Un falso enfermero logra trabajar dos a?os en el ¨¢rea de cardiolog¨ªa del Gregorio Mara?¨®n

La Fiscal¨ªa de Madrid se ha querellado por supuesta falsedad en documento p¨²blico e intrusismo contra un hombre que se hizo pasar por enfermero (ayudante t¨¦cnico sanitario, ATS) y que ha logrado trabajar durante casi dos a?os en el ¨¢rea de cardiolog¨ªa y servicios especiales del hospital Gregorio Mara?¨®n, dependiente de la Comunidad de Madrid. Un portavoz del hospital admiti¨® ayer que este hombre trabaj¨® en el centro hasta hace un a?o y que ignoraba su actual paradero y actividad, y a?adi¨® que no les consta su oficio real.

Seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, el falso ATS, que se corresponde con el nombre de L. M. R. B., acudi¨® a la Consejer¨ªa de Salud de la Comunidad en enero de 1999 y dijo que era enfermero y pidi¨® trabajo en el Gregorio Mara?¨®n (uno de los hospitales m¨¢s grandes de Espa?a, pues est¨¢ dotado con unas 1.700 camas sanitarias). El hombre present¨® el preceptivo t¨ªtulo acad¨¦mico y no pas¨® mucho tiempo antes de que le llamasen para trabajar. En concreto, se le ofreci¨® un puesto en el servicio de cardiolog¨ªa del Mara?¨®n, el mismo en el que ha estado durante casi dos a?os sin tener el correspondiente t¨ªtulo acad¨¦mico de enfermer¨ªa. En ese servicio ha trabajado, y cobrado los correspondientes sueldos, hasta noviembre de 2001, cuando se descubri¨® su impostura. En ese tiempo, el querellado ha atendido y suministrado medicaci¨®n a enfermos y se ha rotado en los turnos con el resto de sus compa?eros de trabajo, seg¨²n fuentes jur¨ªdicas. Su intrusi¨®n laboral acab¨® cuando algunos de sus compa?eros comenzaron a sospechar que el enfermero no ten¨ªa suficiente cualificaci¨®n. La Comunidad abri¨® un expediente e inici¨® las oportunas averiguaciones. "Alguien de su entorno laboral dio el chivatazo", se?alan los citados medios. "Y menos mal que lo dio, porque es impresentable que alguien trabaje en un hospital, al cuidado de enfermos, sin estar cualificado", destacan.

Seg¨²n estas fuentes, desde la Comunidad se hicieron gestiones con la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense, y ¨¦sta, tras escudri?ar en sus archivos, constat¨® que las sospechas eran ciertas: el querellado no figuraba en sus archivos como Ayundante T¨¦cnico Sanitario.

Para cerciorarse de la falsedad del t¨ªtulo, la Comunidad remiti¨® una copia de ¨¦ste a la Direcci¨®n General de T¨ªtulos, Convalidaciones y Homologaciones del Ministerio de Educaci¨®n. Los responsables de este departamento detectaron que no exist¨ªa ninguna inscripci¨®n acad¨¦mica a nombre del ahora querellado y certificaron lo que ya hab¨ªa avanzado la Facultad de Medicina de la Complutense, esto es, que L. M. R. B. carec¨ªa de la correspondiente titulaci¨®n acad¨¦mica.

"Nombre manipulado"

En realidad, el t¨ªtulo que el querellado present¨® en la Comunidad de Madrid era legal, pues hab¨ªa sido expedido en 1997 por el Ministerio de Educaci¨®n, pero a nombre de una mujer. Por eso, se empez¨® a mirar con lupa el t¨ªtulo, buscando alg¨²n tipo de manipulaci¨®n, y se constat¨® que la letra del nombre y la del lugar de nacimiento que figuran en ¨¦l hab¨ªan sido manipulados: el cuerpo de letra era diferente al de las otras letras.

Seg¨²n la Fiscal¨ªa de Madrid, L. M. R. B. ha podido cometer un supuesto delito de falsedad en documento p¨²blico del art¨ªculo 390.1 del vigente C¨®digo Penal y otro de intrusismo, ya que se sirvi¨® de un t¨ªtulo falso para desempe?ar un puesto en la Administraci¨®n p¨²blica que legalmente requiere una titulaci¨®n. "No es lo mismo que una persona que no ha estudiado eletricidad se dedique a instalar bombillas, que alguien sin preparaci¨®n se dedique a atender enfermos; en el segundo caso, las consecuencias pueden ser terribles: con la salud de las personas no se puede jugar", afirman fuentes jur¨ªdicas.

Ha sido el Ministerio de Educaci¨®n el que alert¨® a la Fiscal¨ªa General del Estado de estos hechos para que iniciase contra el infractor las oportunas acciones legales. Este departamento, a su vez, puso tales hechos en conocimiento de la Fiscal¨ªa de Madrid, al ser en un hospital de esta Comunidad en el que el querellado cometi¨® los supuestos delitos. El falso ATS tendr¨¢ que responder ahora ante un juez por falsedad e intrusismo.