Paisajismo frente a urbanismo salvaje

La movilizaci¨®n ciudadana para salvar El Saler de ser un nuevo Benidorm constituye un cap¨ªtulo luminoso de la historia de Valencia. Lo que no es tan conocido es c¨®mo un equipo multidisciplinar de profesionales, encabezados por el arquitecto Alfredo Fern¨¢ndez de la Reguera, ha logrado recuperar la dehesa de la violenta degradaci¨®n del asfaltado de calles, aparcamientos y paseos para la prevista macrourbanizaci¨®n. La actuaci¨®n ha vuelto a insuflar vida a las dunas. Sus caminos de tablas de madera se internan respetuosos en el parque natural. La intervenci¨®n en El Saler es, de hecho, un ejemplo de paisajismo que se analiza en los foros de profesionales y estudiantes desde hace a?os. Tambi¨¦n se cita en la nueva revista Paisea, especializada en paisajismo o arquitectura del paisaje, que se presenta ma?ana en el Sporting Club de Russafa (20 horas). Se trata de una publicaci¨®n cuatrimestral realizada desde Valencia por un grupo de j¨®venes profesionales, coordinados por el arquitecto Jos¨¦ Manuel Vidal, interesados en difundir el respeto por el entorno en las actuaciones en espacios p¨²blicos y preocupados por el urbanismo salvaje.

"Aunque el problema de la construcci¨®n masiva es generalizado, lo que est¨¢ pasando en la Comunidad Valenciana es de lo peor", apunta Vidal, profesor de la Universidad Polit¨¦cnica de Valencia. Ante esta situaci¨®n, hay una sensibilidad emergente en la sociedad que se traduce tambi¨¦n en el colectivo integrado por arquitectos, ingenieros, ge¨®grafos, agr¨®nomos o bi¨®logos, que puede intervenir en un trabajo de paisajismo. La revista es un reflejo de esa sensibilidad muy arraigada en Alemania, por ejemplo, donde hay m¨¢s publicaciones de este tipo.

El primer n¨²mero de Paisea est¨¢ dedicado a la relaci¨®n entre el mar y la tierra. Adem¨¢s de art¨ªculos de opini¨®n, incluye diversos proyectos y actuaciones nacionales e internacionales de paseos mar¨ªtimos y puertos, como los de Salou, Oporto, Badalona, New Plymouth, Wellington o Agadir. Entre ellos, se halla el frente mar¨ªtimo de Torrevieja, dise?ado por la arquitecta Carme Pin¨®s, donde el agua, las rocas y el paseo mar¨ªtimo parecen conjugarse sin transiciones ni barreras, de manera natural. Otro paradigma de intervenci¨®n es la Barceloneta. Es la segunda revista espa?ola de paisajismo y se dirige a un p¨²blico especializado, principalmente, pero tambi¨¦n a todos aquellos interesados en la materia. Se presenta en versi¨®n biling¨¹e, castellano e ingl¨¦s. Su primera portada muestra la costa de Formentera, con las caracter¨ªsticas v¨ªas de madera para bajar las barcas de pescadores, ejemplo de integraci¨®n respetuosa de la mano del hombre con la naturaleza.

"A veces lo mejor que se puede hacer con un espacio es dejarlo como est¨¢, no tocarlo, como la Serra d'Irta", indica Vidal. Es el caso tambi¨¦n del espacio proyectado para levantar el llamado Manhattan de Cullera. Una aberraci¨®n que destroza no s¨®lo el paisaje y la memoria de su entorno natural, sino que rompe tambi¨¦n incluso con los construcciones de apartamentos de la ya muy saturada Cullera, al doblarlos en altura, explica el arquitecto. Con las transformaciones profundas del territorio y el crecimiento acelerado de la econom¨ªa, el paisajismo cobra una especial relevancia. Por eso, el coordinador de la revista Paisea reclama que la ense?anza de la arquitectura del paisaje sea reglada en Espa?a y no se reduzca a un m¨¢ster en Barcelona.