Una revoluci¨®n tras la lente
El Photomusuem recoge en una exposici¨®n la trayectoria de Raoul Haussmann - El artista est¨¢ considerado el padre del fotomontaje
Raoul Hausmann (Viena, 1186-Limoges, Francia, 1971) revolucion¨® el mundo de la fotograf¨ªa. En su haber figura ser el creador del fotomontaje all¨¢ por los a?os 40 y creador de instant¨¢neas con una composici¨®n (planos picados, detalles de rostros) rompedoras para la ¨¦poca. Cerca de 60 fotograf¨ªas recorren la trayectoria del artista entre 1927 y 1957, adscrito al c¨ªrculo dada¨ªsta de Berl¨ªn, y expuestas en el Photomuseum de Zarautz hasta el 11 de septiembre.
"Su forma de entender la fotograf¨ªa y de practicarla era completamente diferente de lo que se hac¨ªa hasta la fecha", explica Ram¨®n Serras, cofundador del centro. El dada¨ªsmo y la casualidad han llevado a Hausmann a figurar como padre del fotomontaje. De la corriente art¨ªstica adopt¨® la m¨¢xima de recurrir a diversos elementos o fragmentos de obras para crear otras, como muestra la instant¨¢nea L'acteur (Limoges, 1946), donde el rostro de un hombre se compone con pedazos de otros, a modo de collage. Y el destino quiso que "Hausmann viera en un bar una especie de montaje que los propietarios hab¨ªan hecho a ra¨ªz de la superposici¨®n de varias fotograf¨ªas, que su hijo, en la guerra, les hab¨ªa mandado", recuerda el cofundador del Photomuseum. "Ah¨ª pens¨® que ¨¦l tambi¨¦n pod¨ªa hacerlo y los procesos creativos que se pod¨ªan abrir", contin¨²a.
La muestra re¨²ne alrededor de 60 trabajos datados entre 1927 y 1957
El creador recurre al 'collage' y a la superposici¨®n de negativos
Hausmann puso en pr¨¢ctica varios mecanismos para la creaci¨®n de fotomontajes. En algunas obras el artista rompe y recorta una serie de fotograf¨ªas para una vez dispuestos los pedazos volverlos a capturar con su c¨¢mara y una pel¨ªcula de 35 mil¨ªmetros. Tambi¨¦n superpone en el proceso de ampliaci¨®n varios negativos, consiguiendo im¨¢genes en las que se confunden y mezclan paisajes como en R¨ºve de la plage (Limoges, 1947).
Hausmann consigui¨® a trav¨¦s de sus retratos y de la captura de peque?os detalles del rostro de los fotografiados expresar sentimientos, emociones o estados de ¨¢nimo. "Consigue expresar m¨¢s as¨ª, con una mirada, cortando el plano por la frente y la barbilla, que si hubiera sacado la cabeza entera", aclara Serras, frente al retrato de una mujer que parece tomar el sol, datado en 1931. Otro ejemplo es la serie de cuatro instant¨¢neas que muestran las manos de una mujer realizando diversas actividades, como escribir, fregar o coser. O los juegos de sombras proyectadas sobre aceras, instant¨¢neas de pies femeninos o de elementos de la naturaleza.
La muestra se completa con varios de los art¨ªculos que Hausmann public¨® en revistas especializadas en la disciplina art¨ªstica y dirigidas a aficionados como la austr¨ªaca Camera, en los que explicaba su visi¨®n sobre la fotograf¨ªa. Porque el artista concibi¨® su arte -"siempre catalog¨® la disciplina como tal", a?ade Serras-, como un juego mental, una forma de activar al espectador.
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