McCain se proclama como el ¨²nico candidato republicano que puede derrotar a Gore
"Soy la peor pesadilla para Al Gore", proclam¨® ayer John McCain, triunfador en las primarias republicanas celebradas el martes en Michigan y Arizona. McCain invit¨® a los republicanos de pura cepa a abandonar la candidatura de George Bush y sumarse a la suya, que est¨¢ demostrando tener un gran atractivo entre dem¨®cratas e independientes. Ese atractivo, seg¨²n McCain, puede concederle la victoria el 7 de noviembre frente a Gore. Los sondeos confirman que ahora McCain es un rival mucho m¨¢s peligroso que Bush para el vicepresidente y principal aspirante dem¨®crata a la Casa Blanca.
La guerra civil republicana est¨¢ aportando una enorme emoci¨®n a la primera fase del largo ciclo de elecci¨®n del pr¨®ximo presidente de EEUU. Bush, el favorito del aparato del Partido Republicano y pr¨ªncipe de la dinast¨ªa pol¨ªtica fundada por el presidente hom¨®nimo que dirigi¨® la guerra del Golfo, se est¨¢ revelando incapaz de deshacerse del desaf¨ªo planteado por McCain. Esta incapacidad siembra dudas sobre lo que hace unas semanas parec¨ªa claro: que Bush es un caballo ganador.McCain, senador por Arizona y ex preso de guerra en Vietnam, consigui¨® una gran victoria el martes frente al gobernador de Tejas. Aplast¨® a Bush en su Estado de Arizona por el 60% frente al 36%. Y, sobre todo, gan¨® por el 50% frente al 44% en Michigan, el primer gran Estado industrial en pronunciarse en el proceso de elecci¨®n del presidente. En uno y otro caso, el resto de votos fue para el predicador negro ultraconservador Alan Keyes.
Tras haber ganado en New Hampshire por amplia mayor¨ªa y perdido rotundamente en Carolina del Sur, McCain necesitaba triunfar en Michigan para mantener alzada la bandera de su rebeli¨®n contra el aparato del Partido Republicano. Y lo consigui¨® porque en ese Estado los electores dem¨®cratas e independientes tambi¨¦n estaban autorizados a pronunciarse en las primarias republicanas.
Bush obtuvo en Michigan dos de cada tres votos de electores republicanos, pero McCain llev¨® a las urnas a cientos de miles de dem¨®cratas e independientes entusiasmados por su condici¨®n de viejo guerrero y h¨¦roe de Vietnam, su denuncia de las corruptelas de Washington y su programa reformista, que contiene una mezcla de elementos conservadores y progresistas. El 52% de los votantes del martes en Michigan no fueron republicanos.
Recuperar la Casa Blanca
Dirigi¨¦ndose al Partido Republicano, que hasta ahora ten¨ªa a Bush como su mejor esperanza de recuperar la Casa Blanca tras la larga presidencia dem¨®crata de Bill Clinton, el senador por Arizona proclam¨® ayer el nacimiento de "una nueva mayor¨ªa, la mayor¨ªa McCain". "Estamos construyendo una coalici¨®n ganadora de conservadores republicanos, independientes y dem¨®cratas de Reagan", declar¨® el portavoz de su campa?a.
En los d¨ªas anteriores a la doble victoria del martes, McCain, medio en broma medio en serio, confes¨® que ha lanzado "una OPA hostil" sobre el Partido Republicano. Tambi¨¦n se compar¨® con Ronald Reagan, que en los ochenta arranc¨® un decisivo apoyo entre dem¨®cratas e independientes. Y reiter¨® que su deseo es devolver el Partido Republicano a la "tradici¨®n reformista del presidente Theodore Roosevelt".
Este mensaje est¨¢ calando hondo. Si los comicios de noviembre se celebraran hoy, el senador por Arizona obtendr¨ªa el 53% de los votos frente al 40% de Gore, con el resto indeciso, seg¨²n CNN-USA Today-Gallup. En la misma circunstancia, Bush le ganar¨ªa a Gore por un 51% frente al 45%. Frente a la fuerza del "Expreso del Hablar Claro" de McCain, Bush s¨®lo est¨¢ consiguiendo agrupar en torno a su candidatura a la base fiel y conservadora del Partido Republicano. La masiva movilizaci¨®n de ese segmento, y en particular la derecha cristiana, le otorg¨® el s¨¢bado a Bush la victoria frente a McCain en la conservadora Carolina del Sur. Pero el truco no funcion¨® en el m¨¢s liberal Michigan.
