Radiograf¨ªa de los funcionarios en Espa?a

A casi nadie se le ha ca¨ªdo una l¨¢grima por el tijeretazo a los funcionarios aprobado por el Gobierno en un pa¨ªs en el que todav¨ªa perdura la dura cr¨ªtica que Larra les hizo ?hace 177 a?os! Los dem¨¢s trabajadores, acuciados por los ajustes, la temporalidad y un paro que golpea a m¨¢s de cuatro millones y medio de personas, envidian su estabilidad laboral, sus vacaciones de sult¨¢n y sus desayunos eternos. Tambi¨¦n est¨¢ generalizada la idea de que es un cuerpo vago y sobredimensionado. Pero, ?est¨¢n justificadas esas cr¨ªticas?

Casi el 40% de los empleados p¨²blicos no tiene plaza en propiedad, la mayor¨ªa disfruta de los mismos 22 d¨ªas laborables que cualquiera y los sueldos -de entre 1.200 y 3.000 euros al mes- tampoco son como para volverse locos. En cuanto a que sobran funcionarios, la pregunta m¨¢s bien ser¨ªa de d¨®nde, ya que 43 de cada 100 son profesores y sanitarios en un pa¨ªs en el que ambos servicios son universales y gratuitos. Adem¨¢s, en el ranking europeo por volumen de funcionarios Espa?a no est¨¢ en la cabeza, sino a la mitad de la tabla. "No somos privilegiados ni del siglo XIX, somos m¨¦dicos, enfermeros, bomberos, polic¨ªas, profesores y personas que te realizan los tr¨¢mites que necesitas. No estamos dispuestos a pedir perd¨®n por trabajar al servicio del Estado, un puesto que nos hemos ganado tras un proceso de selecci¨®n libre, transparente y abierto a todo el mundo", se defiende Miguel Borra, secretario nacional de Formaci¨®n del sindicato de funcionarios CSI-CSIF. Est¨¢n a punto de ponerse en huelga contra el recorte de sus sueldos para que, junto a otras medidas, Espa?a logre poner coto a su d¨¦ficit, pero ?qui¨¦nes son?

?Cu¨¢ntos son?

En Espa?a hay m¨¢s de 2,5 millones de trabajadores al servicio de la Administraci¨®n (2.659.010 personas, seg¨²n el ¨²ltimo bolet¨ªn estad¨ªstico de julio de 2009). ?Eso es mucho, poco o regular? Teniendo en cuenta una poblaci¨®n de m¨¢s de 46 millones, cada funcionario toca a 17 habitantes a los que atender. Sin embargo, la verdadera dimensi¨®n de su fuerza laboral se mide, m¨¢s que por la ratio por habitante, al compararlos con la poblaci¨®n activa ocupada -18.394.200 personas seg¨²n la EPA del primer trimestre de 2010-. El resultado es que uno de cada siete trabajadores con empleo en Espa?a est¨¢ en n¨®mina de alguna de las tres Administraciones p¨²blicas (estatal, auton¨®mica o local), el 14,46%. Otro dato revelador que retrata a la econom¨ªa espa?ola es que hay casi tantos funcionarios como empresarios y aut¨®nomos -3.130.800, seg¨²n la EPA, el 17,02%-.

Del total, solo un 21,9% (583.447) trabaja para la Administraci¨®n p¨²blica estatal (ministerios, Agencia Tributaria, prisiones, justicia, Fuerzas Armadas, Polic¨ªa Nacional, Guardia Civil o entidades p¨²blicas empresariales...), mientras que el grueso de la mano de obra p¨²blica, el 50,6% (1.345.557), cobra de las comunidades aut¨®nomas. En la Administraci¨®n local (ayuntamientos, diputaciones y cabildos) se encuentra el 23,6% de los trabajadores p¨²blicos (627.092) y completan el cuadro las universidades, que dan trabajo al 3,9% de los funcionarios (102.894).

La mayor parte del funcionariado, el 20,7%, trabaja en un ayuntamiento, el cl¨¢sico oficinista que cobra tributos y tramita documentos, pero el grueso del cuerpo lo conforman profesores y sanitarios. Juntos suman 43 de cada 100 (el 20,3% se dedica a la docencia no universitaria y el 18,5%, al Sistema Nacional de Salud). Los menos son los que emplea Patrimonio Nacional (0,6%, 1.435 trabajadores), seguidos de las fuerzas de seguridad auton¨®micas (0,9%, 23.826). La administraci¨®n de justicia, sumando la estatal (0,9%) y la auton¨®mica (1,4%), supone solo el 2,3%.

