Las ciudades
Las ciudades existen, que es lo principal, no son entelequias ni divagaciones. Las ciudades trabajan y crecen, recuerdan y se miran a s¨ª mismas en los ojos de sus vecinos. Las ciudades son focos de cultura, de imaginaci¨®n y de una eternidad fraterna. Luego, por encima de las ciudades (aunque yo creo que por debajo) quedan las miradas de los pol¨ªticos, los urbanistas, los arquitectos y los soci¨®logos. Tambi¨¦n, a veces, la de los cl¨¦rigos. En cualquier caso, las ciudades son lo que perdura.
Las ciudades est¨¢n ah¨ª, se r¨ªen de los siglos aunque parezca que no se r¨ªen. ?Qu¨¦ le van a decir a C¨¢diz? ?Qu¨¦ es espa?ola? S¨ª, claro, lo es ahora, pero ese ahora apenas supone la d¨¦cima parte de su vida. Antes fue fenicia, griega, no s¨¦ si tartessa, ib¨¦rica, romana, visigoda, musulmana, castellana y tal vez dentro de cincuenta a?os ser¨¢ europea nada m¨¢s, y andando el tiempo todos viviremos (vivir¨¢n) en la sociedad global y mestiza, esa que tantos aborrecen, y que yo admiro desde esta columna, convencido de que no existe otra senda mejor para el hombre, la mujer y el ni?o. Las ciudades son nuestro pasado m¨¢s brillante y tambi¨¦n el porvenir m¨¢s natural. Un futuro cada d¨ªa m¨¢s ajeno a esas camisas de fuerza que son los estados. Nos espera, pues, una sociedad mundial de las ciudades, creadora e interconectada, y cuando digo ciudades digo tambi¨¦n sus "hinterlands", sus zonas de influencia, sus burgos adscritos, y todos creando una civilizaci¨®n ¨²nica y diversa a un tiempo, bajo un gobierno mundial y democr¨¢tico.
Y a todo este sue?o, en el que creo, y por volver al camino del realismo, debo a?adir que Espa?a est¨¢ muy desequilibrada de competencias. Que las comunidades aut¨®nomas se lo llevan casi todo, fagocitando al Estado (medida razonable) y tambi¨¦n a los municipios (grave error). Y que hay que darle m¨¢s poder a las ciudades, m¨¢s competencias, como ya sucede en el resto de los pa¨ªses avanzados de Europa. Porque las ciudades, probablemente, est¨¢n mucho m¨¢s cerca de la libertad y de la memoria que las patrias y las grandes instalaciones jur¨ªdicas.
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