Muere en la c¨¢rcel el ¨²ltimo gran 'capo' de la mafia en EE UU

John Gotti, el ¨²ltimo gran jefe de la Mafia estadounidense, muri¨® ayer en la c¨¢rcel de Springfield (Missouri), donde cumpl¨ªa una condena a perpetuidad. Gotti ten¨ªa 61 a?os y padec¨ªa un c¨¢ncer de garganta. Fue el m¨¢s violento, el m¨¢s bravuc¨®n y el m¨¢s elegante de los capos neoyorquinos. Aunque lleg¨® a ser considerado un capo di tutti capi, su gesti¨®n result¨® fatal para la familia Gambino. Gotti, llamado el Don elegante por sus impecables trajes italianos, atrajo demasiada atenci¨®n sobre los Gambino.

Los Gambino, que eran la principal de las cinco familias tradicionales de la mafia neoyorquina, hoy constituyen un grupo casi marginal. Gotti, nacido en 1940 en Brooklyn (Nueva York), uno m¨¢s entre los 13 hijos de un matrimonio de emigrantes napolitanos, siempre destac¨® por su violencia. Los Gambino le reclutaron como mat¨®n y al cabo de un tiempo le confiaron el saqueo sistem¨¢tico de los materiales utilizados en la construcci¨®n del aeropuerto John Fitzgerald Kennedy. Entre 1969 y 1992 cumpli¨® una condena por robo y agresiones. Al salir de prisi¨®n asesin¨® a un hombre que hab¨ªa matado a un sobrino del gran jefe Carlo Gambino, lo que le supuso cuatro a?os m¨¢s de c¨¢rcel y, despu¨¦s, un r¨¢pido ascenso en el escalaf¨®n familiar.

El ¨²ltimo paso hacia la cima lo dio por s¨ª solo el 16 de diciembre de 1985, frente al restaurante Sparks Steak House, en la calle 46 de Manhattan. Paul Castellano, el sucesor de Carlo Gambino como jefe de la familia, sol¨ªa comer en ese restaurante. Ese d¨ªa, dos hombres armados le esperaban a la salida. Gotti estaba situado a menos de 30 metros, protegido de la nieve bajo un espl¨¦ndido abrigo de cachemira, y observ¨® c¨®mo Castellano, que se negaba a introducir a los Gambino en el tr¨¢fico de drogas, y su ch¨®fer ca¨ªan cosidos a tiros. Luego camin¨® tranquilamente hacia el cuerpo para asegurarse de que el jefe hab¨ªa muerto. Pocas semanas despu¨¦s, John Gotti asumi¨® la sucesi¨®n de Castellano. De forma inmediata empez¨® a realizar compraventas de coca¨ªna.

El FBI intent¨® varias veces, sin ¨¦xito, acabar con Gotti. En 1987 fue declarado 'no culpable' por un tribunal federal cuyo jurado cobr¨® de los Gambino. Lo mismo ocurri¨® en 1990. En 1992, al fin, los federales lograron convencer a Salvatore Gravano, lugarteniente de Gotti, para que testificara contra su jefe, y mantener en secreto (incluso para el juez) las identidades de los miembros del jurado. Los fiscales hab¨ªan grabado decenas de conversaciones telef¨®nicas del acusado, presentadas como prueba durante el juicio. En una de ellas, el Don elegante presum¨ªa de haber matado a un hombre 'porque no acudi¨® cuando le llam¨¦'. John Gotti fue condenado a cadena perpetua por 14 delitos, entre ellos los de asesinato, extorsi¨®n y evasi¨®n fiscal.

'El ascenso y ca¨ªda de John Gotti refleja perfectamente por qu¨¦ la Mafia hoy ya no tiene poder ni credibilidad', escribi¨® el mafioso Bill Bonanno en sus memorias. 'Gotti era un producto totalmente americanizado, un simple mat¨®n callejero que ascendi¨® por la v¨ªa de ser m¨¢s duro que los otros soldados'.

John Gotti deja dos hijas, Victoria (autora de novelas rom¨¢nticas y esposa de Carmine Agnello, mafioso destacado) y Angela, y un hijo, Peter, presunto heredero del negocio familiar y actualmente en prisi¨®n. Peter Gotti es un gran enigma para el FBI, que no sabe si considerarle un idiota o un tipo inteligent¨ªsimo que simula ser tonto. 'Es el hazmerre¨ªr del negocio, la familia Genovese ni siquiera acepta reunirse con ¨¦l', dijo Glenn Mouw, agente federal especializado en los Gambino.