?Y en Europa?

La leyenda negra dice que Espa?a es un pa¨ªs de funcionarios pero ?m¨¢s que Francia, menos que Alemania, igual que Estonia, el doble que Finlandia? La Presidencia francesa de la Uni¨®n Europea realiz¨® en 2008 la comparativa m¨¢s actual que existe sobre los cuerpos de funcionarios en un informe titulado Administration and the Civil Service in the EU 27 Member States. Analiza datos de 25 pa¨ªses del continente europeo entre los que no est¨¢ Espa?a. Tomando los mismos datos de Espa?a en 2008, cuando hab¨ªa casi 100.000 empleados p¨²blicos menos -2.582.846-, ?en qu¨¦ lugar del ranking quedamos? En la zona media, exactamente en el puesto 16, al mismo nivel que Italia y Alemania. Italia ten¨ªa hace dos a?os 3.400.000 empleados p¨²blicos, el 5,7% de la poblaci¨®n, uno por cada 17 habitantes, una cifra muy similar a la espa?ola -5,5%, uno por cada 18- y a la alemana -donde hab¨ªa 4.500.000 funcionarios para m¨¢s de 82 millones de personas, lo que se traduce en un 5,4%, 18 habitantes por cada empleado p¨²blico-.

El pa¨ªs que lidera la lista es Suecia, donde trabajan para la administraci¨®n 1.125.000 personas, suponen el 12,3% de la poblaci¨®n y tocan apenas a ocho habitantes por funcionario. Le siguen Finlandia, Letonia y Malta, con nueve por cabeza. B¨¦lgica y Francia ocupan los puestos s¨¦ptimo y octavo, ambos con 12 funcionarios por habitante. Irlanda, Portugal y Pa¨ªses Bajos tambi¨¦n ganan a Espa?a, los dos primeros con 13 habitantes por cada empleado p¨²blico y el ¨²ltimo, con 16. Con menos funcionarios que Espa?a hay 11 pa¨ªses, incluidos Luxemburgo -en el puesto 17, con 21 vecinos por trabajador p¨²blico-, Reino Unido -en el 19, con 29 por cabeza- y Grecia -el 20? de la clasificaci¨®n, con un habitante m¨¢s por funcionario que Reino Unido-. Los tres pa¨ªses de cola son Rep¨²blica Checa, donde un funcionario atiende a m¨¢s de un centenar de habitantes, Rumania, con 127, y Eslovaquia, con hasta 135. La mediana de funcionarios por pa¨ªs est¨¢ en 5,9%.

?Trabajo de por vida?

Seg¨²n el Estatuto B¨¢sico del Empleado P¨²blico de 2007, los empleados p¨²blicos pueden ser funcionarios de carrera, interinos, personal laboral y personal eventual o de confianza. Solo los de carrera (oposici¨®n) son los que com¨²nmente se entiende por funcionarios. En virtud de un "nombramiento legal", est¨¢n vinculados a una Administraci¨®n por una "relaci¨®n estatutaria regulada por el derecho administrativo" en lugar del laboral como el resto de los mortales y disfrutan por tanto de plaza en propiedad, fija, vitalicia y sin posibilidad de despido -cuidado, en Italia se pone en la calle desde 2009 a los que tengan m¨¢s de tres faltas sin justificar-. Son 1.596.916.

En la categor¨ªa de personal laboral militan 686.951 personas que, en cambio, tienen contratos ordinarios de trabajo (ya sean fijos, indefinidos o temporales) regidos por el Estatuto de los Trabajadores y por convenios colectivos. A¨²n queda una tercera categor¨ªa que, bajo el paraguas de otro personal, engloba al personal eventual - "realizan funciones expresamente calificadas como de confianza o asesoramiento especial en virtud de nombramiento y con car¨¢cter no permanente"- y a los funcionarios interinos - aunque son funcionarios y se rigen tambi¨¦n por el derecho administrativo, no tienen plaza a perpetuidad, sino que son nombrados "por razones expresamente justificadas de necesidad y urgencia"-, entre otros. Esta situaci¨®n la sufren 375.143 personas. A ninguno de estos dos grupos se le aplica el principio de "inamovilidad de la condici¨®n de funcionario", es decir, que los pueden echar como a todo hijo de vecino, al tiempo que deben cumplir normas como la incompatibilidad y el r¨¦gimen disciplinario propias del funcionariado.

