El proceso de Bolonia y los estudiantes
Es una necesidad para los estudiantes espa?oles que las universidades espa?olas no se queden fuera del Espacio Europeo de Educaci¨®n Superior (EEES). Bolonia supondr¨¢ una revisi¨®n de la calidad de la ense?anza y facilitar¨¢ enormemente la circulaci¨®n de estudiantes entre universidades. Es de esperar que una ense?anza m¨¢s tutorizada conlleve una mejora en el ratio de aprobados, por lo que las nuevas titulaciones de cuatro a?os se realizaran en cuatro a?os reales (como en el resto de la UE). Adem¨¢s, el hecho de que se incluyan pr¨¢cticas en empresas supondr¨¢ una ayuda al reci¨¦n titulado en la b¨²squeda de su primer empleo, pues ya tendr¨¢ experiencia laboral.
Otro foco de quejas ha sido el programa de Master, para el que se propicia un sistema de ayudas en forma de becas-pr¨¦stamos (algo completamente nuevo). En mi opini¨®n se deber¨ªa ver como un avance. Ya no necesita el estudiante tener unos ahorros para poder acceder al master, ya que las condiciones del pr¨¦stamo son excelentes: una paga al estudiante de 800 euros mensuales, sin intereses y sin avales, y se interrumpe el pago-devoluci¨®n si no se alcanza un salario m¨ªnimo.
En conclusi¨®n, la reforma de Bolonia da m¨¢s ventajas a los estudiantes de nuestro pa¨ªs que desventajas y, por ello, deber¨ªa tener nuestro apoyo. No hay que mezclar la reforma con el modo de financiaci¨®n (la reforma no implica privatizar la Universidad), ni con las atribuciones profesionales (que es lo que fortalece los respectivos gremios frente al intrusismo), aunque estos temas son tambi¨¦n importantes.- H¨¦ctor Hugo Franco Pe?a. Ex miembro de la Asociaci¨®n de Estudiantes Intelec. Universidad de Valencia.
En un l¨²cido art¨ªculo publicado el pasado 10 de noviembre en estas p¨¢ginas, Jos¨¦ Luis Pardo reflexionaba acerca del llamado proceso de Bolonia. Resulta especialmente revelador el an¨¢lisis de la estrategia propagand¨ªstica que las autoridades utilizan para implantar el nuevo plan. El malestar en los centros p¨²blicos es evidente. Ha tomado cuerpo un movimiento de protesta que cuestiona la imposici¨®n de una reforma marcada por la opacidad informativa. Los estudiantes hemos asistido a un ejercicio de ocultaci¨®n lamentable por parte de los responsables universitarios que, para silenciar las cr¨ªticas, ha derivado en una operaci¨®n de marketing que esconde el alcance real de la reforma bajo el paraguas de la convergencia europea.
Como lector habitual de este peri¨®dico me ha decepcionado la forma de abordar el conflicto. Las protestas de estudiantes se contraponen reiteradamente con las carencias actuales de la educaci¨®n superior en Espa?a. Se infiere, pues, que la aplicaci¨®n de Bolonia es una necesidad urgente; la soluci¨®n a nuestros problemas. Una reforma con implicaciones acad¨¦micas y sociales tan profundas requiere una reflexi¨®n detenida que trascienda el ¨¢mbito universitario y no una campa?a de imagen que eluda el debate. - Artur Fontana Llorens. Valencia
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