"Esta mujer lleva dentro una bomba"
Los partos de septillizos son tan excepcionales que s¨®lo hay documentados en la literatura cient¨ªfica dos casos en este siglo. El primero, en Canad¨¢ en 1934 y el segundo, en Suecia pocos a?os despu¨¦s. Hoy en d¨ªa no es extra?o que se produzcan este tipo de gestaciones m¨²ltiples debido a las t¨¦cnicas de reproducci¨®n asistida. Pero de forma espont¨¢nea, la probabilidad es de uno de cada 90 embarazos elevado a la sexta potencia. Es decir, uno de cada 531.441 millones, explica Jos¨¦ Gurrea, ginec¨®logo de la cl¨ªnica Euskalduna, de Bilbao.El riesgo para este tipo de gestaciones ni siquiera est¨¢ documentado. Ya con cuatro embriones se calcula una mortalidad fetal del 50%. De ah¨ª que Gurrea opine que la embarazada onubense "lo que lleva dentro es una bomba, y una bomba que le va a estallar". Coincide con otros expertos consultados en que los siete beb¨¦s "tienen posibilidades remotas de sobrevivir", aparte del desarrollo desigual que probablemente est¨¢n teniendo. "Lo que no entiendo es c¨®mo el diagn¨®stico ha sido tan tard¨ªo", recalca. Y en ello tambi¨¦n coincide con otros especialistas consultados.
Riesgos para la madre
No es extra?o en esta cl¨ªnica vasca y en otras repartidas por Espa?a el uso del aborto selectivo para estas gestaciones. Han visto embarazos de hasta ocho embriones tras un tratamiento contra la infertilidad. Pero las reducciones embrionarias que se aplican no van m¨¢s all¨¢ de la s¨¦ptima semana. "Hacerlo ahora ser¨ªa un feticidio".Los riesgos no los corren s¨®lo los beb¨¦s. "La madre se la va a jugar", entiende Carlos Sim¨®, ginec¨®logo del Instituto Valenciano de Infertilidad. "Un embarazo de siete embriones es una situaci¨®n catastr¨®fica. Es algo que entra?a mucho peligro tanto para la madre tomo para los fetos, y esta es una excepci¨®n negativa a las t¨¦cnicas de fertilizaci¨®n", subraya. Como casos excepcionales, Sim¨® recuerda que hay descritos s¨®lo 71 casos de partos de quintillizos vivos en todo el mundo.La extrema dificultad para que esta gestaci¨®n llegue a buen t¨¦rmino es una constante entre los especialistas espa?oles. Jos¨¦ Bajo Arenas, jefe del servicio de Obstetricia y Ginecolog¨ªa del Hospital Universitario de Getafe (Madrid) lo ve extraordinariamente dif¨ªcil, "aunque tambi¨¦n es verdad que se est¨¢ aproximando a un momento gestacional que permitir¨ªa la supervivencia de alguno", dice. "Lo que suele ocurrir es que estas gestaciones no llegan nunca a las 27 semanas y eso es lo extraordinario de este caso". Como responsable de la secci¨®n de Ecograf¨ªa de la Sociedad Espa?ola de Ginecolog¨ªa, Bajo Arenas reconoce la dificultad que puede existir en ocasiones para identificar bien el n¨²mero de embriones. Considera que "en estos casos estar¨ªa indicada una simple radiograf¨ªa en la que, se ver¨ªan todos en un s¨®lo plano".
?l no ha tenido en sus manos un caso como ¨¦ste. "Ni quiero verlo. Es una situaci¨®n muy comprometida desde el punto de vista m¨¦dico". Tambi¨¦n ¨¦l cree que esto "es un fracaso de la estimulaci¨®n ov¨¢rica".
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