Seguridad precaria en los polvorines
Las investigaciones policiales llevadas a cabo tras el 11-M han constatado que en Espa?a existe un problema grave de falta de medidas de control y seguridad de explosivos, en un pa¨ªs donde se fabrican cada a?o cuatro millones de kilos de Goma 2, que se distribuyen en unos 10.000 polvorines.
La Guardia Civil entreg¨® al Ministerio del Interior un informe, a finales de 2004, sobre el control de explosivos en Espa?a en el que los agentes subrayaban que era necesario instar a los delegados del Gobierno, en especial al de Asturias, para que se realicen campa?as de inspecci¨®n en el interior de las minas, que es donde m¨¢s dif¨ªcil resulta controlar si se consume la totalidad del explosivo destinado a la voladura.
Tras 45 inspecciones de la Guardia Civil en Asturias en las ¨²ltimas semanas de 2004, los agentes abrieron expediente sancionador a 12 empresas por 14 faltas. Entre los incumplimientos m¨¢s comunes destacaban la discrepancia entre el n¨²mero de cartuchos y detonadores que figuran inscritos en los registros de las empresas y los realmente hallados en los centros de trabajo. El caso m¨¢s grave fue el de una constructora que ten¨ªa fuera del polvor¨ªn "varios cientos" de kilos de cartuchos almacenados.
Para evitar este descontrol, Interior ha impulsado una reforma del reglamento de explosivos, donde, como principal novedad, contempla que las autorizaciones para la utilizaci¨®n de explosivos ser¨¢n concedidas por la Secretar¨ªa de Estado de Seguridad -en lugar de por la Direcci¨®n General de Minas-. Las empresas mineras tambi¨¦n estar¨¢n obligadas a contratar vigilantes de seguridad para controlar cada voladura.
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