Del naranjo al Ford Fiesta
La compa?¨ªa construy¨® su f¨¢brica espa?ola hace 30 a?os en Almussafes, sobre unos cultivos, y cambi¨® la pol¨ªtica industrial
Miles de trabajadores del campo valenciano cambiaron hace 30 a?os los naranjos por la cadena de montaje. Espa?a se preparaba para la transici¨®n a la democracia y tambi¨¦n emprend¨ªa una modernizaci¨®n industrial en la que estaban destinadas a dar un empuj¨®n las factor¨ªas de autom¨®viles. Sobre antiguos cultivos de la comarca valenciana de la Ribera, en Almussafes, empezaba a funcionar, el 18 de octubre de 1976, la planta de Ford.
La factor¨ªa del entra?able Fiesta es hoy, con sus 400.000 autom¨®viles al a?o y su flexibilidad en la producci¨®n, una pieza clave de la industria del sector en Europa.
A principios de los setenta operaba en Espa?a un reducido n¨²mero de empresas automovil¨ªsticas: Seat, de capital espa?ol, la francesa Renault y Chrysler. El pa¨ªs manten¨ªa una pol¨ªtica industrial r¨ªgida que el Gobierno modific¨® ante la implantaci¨®n de la Ford. La adaptaci¨®n legislativa abri¨® la puerta a la llegada de otras compa?¨ªas, como General Motors o Nissan.
Se exigi¨® exportar dos tercios de la producci¨®n, lo que anim¨® la llegada de m¨¢s multinacionales
La historia de Almussafes comenz¨® con aquello de que a la tercera fue la vencida. Tras dos intentos previos, en la primavera de 1973, el entonces ministro de Industria, Jos¨¦ Mar¨ªa L¨®pez de Letona, anunciaba por televisi¨®n la decisi¨®n de Ford de fabricar coches en Valencia. Era el broche de los contactos iniciados en 1972.
A favor de la elecci¨®n de Espa?a jugaban los bajos costes laborales y el ser un mercado en crecimiento. En contra, que a¨²n arrastraba una organizaci¨®n aut¨¢rquica que conllevaba "una reglamentaci¨®n para importar o exportar muy estricta", explica Juan Ome?aca, que fue durante 26 a?os gerente de Asuntos P¨²blicos de la factor¨ªa valenciana.
El Gobierno opt¨®, por ello, por elaborar un decreto que, entre otras cuestiones, exig¨ªa que al menos el 55% del material que usara Ford se comprara en Espa?a y que se exportara dos tercios de la producci¨®n. Un cors¨¦ que, en cualquier caso, el antiguo ejecutivo de Ford subraya que permiti¨® la posterior implantaci¨®n en Espa?a de otras multinacionales. En la actualidad, la planta exporta el 88% de su producci¨®n, seg¨²n los datos de 2005.
Almussafes compiti¨® con otras poblaciones espa?olas. Ford prefiri¨® evitar las zonas de alta concentraci¨®n industrial. Les convenci¨® la proximidad del puerto de Valencia y de mano de obra excedentaria.
"La fe que todos pusimos en estos campos de naranjas y cebollas se ha visto recompensada con creces", dijo Henry Ford II en la celebraci¨®n del d¨¦cimo aniversario de la factor¨ªa. No era una met¨¢fora. Junto a ella hay ahora un parque de 40 empresas proveedoras conectado con t¨²neles, adem¨¢s de 7.600 empleados directos y casi 30.000 inducidos en toda Espa?a.
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