Conclusi¨®n: el 39,9% de los servidores p¨²blicos no tiene trabajo de por vida, al tiempo que crece la temporalidad a marchas forzadas. Seg¨²n UGT, asciende al 8% en la Administraci¨®n General del Estado, un porcentaje mucho mayor en las autonom¨ªas y que llega al 20% en los ayuntamientos. Ya hay entidades locales, como Jerez de la Frontera, que ha puesto en marcha un expediente de regulaci¨®n de empleo para 550 trabajadores de su personal laboral, el "primer ERE en la Administraci¨®n" seg¨²n UGT. El Registro Central de Personal, que en este caso ¨²nicamente aporta cifras de los empleados ministeriales, constata que de sus 223.995 trabajadores, 152.150 son funcionarios de carrera, 66.635 personal laboral -con 56.950 fijos, 8.059 temporales y 1.626 fijos discontinuos- y 5.210 otro personal -632 eventuales y 4.401 interinos-. CSI-CSIC apunta a que la mayor parte de los contratados y de los interinos est¨¢n en la docencia y en la sanidad, en cambio, esta modalidad de empleo p¨²blico "no existe en la Polic¨ªa Nacional, por ejemplo".

?Cu¨¢les son sus condiciones laborales?

Los funcionarios tienen 22 d¨ªas h¨¢biles de vacaciones, como la gran mayor¨ªa de los trabajadores por cuenta ajena, a los que se suman d¨ªas extra por antig¨¹edad y otras particularidades por autonom¨ªas, por lo que pueden llegar a los 26. Los m¨¢s criticados son los docentes, de los que siempre se dice que disfrutan dos meses de vacaciones, a lo que CSI-CSIF responde que "el mismo calendario escolar de la escuela p¨²blica rige para la privada y concertada" -por no hablar de que no son dos meses reales, los ex¨¢menes finales y de recuperaci¨®n no se corrigen solos-. Adem¨¢s, los profesores no disponen de "d¨ªas de asuntos particulares" como el resto de sus compa?eros y la gran mayor¨ªa de los asalariados.

Su jornada laboral, que de nuevo depende de las distintas administraciones, va seg¨²n UGT desde las 40 horas de los grupos altos a las 35 de la Seguridad Social con una media de 38 horas, por debajo de Austria (40) pero por encima de Finlandia y Holanda (36 horas), Francia y Portugal (35 horas) e Italia, cuyos empleados p¨²blicos son los que menos horas trabajan en Europa, con una jornada de 32,9 horas a la semana.

En 2006 se aprob¨® el Plan Concilia para la Administraci¨®n central, impulsado por el ministro de Administraciones P¨²blicas, Jordi Sevilla, que establece que la parte flexible de la jornada se ampl¨ªa a un tercio y que sit¨²a la hora l¨ªmite de salida en las seis de la tarde. Los padres tienen 10 d¨ªas por el nacimiento de un hijo y las madres disponen de una ampliaci¨®n en cuatro semanas m¨¢s del permiso de lactancia.

Sobre el sambenito del absentismo laboral tampoco hay datos oficiales, pero CSF-CSIF sostiene que "es similar al de las grandes empresas, no es lo mismo el hospital Miguel Servet que un taller de pintura con cinco empleados". En todo caso, muchas administraciones han instalado "sistemas de fichar dactilares o relojes", hay un "sistema disciplinario que establece faltas leves, graves y sanciones" y muchos trabajos "con relevo, como los bomberos, sanitarios, polic¨ªas y docentes, en los que el mejor control es el compa?ero, porque jam¨¢s se abandona un puesto hasta que no llega el siguiente".

"La gente tiene que saber que el se?or que est¨¢ en la ventanilla ni organiza el trabajo, ni decide los medios humanos y materiales con los que cuenta, ni tiene la culpa de que los tr¨¢mites sean complejos, lentos y largos", se defiende Miguel Borra.

?Cu¨¢nto ganan?

