Queremos casarnos
El 22 de octubre de 2003, tres parejas de activistas gais espa?oles -Boti Garc¨ªa y Beatriz Gimeno, Pedro Zerolo y Jes¨²s Santos, y Antonio Poveda y Miguel ?ngel Fern¨¢ndez- se plantaron en los Registros Civiles de Madrid y de Valencia y dijeron: "Queremos casarnos". (...) La respuesta de los magistrados tard¨® dos semanas. No, no y no. Los novios vetados interpusieron recurso. La v¨ªa jurisdiccional por el derecho al matrimonio civil homosexual en Espa?a est¨¢ abierta. La mecha ha empezado a arder. (...) Todos los partidos, de derecha y de izquierda, han ignorado el asunto en la campa?a electoral. Pero la mecha avanza.
"?Y si nos separamos? ?Y si caigo enfermo? ?Y si me muero? ?Y si se muere?". A pocas parejas se les pasan por la cabeza estas preguntas en el momento de emprender una vida juntos. Pero hay enamorados que han de ser cenizos de oficio. Si una pareja de gais o de lesbianas, por muy inscrita en el Registro de Parejas de Hecho que est¨¦, se separa, o enferma, o fallece uno de sus miembros, lo que sigue puede ser un infierno burocr¨¢tico a?adido al infierno del desamor, la desgracia o la soledad. Porque para la ley no son nada el uno del otro. Esa pareja no existe. Aunque haya cumplido las bodas de plata.
Es ahora o nunca. La hora de conquistar derechos que cualquier heterosexual da por supuestos. Quieren boda
Jos¨¦ Mar¨ªa Ba?¨®n, funcionario, de 47 a?os, lleva un anillo con un nombre y una fecha por dentro: "Antonio, 28 de febrero de 1979". Hace 25 a?os que Jos¨¦ Mar¨ªa y Antonio Pacheco, camarero, fundaron su propia familia. Sin se?ora, sin ni?os, sin papeles. En realidad, Antonio y Jos¨¦ Mar¨ªa s¨ª tienen un papel. El 28 de febrero de 2000, lunes, se pusieron un esmoquin y fueron a inscribirse en el Registro de Parejas de Hecho de la Comunidad de Madrid. La ¨²nica forma de legalizar su uni¨®n que ofrece hoy la Administraci¨®n, a trav¨¦s de las comunidades aut¨®nomas, a las parejas gais. (...) El bloqueo a una ley nacional ha sido total. La mayor¨ªa absoluta del PP en el Congreso tumb¨® cinco proposiciones de ley presentadas por partidos de izquierdas para modificar el C¨®digo Civil y equiparar los derechos de las parejas homosexuales con los de las heterosexuales. Hartos de esa par¨¢lisis, un pu?ado de personas (...) han pasado a la acci¨®n. (...) Las leyes de parejas de hecho ya no les bastan. Es la hora de conquistar derechos que cualquier heterosexual da por supuestos. Quieren boda.
No hablan de una ceremonia con trajes de gala, anillos y arroz. O no solo de eso. "?No hay heterosexuales agn¨®sticos que esperan dos a?os para casarse en los Jer¨®nimos?", dice Marce Rodr¨ªguez, periodista, de 39 a?os. Pero Rodr¨ªguez y su novio, Pablo Peinado, tambi¨¦n periodista, de 42, dan aqu¨ª la cara por otra cosa. "Si no nos eximen de nuestros deberes por ser homosexuales, ?por qu¨¦ nos vetan derechos?". Rodr¨ªguez y Peinado no quieren casarse. Quieren tener la opci¨®n de hacerlo. "El matrimonio no es ni m¨¢s ni menos que un contrato jur¨ªdico entre dos personas unidas por el amor", dice Pedro Zerolo, concejal socialista de Madrid y uno de los solicitantes formales de matrimonio. "Exigimos la posibilidad de firmar ese contrato, no el sacramento que administra la Iglesia, y que parece ser el ¨²nico concepto de matrimonio que tiene la derecha". Quieren derechos, no bendiciones.
"Estamos hablando del derecho a tener o adoptar hijos en com¨²n, a cobrar pensi¨®n de viudedad, a heredar de nuestra pareja, a disfrutar de los beneficios sociales y fiscales de la familia, a garantizar nuestros bienes en caso de separaci¨®n. Hablamos de cosas como poder ver a tu pareja si est¨¢ en la UVI. Porque todo eso no lo podemos hacer por ser homosexuales", dice Desir¨¦e Chac¨®n, abogada y miembro del Colectivo de Gays y Lesbianas de Madrid. Chac¨®n considera las leyes de parejas "injustas y discriminatorias" con los homosexuales. "?Qu¨¦ pasa si una pareja de hecho heterosexual se separa? Que se le aplica el C¨®digo Civil. (...) ?Qu¨¦ ocurre si una pareja de hecho homosexual se separa? Si no han hecho (y pagado) un acuerdo notarial, no son nada ante la ley. Si no hay acuerdo, el titular de los bienes se queda con ellos, y si hay hijos, el padre o madre biol¨®gicos, o el titular de la adopci¨®n, se queda con la custodia, y el otro miembro de la pareja no tiene ning¨²n derecho sobre el hijo que ha criado".
