La presidenta de la Audiencia de Bilbao, Ana Iracheta, dice que los jueces deben ganarse la confianza del pueblo

"Ganar la confianza de los hombres y mujeres de Vizcaya con el quehacer diario" y conseguir una justicia "eficaz" son los dos objetivos principales de la presidenta de la Audiencia de Bilbao, Ana Iracheta, que ayer tom¨® posesi¨®n de su cargo. Tras prestar juramento, las primeras palabras del discurso de la nueva presidenta fueron pronunciadas en euskera, una lengua que la nueva presidenta no conoc¨ªa en el momento de su nombramiento, el pasado 18 de noviembre. Este gesto fu¨¦ interpretado muy positivamente por el vocal del Consejo General del Poder Judicial, Emilio Olabarr¨ªa, que al finalizar el acto asegur¨® que "es un buen principio, que acredita que hay un buen talante en esta cuesti¨®n, pendiente de normalizar". No obstante, Ana Iracheta, durante su discurso de toma de posesi¨®n no se refiri¨® al proceso de euskaldunizaci¨®n de la Justicia, asunto que en el momento de su nombramiento afirm¨® tener presente, "por ser el uso del euskera una realidad social a la que la Administraci¨®n de Justicia no puede permanecer ajena". La Constituci¨®n de 1978 fu¨¦ una referencia continua en el discurso de la nueva presidenta de la Audiencia de Bilbao. En este contexto enmarc¨® la independencia del poder judicial, a quien, seg¨²n dijo, "el texto constitucional reviste de un poder de dimensiones ins¨®litas, pero nunca ilimitado, y siempre al servicio del ciudadano". "La justicia emana del pueblo y se administra en nombre del Rey. El pueblo es por tanto su destinatario, pero tambi¨¦n su fundamento. Y se administra en nombre del Rey para liberarla en su actuaci¨®n pr¨¢ctica de los poderes legislativo y ejecutivo; en definitiva, para dotarla de independencia", recalc¨®. Los ex presidentes de la Audiencia de Bilbao, Joaqu¨ªn Gimenez (su antecesor) y Juan Alberto Belloch fueron las primeras referencias personales en el discurso de toma de posesi¨®n. La magistrada destac¨® en ambos el "esfuerzo por crear la justicia en la decada de los 80, a?os ¨¢speros de una violencia omnipresente, dificilmente soportable", y sus "afanes y trabajos por fomentar el desarrollo de las libertades en nuestra sociedad, por entonces totalmente quebrada y a¨²n no del todo vertebrada". No obstante, el recuerdo m¨¢s emocionado fue para su padre, Marino Iracheta Iribarren, juez como ella, de quien tom¨® la idea de Justicia como "instrumento de vertebraci¨®n nacional y medio de desarrollo econ¨®mico estimulado por la paz social", as¨ª como para los magistrados Enrique Ruiz Vadillo y Jose Antonio Bur¨®n Barba. De estos dos destac¨® que durante los ¨²ltimos a?os del franquismo "se atrevieron a se?alar a los poderes de aquel l¨®brego y t¨¦trico Estado, el l¨ªmite que no pod¨ªa traspasar sin quebrar a la vez el derecho".