El primog¨¦nito

Jes¨²s Carballo tiene en sus genes la gimnasia. Su padre, entrenador del equipo femenino de gimnasia deportiva, ha transmitido a sus tres hijos su pasi¨®n por este deporte. Jes¨²s, Javier y Manolo no recuerdan cuando empezaron a acudir al gimnasio. Su vida desde siempre ha estado rodeada de aparatos.Los tres crecieron con dolor porque hacen falta muchas l¨¢grimas para modelar un cuerpo joven hasta que que llegue a tener la morfolog¨ªa que se les pide a los gimnastas. Anchas y musculadas espaldas, cintura de avispa y piernas ligeras pero a la vez fuertes y musculadas. Y si no se crece mucho, mejor a¨²n. Por eso no extra?a que sus ¨ªdolos sean Schwarzenegger y Stallone.

Para llegar a tener ese f¨ªsico tan especial hay que hacer muchas horas de gimnasia al d¨ªa, hay que dejar a la familia a un lado y tambi¨¦n los estudios. La vida fuera del gimnasio pr¨¢cticamente no existe para ellos. Hasta salir durante alg¨²n tiempo con Mar¨ªa Pardo, la gimnasta que renunci¨® a los Juegos por no aceptar los m¨¦todos de trabajo de su entrenadora, se convirti¨® en un problema.

Pero el cuerpo no lo es todo en este deporte. "La gimnasia te moldea tambi¨¦n la mente. Te ense?a a no rendirte. Cuando algo no te sale hay que intentarlo una y otra vez hasta que lo logras", dice. Jes¨²s reconoce que los gimnastas pueden tener a los ojos de los dem¨¢s una cierta vena masoquista que ¨¦l y sus compa?eros justifican en que para ellos su vida es esa.

Jes¨²s es el primog¨¦nito de la familia Carballo pero ¨¦l aclara que el tiempo demostrar¨¢ que no es el mejor. Est¨¢ convencido de que Manolo, el benjam¨ªn, llegar¨¢ a lo m¨¢s alto. Aunque su sue?o m¨¢s inmediato es que los tres lleguen a formar parte de la selecci¨®n espa?ola.