El Esp¨¢rrago muestra un rock empe?ado en mirar hacia atr¨¢s
La jornada del s¨¢bado del Esp¨¢rrago Rock se desarroll¨® bajo el signo de la paradoja: el p¨²blico del Circuito de Velocidad de Jerez, mayoritariamente adolescente, celebr¨® propuestas musicales cl¨¢sicas como si de rabiosas innovaciones se tratase. A partir de las siete de la tarde, y siguiendo con escrupulosa puntualidad la agenda del festival, una veintena de grupos y artistas comenzaron a encandilar a un multitudinario y agradecido auditorio dispuesto a bailar hasta el amanecer.
Como si hubieran tomado nota de las palabras de Borges cuando asum¨ªa la imposibilidad de expresi¨®n del artista y su condena a aludir a lo que otros hicieron con anterioridad, el rock de hoy se presenta, por lo visto en el Esp¨¢rrago, como una respetuosa mirada hacia atr¨¢s. Un ejemplo de ello fue la apertura de los granadinos Lagartija Nick, cuyo recital, basado en la experiencia y el poder¨ªo, result¨® una mon¨®tona repetici¨®n de los clich¨¦s del punk y el trash.
Sus sucesores en el escenario principal, los escandinavos Hellacopters, brindaron puro rock and roll de siempre con el mismo envoltorio novedoso. Pero las poses guitarreras de Robert Strings Dahlquist y los ritmos vibrantes de la banda tienen, pese a su absoluta vigencia, 30 a?os de antig¨¹edad. Pese a ello, los asistentes brincaron y corearon la fren¨¦tica sucesi¨®n de canciones hasta el punto de que el cantante Nick Royale hubo de solicitar 'dos minutos para tomar aliento'.
El caso de los mexicanos Aterciopelados es llamativo en el contexto del festival. Habituales en la cartera de la promotora Munster Tourin, fueron los encargados de abrir el Esp¨¢rrago hace unos a?os, pero el pasado s¨¢bado actuaron muy cerca de la cabeza de cartel. Un recital, eso s¨ª, bastante lineal, con supuestos himnos m¨¢s indicados para ilustrar anuncios televisivos que para descargar la adrenalina que reclamaban los fieles de Jerez.
'Hola, locos'
Y por fin lleg¨® Beck. Mientras el cantante californiano saludaba a sus entregados seguidores con un cordial 'Hola, locos' en espa?ol, ¨¦stos contestaban en ingl¨¦s: 'Beck, eres un puto genio'. Y puesto que talento era lo que se reclamaba, Beck se mostr¨® encantado de exhibir todas sus excelencias, sin samplers y con el respaldo por una impresionante banda.
Looser, Mixed Bizness, Sex Lamus, Milk & Honey, Nicotine & Gravy y otros ¨¦xitos de sus cuatro ¨¢lbumes fueron desgranados en el espectacular circo sonoro del ¨ªdolo, que pasaba sin transici¨®n del folk al pop, del funk al hip-hop y de ah¨ª al punk, a sabiendas de que todo vale si no se pisa la raya de lo bien hecho.
Claro que, para rock a?ejo, el del James Taylor Quartet, el grupo encargado de cerrar la jornada. Con su ¨®rgano hammond, Taylor puso a bailar durante m¨¢s de una hora a un p¨²blico que acaso no hab¨ªa nacido cuando sus canciones fueron escritas y grabadas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.