Un ingl¨¦s enfermizo
Frente a la escalera mec¨¢nica, encajonado entre dos rascacielos, se encuentra el "apartamento" de Irons, un edificio verde p¨¢lido al viejo estilo chino, cubierto de camisetas y plantas colgantes.Irons acept¨® el papel por ser una "historia y un personaje vagos", sabedor de que la pel¨ªcula ser¨ªa "arriesgada, dif¨ªcil y peligrosa". Pero dice que le entusiasma hacerla y trabajar con Gong Li, a quien admira enormemente. Admite que ten¨ªa una idea muy imprecisa de la colonia: "Pensaba que era una isla llena de rascacielos", comenta. "Sab¨ªa que hab¨ªa algunos refugiados vietnamitas y que era un centro comercial. Pero no ten¨ªa ni idea de lo china que es. Y tampoco sab¨ªa cu¨¢nto verdor y cu¨¢nta belleza hay en ella. Pensaba que, como estaban ganando terreno al mar, no podr¨ªa quedar ning¨²n espacio en el territorio.. Hab¨ªa o¨ªdo algo acerca de la "energ¨ªa del lugar..., su movimiento continuo, sus riadas de gente. Me impact¨® la falta de respeto por las cosas viejas, en una sociedad que reverencia a los padres".
A su manera
Vestido con una camiseta d algod¨®n color azul claro pantalones informales, y con su tez un tanto cetrina, Irons se parece en todos los aspectos al enfermizo ingl¨¦s que re presenta.
Fue un papel para el que s document¨® all¨ª mismo. Habl¨® con periodistas sobre sus opiniones con vistas al futuro, escuchando "innumerable puntos de vista", dice. "Pero como me dijo David Cronenberg cuando rodaba Id¨¦nticos, 'no te molestes en ver a nadie: cada cual lo hace a su manera'. Pienso lo mismo sobre el periodismo. Si tuviera que escribir un art¨ªculo par? un peri¨®dico, tambi¨¦n ser¨ªa, a mi manera, un periodista".
En otros aspectos, Irons si estaba familiarizado con lo que le rodea. "Me eduqu¨¦ con un tipo de gente como el que hay aqu¨ª", se?ala. "No suponen ninguna sorpresa para m¨ª". Tampoco le sorprendi¨® el n¨²mero de ingleses que no hablan ni una palabra de canton¨¦s. "Lo digo porque conozco a los ingleses; y se bien su idea de que si no comprendes el ingl¨¦s es que debes ser un est¨²pido, as¨ª que comenc¨¦ a aprender el chino mandar¨ªn porque Gong Li no sabe hablar ingl¨¦s. Odio estar en un sitio donde no puedo hablar en su lengua".
Jeremy Irons admite que hay "algunos problemas de comunicaci¨®n" con los miembros chinos del equipo de filmaci¨®n. "El problema con este equipo es que no saben hablar bajo, no pueden hacerlo para producir esos sonidos [el canton¨¦s est¨¢ basado en tonos], as¨ª que se dan muchos gritos. Pas¨® bastante tiempo hasta que conseguimos un equipo capaz de trabajar en voz baja. Pero siempre ponen muy alta la radio y es un sonido que yo no aguanto. Nunca consigo hacer que la bajen".
Babelia
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