Toda la oposici¨®n, salvo ICV, se ofrece a Trias para facilitar la gobernabilidad

Los n¨²meros est¨¢n claros: CiU cuenta con 15 concejales de un total de 41 y tiene ante s¨ª una tarea de funambulista para gobernar el Ayuntamiento de Barcelona. Xavier Trias reconoci¨® esa fragilidad, que no pas¨® por alto a nadie. Todos los grupos de la oposici¨®n, salvo los ecosocialistas, se ofrecieron con mayor o menor intensidad al nuevo alcalde para que pueda dirigir la instituci¨®n con el m¨¢ximo consenso. El presidente de ERC, Jordi Portabella,volvi¨® a sorprender igual que en 2007: si entonces reneg¨® del gobierno de Jordi Hereu del que hab¨ªa formado parte y se vot¨® a s¨ª mismo, ayer lo hizo a favor de la investidura de Trias por mor de una oposici¨®n constructiva.

"No permitiremos ese discurso tan propio de CiU de que se ve obligado a pactar con el PP", afirm¨® el l¨ªder de ERC, que comunic¨® el mi¨¦rcoles a Trias su decisi¨®n de apoyarle. Quiz¨¢ el gesto no es tan extra?o: el segundo edil, Joan Laporta, como mienbro esta vez del Grupo Mixto, ya se acerc¨® a CiU en el Parlament al votar a favor de la primera tramitaci¨®n del proyecto de presupuestos de Artur Mas. Sea como sea, ERC quiere restarle argumentos a CiU por si afirma que no tiene m¨¢s remedio que abrazarse al PP. Y de hecho esa es la impresi¨®n que existe entre los populares, porque piensan que si el Ayuntamiento de Barcelona ya era casi ingobernable en el anterior mandato (18 concejales), ahora ser¨¢ peor con 15. En su discurso, el popular Alberto Fern¨¢ndez D¨ªaz avis¨® a Trias que algunos partidos representan el cambio y otros la continuidad: "Con unos podr¨¢ conformar mayor¨ªas y con otros solo tendr¨¢ apoyos testimoniales".

Hereu se abre a ser "parte activa" de la pol¨ªtica de alianzas de su sucesor

Por ¨²ltimo, Jordi Hereu, el ex alcalde socialista, se brind¨® a hacer una oposici¨®n constructiva, aunque supedit¨® cualquier entente a una serie de requisitos. "Aqu¨ª me encontrar¨¢", desliz¨®, tras lo cual avis¨®: "Barcelona no es fruto de la casualidad: el tiempo dir¨¢ si se perfecciona o se desvirt¨²a". La lista fue larga: la lucha por infraestructuras como la estaci¨®n de La Sagrera y el corredor del Mediterr¨¢neo, y la firma de un gran pacto por la educaci¨®n o fortalecer el de la inmigraci¨®n. Hereu encendi¨® el sem¨¢foro rojo cuando subray¨® que rechaza de plano la pol¨ªtica de recortes sociales que promueve el Gobierno de Mas. Pero al final del discurso abri¨® la puerta al consenso. Con semblante serio y gesto grave, Hereu pidi¨® a todos "altura de miras" para que Barcelona salga adelante. Y fue definitivo cuando asegur¨® que estar¨¢n muy atentos a los "movimientos y las alianzas" que se produzcan: "Queremos ser parte activa y responsable".

Curiosamente, a Trias le salieron varias novias, cuando al otro lado de la plaza de Sant Jaume Artur Mas, presidente de la Generalitat, est¨¢ tan harto (con permiso del PP) de encontrar escollos para aprobar los presupuestos que hace unos d¨ªas reiter¨® que quiz¨¢s deber¨¢ adelantar las elecciones. Todos los cantos de sirena en la Casa Gran, sin embargo, est¨¢n condicionados a las pr¨®ximas elecciones generales, que se celebrar¨¢n en oto?o o a m¨¢s tardar en primavera. A CiU no le interesa acercarse demasiado al discurso agresivo del PP ante una eventual factura en las urnas y el PSC y ERC quieren tener una coartada para esgrimir si se da el caso de que Trias prefiera el PP a ellos. Al menos, el alcalde fue sincero cuando ley¨® la relaci¨®n de candidatos a los que tiende la mano: lo hizo de mayor a menor representaci¨®n, aunque coloc¨® a ICV-EUiA en el ¨²ltimo lugar pese a que tiene m¨¢s representaci¨®n (cinco ediles) que ERC (dos). Las relaciones entre los dos partidos est¨¢n rotas y el ecosocialista Ricard Gom¨¤ dijo que no har¨¢n la menor concesi¨®n ante los recortes. Parad¨®jicamente, Trias y Gom¨¤ coincidieron en algo: fueron los ¨²nicos que dedicaron bastantes minutos a hablar del 15-M.