Benkiran, de islamista radical a primer ministro marroqu¨ª

?Ser¨¢ una casualidad o querr¨¢ transmitirle un mensaje? El rey Mohamed VI de Marruecos ha convocado hoy a Abdelil¨¢ Benkiran, de 57 a?os, l¨ªder del Partido de la Justicia y el Desarrollo (PJD, islamista moderado) que gan¨® las elecciones legislativas, en Midelt, una localidad del Atlas.

El monarca alau¨ª dar¨¢ en Midelt el pistoletazo de salida a una campa?a de solidaridad, pero la ciudad trae malos recuerdos a la formaci¨®n islamista. Mohamed Hanini, su alcalde del PJD, fue grabado en agosto cobrando un soborno y est¨¢ en la c¨¢rcel. El partido tambi¨¦n le expuls¨®.

No est¨¢ claro si el soberano solo dar¨¢ la enhorabuena a Benkiran, cuyo partido obtuvo el 27% de los esca?os, o si le designar¨¢ ya primer ministro. El propio Benkiran dio a entender el domingo por la noche que deb¨ªa ser ¨¦l el elegido: "Si el rey opta por otro y no por el secretario general, los responsables de nuestro partido se reunir¨¢n y decidir¨¢n qu¨¦ postura tomar".

Milit¨® en un grupo terrorista, pero no se le imputa ning¨²n acto violento

Al pronunciar esas palabras la expresi¨®n de su cara era severa, pero Benkiran es m¨¢s bien un hombre jovial, extrovertido, cordial, jactancioso, bromista y comunicativo. "Si no fuera islamista dir¨ªa que es un bon vivant", comentaba un diputado con el que tuvo bastante trato en el anterior Parlamento.

El hombre que aspira a ser nombrado jefe del Gobierno milit¨® en los a?os ochenta en una organizaci¨®n terrorista, la Juventud Isl¨¢mica, aunque a ¨¦l no se le imputa ning¨²n acto violento. Pero sus compa?eros de armas asesinaron en 1975 en Casablanca al dirigente socialista Omar Benjelun. Es probable que actuaran con la anuencia del poder, que les utiliz¨® para amedrantar a la izquierda.

Benkiran vivi¨® la pol¨ªtica desde peque?o. Su familia, del barrio rebat¨ª de Akkari, simpatizaba con el Istiqlal, el partido que condujo a Marruecos a la independencia. ?l logr¨® compaginar la militancia islamista con los estudios de ingenier¨ªa en la Escuela de Mohamedia, la m¨¢s prestigiosa del pa¨ªs.

En 1982 rompi¨® con la Juventud Isl¨¢mica, cuyos exmilitantes abundan en las filas del PJD. Deambul¨® por su sinf¨ªn de asociaciones islamistas y se afili¨® incluso brevemente al Istiqlal. Con el tiempo acab¨®, a finales de la d¨¦cada de los noventa, en un partido creado por Abdelkrim el Jatib, un islamista af¨ªn al palacio real, para acoger a antiguos radicales y que en 1998 se convirti¨® en el PJD.

Diputado por Sal¨¦ desde hace 15 a?os, Benkiran accedi¨® a la secretar¨ªa general en 2008, tras derrotar en un congreso democr¨¢tico a su predecesor. Desde entonces es el ¨²nico dirigente islamista que no lleva nunca corbata. El que fue un antiizquierdista visceral ha cambiado de parecer. El domingo sostuvo que no tiene "divergencias fundamentales con la izquierda" socialista y excomunista con la que proyecta gobernar. Su evoluci¨®n es similar a la de otro c¨¦lebre islamista, el tunecino Rachid Ghanuchi, que se dispone a gobernar con la izquierda.

Tambi¨¦n ha edulcorado su puritanismo, que le llev¨® a agredir verbalmente en el hemiciclo a una periodista cuya camiseta no cubr¨ªa sus brazos. "Si gobierno no va a ser para decidir la longitud de las faldas de las chicas", dijo para apaciguar los temores que suscita. "El PJD no va a inmiscuirse en lo que hacen los bebedores de alcohol", recalc¨®.

Para quienes han escuchado tantas conferencias de prensa mortecinas de pol¨ªticos marroqu¨ªes, lo m¨¢s sabroso del domingo fueron sus embestidas contra el entorno del monarca. "Seamos claros, es imposible gobernar Marruecos contra el rey, pero nosotros estamos en contra de los lobbies y de los consejeros [reales]", afirm¨®.

"Cualquiera os dir¨¢ que es consejero del rey cuando no es consejero ni nada de nada", prosigui¨® aludiendo a todos aquellos que gravitan en torno al monarca e interfieren con la labor del Ejecutivo. "Esa ¨¦poca debe acabarse". "Hago un llamamiento a los futuros ministros de que no tengan miedo" de los famosos consejeros. "El rey les nombra para trabajar".

En su primera comparecencia tras la victoria, Benkiran tendi¨® la mano al gran movimiento islamista ilegal Justicia y Espiritualidad, que preconiz¨® el boicoteo de las elecciones, y al movimiento juvenil del 20 de Febrero, al que pertenece su hijo, que desde hace 10 meses convoca manifestaciones para reivindicar la democratizaci¨®n.