Del trompo al di¨¢bolo
Una asociaci¨®n de monitores rescata y difunde juegos tradicionales en Ja¨¦n
Gregorio Mart¨ªnez sali¨® ayer a pasear al Parque del Seminario de Ja¨¦n y, sin esperarlo, se convirti¨® de pronto en un improvisado maestro del trompo. Pese a sus 73 a?os, no pudo quedar impasible cuando ve¨ªa a los m¨¢s j¨®venes intentar lanzar, sin ¨¦xito, un elemento l¨²dico que form¨® parte del paisaje de su infancia. 'Era uno de mis juguetes favoritos', recordaba con cierta nostalgia Gregorio, mientras explicaba a un grupo de ni?os curiosos la t¨¦cnica a emplear para que el trompo o peonza girara el m¨¢ximo tiempo posible.
La sorpresa fue may¨²scula para todos los ni?os que ayer se acercaron al parque del Seminario de Ja¨¦n. Los balones de f¨²tbol y las bicicletas quedaron por unas horas aparcados para dar paso a unos inesperados, y para muchos ins¨®litos, juegos.
Era el turno para el di¨¢bolo, los aros, la comba, las chapas, los zancos o los bolos serranos. Juegos todos ellos tradicionales que se han ido perdiendo en los ambientes urbanos, donde la hegemon¨ªa la tiene ahora la cultura de la videoconsola y el ordenador.
La novedosa experiencia l¨²dica ha sido implantada en Ja¨¦n por una asociaci¨®n juvenil de monitores deportivos, de la que forman parte, entre otros, Diego L¨®pez, Estefan¨ªa P¨¦rez, Abel Ag¨¹era, V¨ªctor ?vila o Ildefonso Gonz¨¢lez, muchos de ellos estudiantes de Magisterio. Lo que empez¨® siendo un proyecto educativo se ha convertido ahora en una singular actividad que cada domingo busca complicidades en los parques m¨¢s grandes de Ja¨¦n. 'Es una forma de recuperar viejas tradiciones y, al mismo tiempo, fomentar juegos mucho m¨¢s familiares y participativos que los de ahora', explica Diego, uno de los monitores.
'Es una idea muy bonita y la deber¨ªan hacer m¨¢s a menudo', dec¨ªa Francisco Calet, que disfrutaba tanto como sus hijos, Tania, de seis a?os, y Paco, de tres, mientras ve¨ªan a la madre, Luisa, saltar a la comba. Y es que muchos padres y madres se integraron plenamente en los juegos de sus hijos, quiz¨¢ recordando parte de su infancia. Como Mar¨ªa Flor o Jos¨¦ Manuel, que mostraban a sus hijos, Cristian y Jos¨¦, su destreza con los aros. 'Son juegos mucho m¨¢s saludables y enriquecedores', se?alaba Jos¨¦ Manuel, que mostraba su inquietud por las consecuencias perniciosas del abuso de las videoconsolas entre las nuevas generaciones de ni?os.
'La sensaci¨®n generalizada es que es preciso reflexionar sobre los nuevos h¨¢bitos l¨²dicos de los ni?os y la responsabilidad que todos tenemos en ello', explicaba Abel Ag¨¹era, uno de los monitores que ayer ense?aba a usar el di¨¢bolo o los zancos a los ni?os jiennenses. Su compa?era Estefan¨ªa incid¨ªa en este tema y recordaba que ya apenas quedan tiendas donde poder encontrar estos juguetes de siempre. 'Para comprar los trompos hemos tenido que preguntar en media Espa?a', a?ad¨ªa.
Lagunas educativas
Los actuales planes educativos contribuyen a enterrar los juegos tradicionales que formaron parte de la Espa?a del siglo XX. La actividad f¨ªsica queda ahora reducida en los colegios a los deportes convencionales y a los gimnasios, y casi siempre asociada al elemento competidor.
Frente a ello, los j¨®venes de la asociaci¨®n de monitores deportivos de Ja¨¦n proponen un sistema alternativo de ejercicio f¨ªsico y, sobre todo, de sociabilidad.
Durante tres meses han recorrido los centros de Educaci¨®n Infantil, Primaria y Secundaria de la capital jiennense para introducir, como una actividad m¨¢s, la amplia gama de juegos populares de la que los peque?os de hoy s¨®lo hab¨ªan escuchado vagas referencias de sus abuelos.
Para los j¨®venes, no obstante, esta actividad no ha estado exenta de cierta dificultad. 'En los centros hay muchas lagunas en este tema pues por no haber no hay ni materiales apropiados para poder desempolvar los juegos tradicionales', se lamenta Diego L¨®pez, integrante del equipo de monitores que ahora se plantea editar en un libro el origen, la procedencia y el sistema de juego de las numerosas manifestaciones l¨²dicas que han ido rescatando de la geograf¨ªa rural jiennense.
En otras ocasiones, los monitores han hecho gala de su imaginaci¨®n al proponer a los centros educativos una serie de juegos deportivos alternativos, que no son m¨¢s que la adaptaci¨®n de los deportes m¨¢s conocidos a las escasas y limitadas instalaciones de los colegios. As¨ª nacieron deportes como el mini hockey, el pre beisbol o el rugbito, una curiosa combinaci¨®n de rugby y f¨²tbol.
El proyecto educativo de los j¨®venes jiennenses ha sido asumido por las ¨¢reas de Juventud y Educaci¨®n del Ayuntamiento jiennense, que han financiado la actividad en los parques p¨²blicos.
La concejala Inmaculada Solar defiende su aportaci¨®n al contexto educativo. 'Queremos impulsar juegos que se adapten al desarrollo evolutivo del escolar desde las formas m¨¢s espont¨¢neas hasta las m¨¢s regladas en las que se introduce el car¨¢cter deportivo, adem¨¢s de apoyar actividades que fomentan la colaboraci¨®n y la solidaridad y evitan la agresividad en la pr¨¢ctica deportiva'.
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