La ¨²ltima foto de Mart¨ªn Palermo

El rel¨¢mpago de la c¨¢mara se dispar¨® un instante antes de que tronara el escarmiento. Un reportero gr¨¢fico se hab¨ªa infiltrado en la discoteca Tequila del balneario de Punta del Este -donde no se permite el acceso a los paparazzi- y ten¨ªa a dedo del gatillo la imagen m¨¢s deseada del verano: Mart¨ªn Palermo, el delantero centro del Boca, sentado junto a su nueva y desconocida novia, Lorena Barrichi. Cuando la peque?a c¨¢mara de bolsillo ilumin¨® la escena y desat¨® la furia del goleador, Fernando Arias seguramente alcanz¨® a ver c¨®mo se alzaba delante suyo un cuerpo entero de 1,88 metros y record¨® por qu¨¦ a Palermo le dicen Loco. Pero ya era tarde. Un directo de derecha que le golpe¨® de arriba hacia abajo entre la boca y la nariz le dejaba knock out.

Enero ya llevaba seis d¨ªas y se esperaba la noticia del verano en la costa atl¨¢ntica uruguaya, adonde van a pasar las fiesta de fin de a?o y sus primeros d¨ªas de vacaciones la fauna de famosos argentinos. Por estas fechas, hace un a?o, Diego Maradona era internado en la cl¨ªnica m¨¢s conocida del lugar con una sobredosis de coca¨ªna y tres cuartos de su coraz¨®n paralizado. Punta del Este no falla, siempre da para portada o titular de primera plana. Un muerto, un romance, un esc¨¢ndalo, algo como para ir calmando el hambre.

El delito ha sido calificado de 'lesiones leves'. Pero a nadie le importa que se trate de un incidente menor. Las im¨¢genes justifican el exceso. Palermo en la comisar¨ªa, Palermo que llega a los tribunales rodeado de polic¨ªas, abogados que declaran a la prensa, fan¨¢ticos que se acercan y opinan, se?oras interesadas en ver si hay m¨¢s figuras populares y un permanente zumbido de cronistas retransmitiendo en directo para las cadenas de noticias.

El Loco Palermo siempre tuvo reacciones intempestivas. Dentro del campo es el goleador m¨¢s creativo en los festejos. Se ha sentado con sus compa?eros junto al bander¨ªn de la esquina a meditar, se ha bajado los pantalones cortos, ha bailado, y rezado, y cantado, y se ha tirado en plancha contra las vallas publicitarias. Fuera del campo no tiene vocabulario ni facilidad de palabra y responde como un ogro. Su matrimonio se deshizo hace tres meses y no soporta estar separado de sus dos hijos.

Despu¨¦s de recuperarse de una operaci¨®n de ligamentos cruzados y de casi siete meses de inactividad, de convertir los dos goles de la victoria en la final de la Intercontinental frente al Madrid y de ganar el torneo Apertura de la Liga con el Boca, Palermo sigue sin lograr su traspaso al f¨²tbol europeo. Y ya tiene 27 a?os. El a?o pasado estaba vendido al Lazio cuando se rompi¨® los ligamentos, ahora deb¨ªa irse al N¨¢poles pero la operaci¨®n fracas¨® el pasado viernes. La madrugada del s¨¢bado decidi¨® salir con su nueva novia y amigos. Quer¨ªa divertirse, disfrutar de las vacaciones y olvidar. Eligi¨® una discoteca donde la seguridad impide el acceso a reporteros gr¨¢ficos. Pero el paparazzi ocult¨® su peque?a c¨¢mara dentro de la camisa y fue a por ¨¦l. Le encontr¨® y alcanz¨® a apretar el disparador. Entonces record¨® que a Palermo le dicen Loco. Pero ya era tarde.