"Aunque no est¨¦is de acuerdo me da igual"

El profesor de ?tica entr¨® a las 12.30 en clase y lo primero que hizo fue advertir a sus alumnos de Ciencias de la Informaci¨®n: "Como ma?ana es fiesta no os voy a dar la tabarra". Y as¨ª lo hizo en parte.El profesor regal¨® a sus alumnos los ¨²ltimos 45 minutos de la clase. Pero antes, ofreci¨® una magistral lecci¨®n aderezada con sus puntos de vista sobre ¨¦tica y periodismo. "Pienso que la falta de ¨¦tica de la profesi¨®n no debe llevar sanci¨®n alguna en la medida en que no repercuta y da?e a los dem¨¢s", explic¨®, ante una audiencia mucho m¨¢s ocupada en comentar la entrega de los premios TP de televisi¨®n y en hojear las p¨¢ginas de deportes del peri¨®dico que en atender.

Los murmullos de fondo continuaron, cada vez en tono m¨¢s elevado, pero el profesor no se inmut¨® y sigui¨® poniendo ejemplos: "A un m¨¦dico que pone peor a los enfermos hay que echarlo.- Y a un periodista que hace da?o tambi¨¦n hay que echarlo. No podemos tener ning¨²n privilegio, y hay que aplicarle lo que se llama derecho com¨²n. Esta es mi opini¨®n, hablando en plata. Aunque no est¨¦is de acuerdo me da igual".

E igual dio, porque los alumnos siguieron con sus cosas. Al final, el profesor anim¨® a los presentes a opositar, "como hizo santo Tom¨¢s de Aquino". Y se despidi¨® diciendo: "Aunque le impusieron a la fuerza [en la c¨¢tedra], porque era incapaz de entrar por oposici¨®n. As¨ª que hala... no os desanim¨¦is". Entre los oyentes, hab¨ªa algunos ya desanimados. Una alumna, comentaba: "A m¨ª este profesor no me aporta nada".