Mientras, (...) los cientos de miles de parejas de gais y lesbianas constituidas en Espa?a existen. Se enamoran, conviven, cr¨ªan hijos en com¨²n, se separan. Trabajan, compran, viajan, se quedan en el paro. Enferman, se jubilan, mueren. Los hay que viven al d¨ªa, sorteando las dificultades seg¨²n se presentan, y los que se curan en salud con las medicinas que les vende el sistema. "No es saltarse la ley, sino transitar por sus carreteras secundarias hasta que nos dejen ir por la autopista del resto de la gente", resume un abogado especializado en "resolver la papeleta" a sus clientes gais. (...) Su bufete redacta cada d¨ªa documentos, poderes y acuerdos privados entre miembros de parejas del mismo sexo para las cosas m¨¢s dispares. "Desde poder ir a buscar al colegio al hijo de tu compa?ero, a tener un vis a vis con tu novio en la c¨¢rcel".
Seg¨²n Gerardo Meil, soci¨®logo de la Universidad Aut¨®noma de Madrid, "un tercio de los hombres y mujeres homosexuales espa?oles vive en pareja". Gais y lesbianas forman familias. Eso no es nuevo. Pero hoy quieren hacerlo con todas las de la ley. (...) Esta especie de tercera fase del movimiento gay -primero grit¨¢bamos libertad, despu¨¦s visibilidad, ahora exigimos igualdad de derechos", dice Zerolo-, la del asalto a las instituciones heterosexuales milenarias (matrimonio, descendencia), no ha dejado indiferente a nadie. (...) Y no solo a los que cabr¨ªa esperar. Es el PP el que ha bloqueado y recurrido las leyes de parejas de hecho m¨¢s abiertas, como la de Navarra. Tampoco hubo sorpresas con la Conferencia Episcopal, que deplora los modelos familiares no compuestos como Dios manda. M¨¢s inquietud caus¨® en los interesados la "tibia" reacci¨®n de Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, l¨ªder del PSOE, en v¨ªsperas de la campa?a electoral.
El l¨ªder socialista apel¨® a la "necesidad de un amplio consenso social" para regularizar la adopci¨®n por parejas del mismo sexo. La frase cay¨® como un jarro de agua fr¨ªa sobre Pedro Zerolo. "No es momento para las medias tintas. Quien est¨¦ contra la igualdad de derechos de los homosexuales es hom¨®fobo, y no se puede ser hom¨®fobo y socialista. El consenso social existe, nos lo hemos ganado a pulso los colectivos en 25 a?os. Pero aunque no existiera, hay cosas en las que la izquierda debe creer de oficio. La libertad y la dignidad son dos de ellas". (...)
La mecha sigue ardiendo. Es cuesti¨®n de tiempo que los recursos de las tres parejas lleguen al Constitucional. Alguien tendr¨¢ que dictaminar si el deseo de los Zerolo-Santos, las Garc¨ªa-Jimeno y los Poveda-Fern¨¢ndez cabe en los m¨¢rgenes de la ley.
Pioneros mundiales
Marido y marido. Emilio Men¨¦ndez y Carlos Baturit fueron los primeros espa?oles del mismo sexo en contraer matrimonio, el 11 de julio de 2005.
Espa?a, cuarta. Hasta ese momento, solo B¨¦lgica, Holanda y Canad¨¢ contemplaban el matrimonio homosexual con todos los derechos. Hoy tambi¨¦n lo hacen Sud¨¢frica, Noruega, Suecia, Islandia, Portugal, Argentina y algunos territorios de Estados Unidos.
M¨¢s novios que novias. M¨¢s de 23.000 parejas del mismo sexo se han casado desde 2005 en Espa?a, la mayor¨ªa compuestas por dos varones.
?En el aire? Mariano Rajoy, candidato del PP, no va a retirar el recurso que mantiene sobre la ley. "Esperar¨¦ la decisi¨®n del Constitucional", ha declarado en la campa?a electoral. Marce Rodr¨ªguez, uno de los personajes que apareci¨® en el reportaje Queremos casarnos, responde: "A m¨ª no me ilegaliza nadie. Luch¨¦ por dejar de ser un ciudadano de segunda, y nadie va a conseguir que deje de ser un ciudadano de primera".
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