El Gobierno liberaliza las tarifas de Telef¨®nica tras 80 a?os de regulaci¨®n

Telef¨®nica gozar¨¢ por fin de la ansiada libertad de tarifas. Despu¨¦s de m¨¢s de 80 a?os de regulaci¨®n, el Gobierno deja de fijar los precios de la compa?¨ªa. La Comisi¨®n del Mercado de Telecomunicaciones (CMT) ha decidido eliminar el sistema de precios m¨¢ximos por el que se reg¨ªa el conjunto de tarifas de telefon¨ªa fija. Telef¨®nica fijar¨¢ libremente los precios pero deber¨¢ informar a la CMT con 10 d¨ªas de antelaci¨®n. No obstante, la medida no afecta a la cuota de abono mensual que cobra la compa?¨ªa a sus clientes, que seguir¨¢ siendo regulada por el Gobierno hasta que la CMT se pronuncie.

Libertad de tarifas para Telef¨®nica. La CMT, el m¨¢ximo organismo regulador de las telecomunicaciones, anunci¨® ayer la eliminaci¨®n del sistema de precios m¨¢ximos referenciado a la inflaci¨®n (conocido como price cap), por el que se rigen las tarifas del conjunto de servicios de Telef¨®nica.

La medida, que entrar¨¢ en vigor en el plazo aproximado de una semana, permitir¨¢ a Telef¨®nica fijar libremente de acuerdo con el mercado los diferentes precios de llamadas, tanto para empresas como para particulares. La CMT ha adoptado esta medida al entender que existe un grado suficiente de competencia en el mercado de la telefon¨ªa fija, tras el an¨¢lisis que ha encargado la Comisi¨®n Europea a todos los reguladores de la Uni¨®n.

El sistema de precios m¨¢ximos, cuyo tope fija anualmente el Gobierno, era el ¨²ltimo vestigio de regulaci¨®n en materia de tarifas telef¨®nicas, ya que tanto las tarifas del resto de compa?¨ªas de telefon¨ªa fija e Internet, as¨ª como las del m¨®vil se encuentran completamente liberalizadas. El price cap, que entr¨® en vigor en 2000, fue el primer avance en esa liberalizaci¨®n. Anteriormente, y durante los casi 80 a?os que dur¨® el monopolio de Telef¨®nica, el sistema era m¨¢s f¨¦rreo, ya que todos los precios eran autorizados por el Gobierno.

La Comisi¨®n Delegada para Asuntos Econ¨®micos, el m¨¢ximo ¨®rgano del Gobierno en materia de precios, aprob¨® en diciembre el ¨²ltimo price cap, correspondiente a 2006, con la congelaci¨®n de la factura telef¨®nica, es decir, que la variaci¨®n del precio de la cesta compuesta por los diferentes tipos de llamadas (metropolitanas, provinciales, interprovinciales, internacionales y de fijo a m¨®vil) no supone ninguna subida.

Cuota de abono

Esa orden quedar¨¢ derogada en cuanto entre en vigor la norma aprobada por la CMT. No obstante, la libertad de tarifas a¨²n no ata?e a la cuota de abono mensual, el concepto m¨¢s importante de la factura telef¨®nica, ya que representa m¨¢s de la mitad del gasto mensual del consumidor medio. El regulador decidir¨¢ pr¨®ximamente si liberaliza o no esta cuota, actualmente fijada en 13,43 euros al mes sin IVA (26,86 en el recibo bimensual).

Pese a la libertad de precios, la CMT seguir¨¢ vigilando a Telef¨®nica. La operadora seguir¨¢ sometida a la obligaci¨®n de comunicar al regulador cualquier oferta comercial, programa de precios, descuento o paquete de servicios, 10 d¨ªas antes de su comercializaci¨®n en el mercado (en lugar de los 21 d¨ªas actuales). Asimismo, tampoco afecta al redondeo, que prohibi¨® el Gobierno.

La compa?¨ªa no podr¨¢ realizar ofertas en contra de la libre competencia, como son las reducciones de precios anticompetitivos (estrechamiento de m¨¢rgenes o precios por debajo del coste), o el empaquetamiento de servicios.

La medida fue recibida de muy distinta manera por Telef¨®nica y por las asociaciones de los consumidores. La compa?¨ªa salud¨® la decisi¨®n como "positiva", aunque exigi¨® que se extienda esa liberalizaci¨®n a otros ¨¢mbitos, como los precios mayoristas que cobra a las compa?¨ªas de Internet o la normativa para cambiar de operador. Esta ¨²ltima normativa, por ejemplo, impide a Telef¨®nica contactar con los clientes que se pasan a otra compa?¨ªa de la competencia.

Mientras tanto, la Federaci¨®n de Consumidores en Acci¨®n (Facua) recibi¨® con preocupaci¨®n la noticia por entender que la experiencia ha demostrado, en sectores como los carburantes o, sin ir tan lejos, la telefon¨ªa m¨®vil, que la ausencia de tarifas reguladas no ha tra¨ªdo como consecuencia mayores niveles de competencia ni beneficios para los consumidores.