Mas congela el pacto fiscal para facilitar el entendimiento con el PP

Converg¨¨ncia i Uni¨® (CiU) ha decidido que no quiere llegar a las elecciones del pr¨®ximo 20 de noviembre con la propuesta del pacto fiscal como ¨²nico reclamo. Los nacionalistas entienden que las perspectivas de una mayor¨ªa absoluta del Partido Popular restan posibilidades de ¨¦xito a su demanda y, adem¨¢s, son conscientes de que el partido de Mariano Rajoy condiciona y condicionar¨¢ casi todas las iniciativas del Gobierno catal¨¢n en el Parlament. Finalmente, ante las insistentes demandas del PSC, pero sobre todo del PP, el Gobierno de Mas ha decidido guardar en un caj¨®n "durante unas semanas o unos meses" la concreci¨®n del modelo de pacto fiscal. Eso se traduce en que el Parlament no celebrar¨¢ el pleno en el que se ten¨ªan que votar las propuestas que salgan de la comisi¨®n de estudio del nuevo pacto fiscal.

ERC advierte de la "rebaja" de planteamientos de Converg¨¨ncia i Uni¨®

El portavoz del Gobierno catal¨¢n, Francesc Homs, justific¨® ayer este cambio de planes con el argumento de que el Ejecutivo aut¨®nomo "busca sumar" cuantas m¨¢s formaciones pol¨ªticas mejor a su demanda del concierto econ¨®mico y que es mejor esperar a despu¨¦s de las elecciones generales para intentar forjar acuerdos en aguas m¨¢s tranquilas.

Contrasta esta actitud con el no rotundo que se le dio al PSC cuando este partido propuso retrasar el debate de la comisi¨®n parlamentaria hasta despu¨¦s de las generales. Ahora el que lo est¨¢ pidiendo con m¨¢s insistencia es el Partido Popular, que est¨¢ ¨¢vido de llegar a acuerdos con CiU en cuestiones econ¨®micas y presupuestarias, pero no quiere depender de las negociaciones sobre el concierto fiscal. El Gobierno de Converg¨¨ncia i Uni¨® estudiar¨¢ precisamente estos d¨ªas con el Partido Popular las grandes l¨ªneas de los presupuestos para intentar un acuerdo despu¨¦s de las elecciones generales.

La decisi¨®n del Gobierno, tomada ayer, satisface a todos los grandes partidos. A CiU le viene bien porque no tendr¨¢ que ir a las elecciones con una idea cerrada de pacto fiscal y podr¨¢ seguir jugando as¨ª a la ambig¨¹edad calculada. A los socialistas tambi¨¦n les favorece porque les evita tener que retratarse a favor o en contra de una cuesti¨®n que genera discrepancias en el seno de la propia formaci¨®n. Algo parecido le permite al PP, que podr¨¢ seguir publicitando que Mariano Rajoy se ha comprometido a "hablar" sobre el pacto fiscal despu¨¦s de las elecciones. La que no comparte la tesis de CiU es Esquerra Republicana, que aspira a acercarse al Gobierno catal¨¢n mediante el pacto fiscal. Ayer Joan Puigcerc¨®s, exl¨ªder de ERC, alert¨® de la "rebaja" de planteamientos que est¨¢ haciendo CiU.

Los nacionalistas, sin embargo, insistir¨¢n en el concierto econ¨®mico como reclamo electoral y se valen de cuanto est¨¢ a su alcance para publicitarlo. Ayer mismo el Gobierno catal¨¢n exhibi¨® un informe del Instituto de Estudios Auton¨®micos, dirigido por Carles Viver Pi-Sunyer, que avala las grandes l¨ªneas de la propuesta del presidente Artur Mas, aunque con matices importantes.

Los expertos entienden que el concierto no contradice ni el Estatuto catal¨¢n ni la Constituci¨®n, y que podr¨ªa lograrse con una modificaci¨®n de la Ley Org¨¢nica de Financiaci¨®n de las Comunidades Aut¨®nomas. Se tratar¨ªa de que esta ley proclamara que Catalu?a es una "excepci¨®n" dentro del sistema de fiscalidad com¨²n. En cambio, el informe s¨ª alerta de que, en caso de conseguir el concierto, ninguna f¨®rmula podr¨ªa blindarlo de forma permanente, ya que sus caracter¨ªsticas no est¨¢n previstas "ni en el Estatuto ni en la Constituci¨®n".