Calcular cu¨¢nto ganan de media es casi tan complicado como realizar los 12 trabajos de H¨¦rcules. Para empezar solo hay datos de los funcionarios, cuyo salarios est¨¢ regulado por ley, pero no del personal laboral ni de otro personal. Ni siquiera los sindicatos se arriesgan -"nadie se ha atrevido a sacar medias, es un infierno", reconocen- y las fuentes oficiales remiten al BOE, donde figuran seis grupos salariales seg¨²n la titulaci¨®n -de un sueldo base de 1.161 euros el m¨¢s alto a 548 el m¨¢s bajo-, a los que se a?ade un complemento de destino para el que hay hasta 30 niveles y otros complementos. As¨ª, seg¨²n explica el gabinete t¨¦cnico de UGT, para calcular las n¨®minas de los empleados p¨²blicos hay que sumar a las retribuciones b¨¢sicas (sueldo base, m¨¢s trienios y pagas extra) las complementarias (complemento de destino, de productividad, espec¨ªfico de puesto, entre otros, como la nocturnidad para funcionarios de prisiones y sanitarios). Adem¨¢s, "cada comunidad es aut¨®noma en el pago de sus complementos", explica CSI-CSIF, por lo que, por ejemplo, un profesor de Secundaria gana m¨¢s en el Pa¨ªs Vasco que en Andaluc¨ªa.

Seg¨²n estimaciones de este peri¨®dico, la inmensa mayor¨ªa de los funcionarios tiene un salario mensual de entre 1.200 y 3.000 euros. Apenas hay empleados submileuristas en la funci¨®n p¨²blica, seg¨²n el Gobierno. UGT matiza que al menos es as¨ª en la Administraci¨®n General del Estado, donde se alcanz¨® el compromiso de que las categor¨ªas m¨¢s bajas no percibieran menos de mil euros brutos al mes. Por ejemplo, en Arag¨®n el funcionario que m¨¢s cobra tiene una n¨®mina de 53.589 euros al a?o -al sumar los complementos a un sueldo base anual de 13.935,6 euros-, frente a los 15.923 euros -de una base anual de 6.581- que se lleva a casa, probablemente de sus padres, el que menos.

?D¨®nde trabajan?

La mitad, en las comunidades aut¨®nomas. El Estado les ha transferido 1.943 competencias y 821.001 funcionarios desde 1978, seg¨²n la Estad¨ªstica de Traspasos del Ministerio de Pol¨ªtica Territorial. Catalu?a se sit¨²a a la cabeza con 185 competencias asumidas seguida de Galicia, con 154; Andaluc¨ªa, 152; Comunidad Valenciana, 131 y Canarias con 120. Por el contrario, las autonom¨ªas con menos transferencias son Navarra (69) y La Rioja (75), adem¨¢s de Ceuta (21) y Melilla (24).

Sin embargo, este nivel de competencias no siempre se traduce en n¨²mero de funcionarios. En cifras totales, la distribuci¨®n de los funcionarios por regiones es casi un calco de su peso demogr¨¢fico. Andaluc¨ªa, con 8.302.923 habitantes (a 1 de enero de 2009, seg¨²n el INE), concentra a casi medio mill¨®n de funcionarios, seguida de Madrid, aunque por poblaci¨®n ocupa el tercer lugar tras Catalu?a. Madrid tiene casi tantos empleados p¨²blicos como Andaluc¨ªa (427.650) con dos millones de habitantes menos. La raz¨®n es que en esta comunidad viven y trabajan gran parte de los empleados de la Administraci¨®n central (171.870, la cota m¨¢s alta de largo, ya que es de nuevo Andaluc¨ªa, con cerca de la mitad, 92.408), lo que se traduce en una proporci¨®n de casi 15 habitantes por funcionario frente a la media nacional de 17 y en que uno de cada seis empleados en la capital sea funcionario. A Andaluc¨ªa y Madrid le siguen Catalu?a, con 302.607 funcionarios, y Comunidad Valenciana, con 228.453, cuarta en poblaci¨®n y en n¨²mero de empleados p¨²blicos. Por contra, donde menos funcionarios hay es en Ceuta y Melilla (10.038 y 9.586), seguidas de La Rioja, Navarra y Cantabria.

Sin embargo, los n¨²meros totales enga?an (y mucho). En t¨¦rminos generales, en las zonas con mayor tejido productivo, como Catalu?a, Comunidad Valenciana, Navarra o Pa¨ªs Vasco, tiene menos peso el empleo p¨²blico -con la excepci¨®n de Madrid-. En Catalu?a, que ostenta la ratio m¨¢s baja, hay casi 25 habitantes por funcionario y solo uno de cada diez ocupados trabaja en la Administraci¨®n, a pesar de tener m¨¢s competencias que nadie y de ser la segunda comunidad m¨¢s poblada. En las otras tres comunidades, es empleado p¨²blico uno de cada ocho. En el punto contrario est¨¢ Extremadura, donde con un mill¨®n de habitantes hay un trabajador de la Administraci¨®n por cada 11 vecinos y uno de cada cuatro trabajadores en activo es empleado p¨²blico. Le sigue Arag¨®n, donde hay un empleado p¨²blico por cada 14,5 habitantes y una de cada seis personas con trabajo lo tiene en la Administraci¨®n. Por no hablar de Ceuta y Melilla. Cada uno toca tan solo a siete habitantes y una de cada dos personas empleadas trabaja en el servicio p¨²blico. Se debe a los m¨¢s de 3.000 militares que hay en cada una de las ciudades aut¨®nomas, que suponen un tercio del total de empleados p¨²blicos.

