Deterioro afgano

El intento de acabar ayer en Kandahar con la vida del presidente Hamid Karzai y la explosi¨®n de un coche bomba que se cobr¨® la vida de una quincena de personas en el bullicioso centro comercial de Kabul han sido tristes recordatorios, en v¨ªsperas del primer aniversario del 11-S, de que la situaci¨®n en Afganist¨¢n, lejos de estabilizarse, se deteriora. La guerra que desat¨® EE UU consigui¨® desplazar del poder a los talibanes, pero no ha pacificado el pa¨ªs y ser¨¢ necesario que la comunidad internacional redoble su esfuerzo y que Karzai, cuestionado por algunos jefes tribales, consiga mantener el control de la situaci¨®n.

Detr¨¢s de estos atentados podr¨ªan estar los propios talibanes o Al Qaeda, que han tenido tiempo de reagruparse, pero no cabe descartar la mano de posibles caudillos locales enfrentados a Karzai. El presidente est¨¢ protegido por fuerzas estadounidenses que abrieron fuego y mataron a su agresor. Pero el gobernador de Kandahar fue alcanzado por un disparo.

En julio, un supuesto portavoz de Al Qaeda alert¨® de que su organizaci¨®n y los talibanes se iban a lanzar a una nueva guerra de guerrillas y a realizar atentados en Afganist¨¢n, donde parecen moverse con facilidad. Las ¨²ltimas grandes operaciones militares de EE UU para peinar el este del pa¨ªs no han conseguido el ¨¦xito anunciado por Washington y el mandato de la fuerza internacional de pacificaci¨®n (ISAF) resulta insuficiente al limitarse a Kabul y alrededores. Ayer mismo, el n¨²mero dos del Pent¨¢gono, Paul Wolfowitz, se mostr¨® partidario de ampliar el mandato y la dotaci¨®n de 16.000 efectivos de la ISAF. Los sovi¨¦ticos llegaron a desplegar en los a?os ochenta m¨¢s de 100.000 hombres en Afganist¨¢n, pero no lograron controlar m¨¢s que las ciudades en las que se instalaron.

Es urgente acabar este conflicto, so pena de que se empantane y d¨¦ oportunidad a los talibanes y a los restos de Al Qaeda de lanzarse a una larga guerra de desgaste. La comunidad internacional debe terminar la labor iniciada y volcarse a fondo en la pacificaci¨®n y construcci¨®n de un Estado afgano que pueda vivir en paz consigo mismo.