La muerte de una luchadora antifranquista

Paqui?a, t¨² formaste parte del grupo de mujeres, muchas en el anonimato, que fueron ejemplo de lucha y libertad. Sufriste las humillaciones y violencia de los represores franquistas. Indomable ante el despotismo, mantuviste la dignidad que forj¨® tu ideal de dem¨®crata, esperando que el ejemplo rindiese un servicio complementario a la democracia restituida. Pero ¨¦sta fue tan timorata que te situ¨® entre los olvidados luchadores del antifranquismo.

Los que hemos seguido luchando por el restablecimiento de los valores democr¨¢ticos y c¨ªvicos te hemos tenido en nuestra agenda para un posible reconocimiento de v¨ªctimas de la dictadura. Es una paradoja que cuando se vislumbra una tard¨ªa ley de recuperaci¨®n de la memoria, nos dejas para siempre.

Pero Francisca Nieto Blanco, que termina sus d¨ªas en una residencia de ancianos en Ponferrada, entra en la larga lista de las v¨ªctimas que, por necesidad hist¨®rica, esperaron un reconocimiento en vida. Tuvo que aguantar a quienes rechazan la ley de la memoria y que, desde posiciones franquistas, intentan que la condici¨®n de v¨ªctima pase a ser un deshonor y caiga en el olvido.

Los luchadores antifranquistas se van, la dignidad y la memoria se perpet¨²an para que un d¨ªa la historia de Espa?a salga de su letargo y el Estado de derecho deje de ser un arma de discriminaci¨®n.

Con tu recuerdo, Paqui?a, continuaremos hasta que nos toque seguir tu destino. Con todo el cari?o que nos has merecido.