Caras
Es un dicho muy com¨²n que lo peor no es perder, sino la cara que se te queda. El Joventut sali¨® el s¨¢bado del Palau Blaugrana con una expresi¨®n mezcla de incredulidad, indignaci¨®n y pesadumbre al comprobar c¨®mo el buen y reivindicativo partido que hab¨ªa jugado en una cancha tan complicada como la azulgrana hab¨ªa servido para poco m¨¢s que irse a su casa con la cabeza bien alta. Tambi¨¦n se pudieron leer cosas m¨¢s fuertes y expl¨ªcitas en Manel Comas, entrenador verdinegro, cuyo mosqueo era monumental y pidi¨® muy educadamente el internamiento del colegiado Ortega en una nevera por una buena temporada. Hay que agradecer a Comas su originalidad y el no haber ca¨ªdo en lo cl¨¢sico de sinverguenza, jeta, no hay derecho y otros calificativos demasiado manidos. Resulta comprensible el mosqueo de los de la Penya. Jugaron un buen partido en un escenario exigente, se sobrepusieron a los problemas de personales de Baston y Tabak, aguantaron las tarascadas defensivas del Bar?a sin perder la compostura, se mostraron con recursos t¨¦cnicos suficientes y contaron en sus filas con el hombre del partido, su base Marco, que tuvo una noche ejemplar. ?Y si haciendo todo esto, se vuelven a Badalona con la mochila llena de autoestima pero vac¨ªa de puntos, qu¨¦ tienen que hacer para ganar? Hombre, un mejor arbitraje que no cometa tres errores consecutivos en el minuto final (uno perjudic¨® al Bar?a, dos a la Penya) en este caso les hubiese beneficiado, pero dejarlo ah¨ª ser¨ªa un an¨¢lisis incompleto, peligroso y poco constructivo. El victimismo (ver Gaspart) no conduce a buen puerto. Dado que el resultado no lo cambia ya nadie por muchos env¨ªos a frigor¨ªficos industriales, ser¨ªa m¨¢s provechoso que en el interesante viaje que quiere protagonizar el Joventut para volver a ser lo que fue (por momentos lo del s¨¢bado se pareci¨® al cl¨¢sico de otros tiempos) poder aprender de los pocos errores que cometieron. Porque pagaron muy caro que Baston fuese a por uvas en mitad de campo y cometiese una absurda quinta falta, o que en los ¨²ltimos ataques faltase algo m¨¢s de raciocinio en los tiros, o que no fijasen en la zona defensiva mejor a Navarro, o que Espil no estuviese muy afortunado y Radunovic m¨¢s centrado. Puestos a hilar muy fino, ?qu¨¦ hac¨ªa Tabak, un m¨¢s que discreto tirador de personal, en la l¨ªnea de acci¨®n del ¨²ltimo ataque verdinegro? Las grandes gestas, y ganar en el Palau por uno o dos puntos es una de ellas, exigen actuaciones cercanas a la perfecci¨®n. El Joventut lo tuvo en su mano, pero acab¨® con mala cara. Es uno de los precios que hay que pagar en el camino hacia la mayor¨ªa de edad, y eso lo sabe Manel Comas mejor que nadie.
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