McCain suspende su campa?a por la crisis

El candidato dem¨®crata dijo que el debate debe celebrarse ma?ana como estaba previsto, porque ¨¦sa es la mejor manera en que los candidatos pueden responder a la angustia de los ciudadanos.

La sorprendente decisi¨®n de McCain, que se produce cuando el republicano retrocede en las encuestas y horas despu¨¦s de conocerse un posible esc¨¢ndalo en torno al jefe de su campa?a, puede resultar un golpe maestro o una simple muestra de desesperaci¨®n de un hombre que se ha visto hasta ahora inseguro y titubeante en relaci¨®n con la hecatombe sufrida en el sistema financiero.

"Nuestro pa¨ªs vive una crisis hist¨®rica", dijo McCain. "Tenemos que unirnos como americanos, no como dem¨®cratas o republicanos, sino como americanos. Tenemos que reproducir el mismo patriotismo que surgi¨® tras el 11-S".

Bush advierte de que "EE UU se enfrenta a una grave crisis financiera"

"Tenemos que actuar como americanos todos", coincidi¨® Obama. Pero, al mismo tiempo, "mi opini¨®n es que exactamente en momentos como ¨¦stos es cuando el pueblo americano necesita escuchar a la persona que dentro de aproximadamente 40 d¨ªas ser¨¢ responsable de lidiar con este caos". "Parte del trabajo del pr¨®ximo presidente", record¨® el candidato dem¨®crata, "ser¨¢ precisamente el de saber manejar m¨¢s de una cosa al mismo tiempo".

La propuesta de McCain es que tanto ¨¦l como Obama, ambos senadores, regresen a su esca?o y, desde esa posici¨®n, as¨ª como en su condici¨®n de l¨ªderes de sus respectivos partidos, contribuyan a que el Congreso apruebe la intervenci¨®n de Wall Street antes del pr¨®ximo fin de semana. El Gobierno de George Bush ha pedido 700.000 millones de d¨®lares (unos 477.000 millones de euros) para esa intervenci¨®n, pero la propuesta ha encontrado una fuerte resistencia en el Capitolio por legisladores de los dos bandos.

La campa?a de McCain anunci¨® que ser¨¢n suspendidos todos los anuncios electorales, as¨ª como las comparecencias p¨²blicas previstas por el candidato, incluida una entrevista en uno de los principales programas nocturnos de entretenimiento en televisi¨®n prevista para esta noche.

Obama asegur¨® que ha estado en permanente contacto con el secretario del Tesoro y con los principales responsables econ¨®micos del pa¨ªs, a los que se ha ofrecido a contribuir en la forma en que consideren m¨¢s oportuna para alcanzar un acuerdo bipartidista en el Congreso, pero a?adi¨® que continuar¨¢ explicando a los electores sus propuestas econ¨®micas porque ¨¦sa es su responsabilidad en las presentes circunstancias.

La iniciativa de actuaci¨®n conjunta surgi¨®, curiosamente, de Obama, que ya la pasada semana propuso una actuaci¨®n bipartidista frente a la crisis econ¨®mica y que ayer por la ma?ana llam¨® a McCain para sugerirle la redacci¨®n de un texto conjunto sobre los presentes acontecimientos. McCain, probablemente acorralado ante la acumulaci¨®n de datos adversos para su campa?a, respondi¨® seis horas m¨¢s tarde con esta bomba pol¨ªtica que cogi¨® a todos por sorpresa y que podr¨ªa obligar a retrasar el debate previsto, que deb¨ªa estar dedicado inicialmente a la pol¨ªtica exterior.

Existe la posibilidad de que el debate se mantenga finalmente -o se retrase hasta el 2 de octubre- y se modifique el contenido, a lo que Obama probablemente no se opondr¨ªa, aunque ayer dijo que los candidatos deben ser capaces de responder a la crisis econ¨®mica al mismo tiempo que buscan soluciones a la guerra de Irak y otros conflictos internacionales.

Sum¨¢ndose a la sensaci¨®n de emergencia creada en el pa¨ªs, el presidente Bush se dirigi¨® anoche a la naci¨®n, como una forma de poner presi¨®n sobre el Congreso para que d¨¦ el visto bueno a la inmensa fortuna requerida para tapar el agujero abierto por el desastre de los bancos y aseguradoras. Poco antes de pronunciar el discurso, Bush telefone¨® a Obama para invitarle a asistir a la reuni¨®n que hoy celebrar¨¢n en el Congreso dem¨®cratas y republicanos. El dem¨®crata acept¨® de inmediato. Minutos m¨¢s tarde, Obama y MacCain emit¨ªan un comunicado conjunto en el que se comprometen a trabajar juntos para evitar "una cat¨¢strofe".

"No podemos arriesgarnos con una cat¨¢strofe econ¨®mica. Ahora es nuestra oportunidad de unirnos y demostrar que Washington es capaz de liderar este pa¨ªs", afirman.

Bush utiliz¨® una terminolog¨ªa similar. Dijo que Estados Unidos se enfrenta a una grave crisis financiera -"nuestra econom¨ªa est¨¢ en peligro", reiter¨®-, ya que los mercados no funcionan debidamente y hay p¨¦rdida de confianza. "Otros bancos podr¨ªan caer y llevar al pa¨ªs a una recesi¨®n. No debemos dejar que eso ocurra", termin¨®.

Todo este clima de urgencia, que se corresponde, sin duda, con la gravedad de la crisis existente, ha conseguido reducir la relevancia de las ¨²ltimas encuestas, que domina Obama con ventajas de entre cuatro y nueve puntos.

Los votantes estadounidenses parec¨ªan ver hasta ahora al candidato dem¨®crata, seg¨²n esos ¨²ltimos sondeos, como mejor preparado para manejar la situaci¨®n econ¨®mica, mientras que McCain intentaba sin total ¨¦xito despegarse de su imagen de un viejo integrante de la estructura de poder en Washington.

Desde el estallido de Wall Street, McCain ha presentado numerosas propuestas contradictorias y ha acabado optando por una posici¨®n de extremo populismo, casi de ruptura con el Gobierno republicano en Washington, que, sin darle el apoyo de los ciudadanos indecisos, le ha servido para ganarse las cr¨ªticas de las voces m¨¢s solventes del establishment econ¨®mico.