Estamos hartos
Todav¨ªa inundados por el inmenso dolor producido por la p¨¦rdida de nuestro padre y marido, nos decidimos a hacer p¨²blico un segundo comunicado con respecto a las difamaciones vertidas de forma reiterada en diferentes medios de comunicaci¨®n en torno a la trayectoria vital de Antonio Pastor Mart¨ªnez.
En el primer comunicado, emitido unos d¨ªas antes de su muerte dec¨ªamos: "Antonio Pastor Mart¨ªnez siempre que se lo han requerido periodistas e historiadores ha relatado la verdad de la historia de su vida, marcada por dos guerras, el exilio y la privaci¨®n de libertad, tanto en campos de concentraci¨®n como en c¨¢rceles franquistas. Debido a la extrema gravedad de su estado de salud, es su familia la que, ante las difamaciones difundidas por alg¨²n medio de comunicaci¨®n en el sentido de cuestionar esta verdad, quiere manifestar su desolaci¨®n e indignaci¨®n, pidiendo a quien tiene la responsabilidad de informar que lo haga con rigor, calibrando el da?o que puede hacer a las personas y a su memoria con suposiciones no contrastadas".
Tras el art¨ªculo publicado por EL PA?S Andaluc¨ªa (26 de junio), queremos manifestar que nos reiteramos ¨ªntegramente en lo dicho en el primer comunicado.
Estamos hartos de que se viertan reiteradamente las mismas acusaciones llenas de ignorancia o mala intenci¨®n. Desconocemos cu¨¢les son las motivaciones o los intereses que llevan a algunas personas a escribir tales cosas. Ignoramos si lo que se pretende es criticar una supuesta falta de rigor por parte de los medios de comunicaci¨®n a la hora de abordar temas hist¨®ricos, adquirir notoriedad a trav¨¦s de ellos, o si s¨®lo se trata de la necesidad de rellenar un espacio en blanco en el peri¨®dico.
Una vez ha fallecido, se reiteran unas acusaciones que cuestionan y pretenden desacreditar su trayectoria vital de 86 a?os, cuando es p¨²blica y est¨¢ documentada su lucha por las libertades al lado de la legalidad republicana como oficial del ej¨¦rcito, su exilio, su paso por campos de concentraci¨®n, c¨¢rceles franquistas y batallones de trabajos forzados.
El derecho al honor s¨®lo puede ceder ante la libertad de informaci¨®n cuando ¨¦sta es veraz y objetiva y la comprobaci¨®n de los hechos haya sido objeto de previo contraste con datos objetivos, o con fuentes informativas de solvencia. Solvencia escasa, cient¨ªficamente hablando, de los dos llamados investigadores que son citados por EL PA?S como fuente fundamental de su art¨ªculo.
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