?Hombres o mujeres?

La administraci¨®n central es hombre, mientras que la auton¨®mica es mujer. En la primera, trabajan 406.489 hombres frente a solo 176.958 mujeres. Sin embargo, en las autonom¨ªas las mujeres doblan a los varones: 886.474 frente a 459.103. M¨¢s cerca de la paridad est¨¢n los ayuntamientos (334.995 hombres y 292.097) y las universidades (59.511 varones frente a 43.383). Cuando vamos al total, la paridad es casi total: 1.260.098 hombres y 1.398.912 mujeres.

Por ocupaciones, los mayores contrastes est¨¢n, sin sorpresa alguna, en las Fuerzas de Seguridad del Estado (125.976 ellos frente a 9.974 ellas) y las Fuerzas Armadas (111.832 frente a 15.541). Las entidades p¨²blicas empresariales son tambi¨¦n territorio masculino, 44.338 frente a 12.263, al igual que las prisiones: 16.534 funcionarios y solo 5.305 funcionarias.

Sin embargo, las mujeres casi doblan a los hombres en la administraci¨®n de justicia: 14.916 frente a 8.742, pero no son magistradas, jueces y fiscales, sino otro personal (10. 025). Pero donde las mujeres son legi¨®n es en docencia no universitaria y Sanidad (368.926 profesoras sumando las administraciones central y auton¨®mica frente a 177.951 profesores y 345.966 sanitarias/146.755 sanitarios).

Los ministerios reproducen tambi¨¦n el esquema de una sociedad todav¨ªa lejos de la igualdad y en la que la mujer se encarga, sobre todo, de la docencia y la salud. As¨ª, ellos ganan en Defensa (15.197 hombres frente a 12.152 mujeres), Fomento (casi el doble: 4.277/2.426) e Interior (21.355/13.740), mientras que ellas son mayor¨ªa en Educaci¨®n (6.614/2.836) y Sanidad (27.659/18.580). Seg¨²n CSI-CSIF, en unos a?os se espera una progresiva "feminizaci¨®n de las administraciones" similar -y por las mismas razones- al que se observa en las universidades.

?Qu¨¦ edad tienen?

Mucho m¨¢s complicado de determinar, ya que el bolet¨ªn del Registro Central de Personal solo aporta el desglose por edad de los efectivos al servicio de ministerios, organismo aut¨®nomos y ¨¢reas vinculadas salvo docencia no universitaria. Para el resto, consultar comunidad por comunidad. "El 75% del personal p¨²blico est¨¢ transferido y cada comunidad es un aut¨¦ntico mundo, algunas publican estad¨ªsticas, otras no...", advierte Miguel Borra. Sin embargo, los sindicatos opinan que el dibujo del funcionario de entre 40 y 59 a?os es perfectamente extrapolable al resto de administraciones. Del total de 216.787 empleados de ministerios, organismos aut¨®nomos y ¨¢reas vinculadas, m¨¢s de la mitad, 158.485, tiene entre 40 y 59 a?os. Los menores de 30 suponen apenas 5.729 personas, y los que tienen m¨¢s de 60 son 20.668.

"Es un cuerpo envejecido porque la oferta p¨²blica de empleo es reducida. Viene marcada por la tasa de reposici¨®n que se negocia cada a?o. Para 2010 es del 10%, aunque acordamos un 15% en las negociaciones, lo que quiere decir que de cada 10 que se jubilan solo se repone uno, salvo Sanidad, Educaci¨®n, Fuerzas Armadas y Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y servicios sociales". Los sectores m¨¢s j¨®venes de la Administraci¨®n son, seg¨²n CSI-CSIF, Sanidad y Educaci¨®n, debido a que "es donde hay m¨¢s oferta de empleo".

Tijeretazo del Gobierno