez en el distrito asi¨¢tico de Umraniye, que caus¨® otras cuatro v¨ªctimas mortales, seg¨²n informes no oficiales.

Los alevis que hab¨ªan pasado la noche al calor de las fogatas de Gaziosmanpach¨¢ aseguraron que hab¨ªan llegado a un acuerdo con las fuerzas de la gendarmer¨ªa y del Ej¨¦rcito que controlan el toque de queda en el distrito tras la salida de la polic¨ªa, cuyas fuerzas abrieron fuego el lunes. En los principales accesos del barrio, miles de personas exig¨ªan la entrega de cinco cad¨¢veres. A cambio, los dirigentes alevis se comprometieron a desmontar las barricadas tras las ceremonias f¨²nebres, en las que participaron unas 5.000 personas con gritos contra la polic¨ªa. La primera ministra turca, Tansu ?iller, telefone¨® a los dirigentes alevis para intentar mediar en el conflicto.Mientras se cerraban estas negociaciones de paz en la orilla europea de Estambul, al otro lado del B¨®sforo dos millares de personas se echaban a la calle en el distrito de Uniraniye para protestar contra la intervenci¨®n policial en Gaziosmanpach¨¢. La peregrinaci¨®n de manifestantes hacia una casa de oraci¨®n de la comunidad alevi (esta secta musulmana prohibe los rezos en las mezquitas) fue interceptada por las fuerzas de seguridad. En los choques entre polic¨ªas y alevis muri¨® al menos una persona, aunque fuentes hospitalarias informaron del ingreso de cinco cad¨¢veres en el hospital de Haydarpach¨¢ de Estambul.Cuando Turqu¨ªa ha conseguido llegar hasta la antesala de su integraci¨®n econ¨®mica con la Uni¨®n Europea, el estallido de violencia de la comunidad alevi -que engloba a m¨¢s de 10 millones de sus 60 millones de habitantes- amenaza con desestabilizar a¨²n m¨¢s a un pa¨ªs sometido a la guerra civil encubierta de las provincias kurdas del sureste, y donde la marca del integrismo isl¨¢mico se ha desbordado ya en las grandes ciudades.

. El ministro del Interior, Nahit Mentese, y el gobernador de Estambul, Hayri Zozakpioglu, se encuentran en el punto de mira de los partidos pol¨ªticos y de los medios de comunicaci¨®n turcos, que les responsabilizan del ba?o de sangre de Gaziosmanpach¨¢.

El l¨ªder del Partido Republicano del Pueblo (CHP), Hikmet ?etin, renunci¨® ayer a visitar los distritos de Estambul donde se registraron las revueltas, pero critic¨® la negligencia de Mentesey Zozak?ioglu. El CHP, que agrupa a dos formaciones socialdem¨®cratas, negocia en la actualidad su integraci¨®n en la coalici¨®n gubernamental turca. Precisamante algunos diputados del Partido de la Recta V¨ªa (DYP), al que pertenece Tansu Ciller, han pedido la dimisi¨®n de ambos altos cargos.

El ministro del Interior fue interpelado en el Parlamento el martes por las causas del retraso de la actuaci¨®n policial tras los atentados del domingo contra varios caf¨¦s alevis, que desataron la ola de violencia en Gaziosmanpach¨¢. Mentese reiter¨® ante los diputados su tesis de que los disturbios se deben a una conjura organizada desde el exterior.

Las televisiones privadas turcas han emitido im¨¢genes en las que se observa c¨®mo la polic¨ªadispar¨® a discreci¨®n contra la masa de manifestantes armados con piedras y palos. La mayor¨ªa de los cad¨¢veres de las v¨ªctimas de la revuelta alevi presentaban impactos de bala, algunos en la espalda. "?Por qu¨¦ no utiliz¨® gases lacrim¨®genos la polic¨ªa?", se preguntaba el diario Sabah, el de mayor circulaci¨®n de Turqu¨ªa.