Berlusconi aspira a convertirse en el primer presidente de Italia elegido popularmente

El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, destap¨® ayer sus 'cartas' pol¨ªticas, al confesar que si el Parlamento se lo permite no dudar¨ªa en convertirse en el primer presidente italiano elegido por el pueblo. La candidatura de Il Cavaliere para sustituir a Carlo Azeglio Ciampi en 2006 (fecha en la que coincide el fin de su mandato y las elecciones legislativas) fue adelantada el jueves por el l¨ªder de la Liga Norte y ministro para las Reformas, Umberto Bossi, quien apost¨® por una reforma presidencialista, basada en el modelo franc¨¦s, de la Constituci¨®n italiana.

Preguntado por su disponibilidad para asumir ese reto, Berlusconi se reconoci¨® ayer dispuesto a 'sacrificarse' por el pa¨ªs. El camino al Quirinale (sede de la presidencia) quedar¨ªa allanado para Berlusconi si progresaran algunas iniciativas judiciales lanzadas recientemente por parlamentarios de su coalici¨®n. La ¨²ltima de ellas es un proyecto de ley presentado el jueves por el senador ex democristiano Melchiorre Cirami, que aboga por una modificaci¨®n del C¨®digo de Derecho Procesal para aceptar 'la sospecha leg¨ªtima' como causa para trasladar un juicio de un tribunal a otro. En estos momentos, Berlusconi est¨¢ implicado en el proceso SME que se celebra en Mil¨¢n, una capital judicial poco estimada por Il Cavaliere, y una norma de este tipo le ser¨ªa sumamente ¨²til. En este proceso, Berlusconi est¨¢ acusado de haber comprado a la justicia para obtener una sentencia favorable en una operaci¨®n financiera.

Aun as¨ª, el traslado de sede reclamado por sus abogados y por los de su colaborador, Cesare Previti, tambi¨¦n implicado en un proceso similar, no es urgente, ya que el tribunal decidi¨® ayer suspender el juicio hasta el 21 de septiembre por imposibilidad material de acudir al aula de Mil¨¢n de los dos abogados defensores del primer ministro. Ambos, Gaetano Pecorella y Nicol¨® Ghedini, son parlamentarios del centroderecha y ayer hubo una importante votaci¨®n en la C¨¢mara de Diputados.

Al entrar en el hemiciclo, Berlusconi fue abordado por los periodistas, que le preguntaron sobre la posibilidad de su eventual candidatura a la presidencia de la Rep¨²blica. 'Con franqueza', contest¨® el primer ministro, 'tengo que decir que lo que tengo en mente es un cambio en el pa¨ªs'. 'Quiero modernizarlo, hacerlo m¨¢s competitivo, y con el actual sistema, si fuera al Quirinal no podr¨ªa hacerlo, porque es muy dif¨ªcil realizar esta transformaci¨®n en una sola legislatura. Por eso, si se mantiene el sistema actual me volver¨¦ a presentar para gobernar otros cinco a?os este pa¨ªs. Si, por el contrario, se hace la reforma institucional y gobernar el pa¨ªs significa ser el presidente de la Rep¨²blica, me sacrificar¨¦', agreg¨®.

La actual Constituci¨®n, de 1948, establece que el presidente de la Rep¨²blica es elegido por el Parlamento, por mayor¨ªa de los dos tercios de los votos, al menos en las tres primeras votaciones. Esto significa que, a menudo, la elecci¨®n se convierte en un proceso largo y tortuoso como un c¨®nclave vaticano. La presidencia se otorga casi como un premio al final de una carrera pol¨ªtica, concedido con el benepl¨¢cito de los poderes f¨¢cticos. En teor¨ªa, el presidente tiene la potestad de disolver las C¨¢maras y de nombrar a los ministros. En la pr¨¢ctica, rara vez sucede as¨ª, y el jefe del Estado se limita a refrendar con su firma los nombramientos acordados ya en sede gubernamental.

Berlusconi record¨® ayer que la reforma presidencialista forma parte del programa de Forza Italia y de la coalici¨®n de centroderecha, que en v¨ªsperas de las elecciones de 2001 debati¨® largo y tendido sobre la posibilidad de una reforma constitucional. La figura de Jacques Chirac es la que mejor se adapta a las aspiraciones del Il Cavaliere, que recibi¨® ayer el total respaldo de su n¨²mero dos, el vicepresidente Gianfranco Fini, en su nueva carrera. 'Berlusconi es un candidato serio y cre¨ªble', dijo Fini respecto a esa eventual candidatura a la presidencia de la Rep¨²blica. El vicepresidente ser¨ªa as¨ª el heredero natural de Berlusconi al frente de la coalici¨®n, e incluso al frente de un Gobierno de centroderecha, caso de triunfar de nuevo en las elecciones de 2006.

'Ciencia-ficci¨®n'

La oposici¨®n calific¨® las especulaciones respecto a Berlusconi presidente de pura 'ciencia-ficci¨®n'. 'Creo que estamos ante un nuevo anuncio prematuro del primer ministro', dijo ayer el portavoz de los Dem¨®cratas de Izquierda (DS) en la C¨¢mara, Luciano Violante.

Para el l¨ªder de los Comunistas Italianos, Oliviero Diliberto, se trata de una manifestaci¨®n m¨¢s de 'los delirios de omnipotencia' de Berlusconi, que en estos momentos ocupa todav¨ªa la cartera de Exteriores adem¨¢s de ser el jefe del Ejecutivo. El primer ministro descart¨® hace 10 d¨ªas la hip¨®tesis de su candidatura a la presidencia de la Rep¨²blica, con la misma energ¨ªa que rechaz¨® cambios en su Gobierno.