Bush, que, con su lema "conservadurismo con compasi¨®n", deseaba hacer una campa?a centrista, se est¨¢ viendo obligado a escorarse a la derecha para garantizarse la movilizaci¨®n a su favor del voto conservador. Adem¨¢s del gobernador republicano del Estado, John Engler, el principal apoyo de Bush en Michigan fue el telepredicador Pat Robertson, que grab¨® una llamada telef¨®nica a cientos de miles de votantes presentando a McCain como un enemigo de la derecha cristiana y las fuerzas antiabortistas.
Fundamentalismo
En Carolina del Sur, Bush, al igual que McCain, se neg¨® a condenar la presencia en el Capitolio del Estado de la vieja bandera de la Confederaci¨®n sudista e hizo campa?a en la Universidad Bob Jones, uno de los baluartes del fundamentalismo protestante y donde todav¨ªa est¨¢ prohibido que personas de distinta raza mantengan relaciones amorosas. Incluso en el caso de que termine obteniendo la candidatura republicana, Bush pagar¨¢ frente al candidato dem¨®crata un elevado precio por gestos de este tipo.
Claramente descompuesto por su derrota en Michigan, que confirma la vulnerabilidad que mostr¨® en New Hampshire, Bush intent¨® ayer consolarse recordando que el martes votaron a su favor en Michigan "la gran mayor¨ªa de los electores republicanos". Y sugiri¨® que los dem¨®cratas partidarios de McCain est¨¢n interfiriendo en el proceso de elecci¨®n del candidato republicano a la Casa Blanca.
La batalla se traslad¨® ayer al Estado noroccidental de Washington y el sure?o de Virginia, que celebrar¨¢n primarias republicanas el pr¨®ximo martes. Anticipando una derrota en la m¨¢s conservadora Virginia, McCain se va a concentrar en conseguir una nueva victoria frente a Bush en Washington, cuya principal ciudad, Seattle, es, con empresas como Microsoft, Boeing y Amazon, un s¨ªmbolo del nuevo capitalismo estadounidense.
De los primeros asaltos de la pelea interna republicana, Bush ha ganado tres: el caucus de Iowa y las primarias de Delaware y Carolina del Sur. McCain, otros tres, pero de mayor peso: las primarias de New Hampshire, Arizona y Michigan. Probablemente, el pr¨®ximo martes electoral, el de Washington y Virginia, tampoco arrojar¨¢ una conclusi¨®n definitiva. ?sta s¨®lo llegar¨¢ en el supermartes del 7 de marzo, en las primarias republicanas de Nueva York, California y otra docena de Estados. Las decisivas elecciones de Nueva York y California s¨®lo estar¨¢n abiertas a electores republicanos. "Estoy m¨¢s preparado para ganar la presidencia que Bush: yo soy un reformista y ¨¦l no lo es", dijo ayer McCain.
La disputa del centro
John McCain cree que los republicanos llevan tiempo sin ganar las elecciones por haberse inclinado demasiado a la derecha. Los conservadores, piensa, s¨®lo pueden recuperar la Casa Blanca si se abren al centro. Y ¨¦l es el hombre adecuado porque discrepa de su partido cuando combate a las tabacaleras o predica una reforma de la financiaci¨®n pol¨ªtica que termine con el peso en Washington de los millonarios.Con su "conservadurismo con compasi¨®n", Bush tambi¨¦n quiere girar te¨®ricamente hacia el centro, pero no le deja el combate con McCain, que le obliga a cortejar a la ultraderecha. Ahora la principal diferencia entre los dos candidatos estriba en el uso del super¨¢vit presupuestario. En la l¨ªnea de su partido, Bush quiere aprovecharlo para reducir los impuestos. Pr¨®ximo a las tesis de Clinton y Gore, McCain lo dedicar¨ªa a pagar la deuda nacional y garantizar el futuro del sistema p¨²blico de pensiones. Los dos est¨¢n a favor de la pena de muerte y en contra del aborto. Pero McCain es m¨¢s liberal que Bush cuando acepta que las t¨¦cnicas del ADN abren dudas sobre algunas condenas a muerte y reconoce que, en su oposici¨®n al aborto, hace excepciones en los casos de incesto y violaci¨®n. Uno y otro ser¨ªan m¨¢s duros que Clinton en pol¨ªtica internacional y estimular¨ªan un rearme de EEUU, pero Bush s¨®lo intervendr¨ªa en el extranjero cuando est¨¦n en peligro "los intereses estrat¨¦gicos" de su pa¨ªs y McCain tambi¨¦n por razones humanitarias.
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