Berl¨ªn presiona para acelerar las quitas en futuras crisis bancarias
Alemania quiere adelantar el marco legal de 2018 a 2015
?Puede quebrar un banco? ?Debe rescatarse siempre cualquier entidad financiera con dinero p¨²blico? Esas cuestiones planean sobre la pol¨ªtica econ¨®mica internacional desde la bancarrota de Lehman Brothers. Y han cobrado actualidad de nuevo tras la crisis de Chipre, resuelta con un rescate en el que se deja quebrar un banco y se imponen p¨¦rdidas a los accionistas, los poseedores de todo tipo deuda (incluida la de m¨¢xima calidad, intocable hasta ahora) e incluso los depositantes de m¨¢s de 100.000 euros, despu¨¦s de haber flirteado con castigar tambi¨¦n a los de menos de 100.000 euros, asegurados ¡ªen teor¨ªa¡ª a prueba de bombas. La UE trabaja en una nueva caja de herramientas para lidiar con futuras crisis bancarias sin recurrir solamente a los contribuyentes en esa misma l¨ªnea, aunque con un horizonte relativamente lejano. Pero los pa¨ªses m¨¢s fuertes, encabezados por Alemania, han conseguido que Chipre sea la demostraci¨®n de que ese ser¨¢, m¨¢s temprano que tarde, el modelo a seguir. Tras las controvertidas declaraciones del presidente del Eurogrupo, Jeoren Dijsselbloem, que apuntan en ese sentido, fuentes europeas explican que Berl¨ªn, junto con Gobiernos como el holand¨¦s, presiona para acelerar todo lo posible esa f¨®rmula para resolver crisis financieras.
Un portavoz del Ejecutivo alem¨¢n confirm¨® ayer que esa es una l¨ªnea de trabajo en la que insiste el equipo de la canciller Angela Merkel desde el a?o pasado.
Bruselas no consigue desenredar el l¨ªo en el que anda metida la eurozona desde hace 10 d¨ªas. Tras el primer acuerdo ¡ªfallido¡ª sobre Chipre, se desat¨® la alarma por el hecho de que todos los dep¨®sitos ten¨ªan que arrimar el hombro para solucionar una crisis ¡°excepcional y ¨²nica¡±, que inclu¨ªa un sector financiero sobredimensionado y sucio, con algo m¨¢s que sospechas acerca del dinero negro ruso. Finalmente, pagar¨¢n solo los dep¨®sitos no asegurados, pero tambi¨¦n los accionistas y los acreedores, siempre con abundantes alusiones reiteradas a la ¡°excepcionalidad¡± de Chipre. Bruselas insisti¨® ayer en esa letan¨ªa del caso ¡°excepcional¡± chipriota. Pero una portavoz de la Comisi¨®n record¨® que las instituciones europeas trabajan desde hace meses en una caja de herramientas para luchar contra futuras crisis financieras que coincide con el experimento de Chipre.
La UE deber¨ªa tener en marcha la normativa para permitir ese tipo de quitas para 2018, dentro de un movimiento de mayor alcance, que incluye un fondo de garant¨ªa para cerrar entidades, pero tambi¨¦n todas las patas de la uni¨®n bancaria: el supervisor ¨²nico, la recapitalizaci¨®n directa de bancos por parte del mecanismo permanente de rescate, un fondo de resoluci¨®n europeo y un fondo de garant¨ªa de dep¨®sitos comunitario. La filosof¨ªa est¨¢ clara y es compartida por todos los socios del euro: los l¨ªderes europeos pusieron negro sobre blanco, en la cumbre de junio, que si un banco tiene problemas ¡°la respuesta ya no ser¨¢ autom¨¢ticamente que nosotros [los Estados] nos hagamos cargo de esos problemas¡±. Se trata de romper el c¨ªrculo vicioso entre la deuda p¨²blica y la banca; de acabar con la relaci¨®n incestuosa entre los Gobiernos y las finanzas.
?Debe rescatarse siempre cualquier entidad financiera con dinero p¨²blico?
Berl¨ªn y los pa¨ªses del club de la Triple A insisten en adelantar a 2015 los nuevos poderes de resoluci¨®n de crisis bancarias que quiere la Comisi¨®n. Y Dijsselbloem ¡ªtal vez m¨¢s como ministro holand¨¦s que como l¨ªder del Eurogrupo m¨¢s que apoyado por Alemania¡ª sigui¨® esa l¨ªnea argumental al sugerir que Chipre servir¨¢ como gu¨ªa. El BCE y varias capitales lanzaron ayer duras cr¨ªticas al holand¨¦s por esas declaraciones, de las que se ha retractado chapuceramente. Ante el ataque de sinceridad del presidente holand¨¦s del Eurogrupo, la reacci¨®n de los mercados ¡ªque saben de las presiones alemanas¡ª obedece al hecho de que la banca europea, especialmente en los pa¨ªses con problemas, corre el riesgo de que sus clientes salgan corriendo.
Los portavoces alemanes se esfuerzan por separar el grano de la paja, desmintiendo cualquier parecido entre Chipre y otros casos, y descartando cualquier riesgo para pa¨ªses como Espa?a. Chipre es un caso sin par, insisten en Berl¨ªn, porque sus bancos apenas ten¨ªan nada m¨¢s que dep¨®sitos. Espa?a, por el contrario, cuenta con dinero suficiente para recapitalizar sus bancos ¡ª100.000 millones, de los que ha pedido 40.000¡ª gracias al rescate financiero europeo. Alemania da el problema espa?ol por superado, y el ministro Wolfgang Sch?uble insiste en avanzar hacia la uni¨®n bancaria europea repartiendo las responsabilidades en la prevenci¨®n de futuros problemas bancarios. Tanto el partido de Merkel (CDU) como los socialdem¨®cratas y los Verdes, con las elecciones a la vuelta de la esquina, est¨¢n de acuerdo en que el tab¨² de que los bancos no pueden quebrar debe caer. Y para ello coinciden en que hay que hacer pagar a quienes tomaron riesgos a cambio de jugosos intereses.
La UE trabaja para lidiar futuras crisis sin recurrir solo a los contribuyentes
Hay, a¨²n as¨ª, un problema de tempo. El BCE ha insistido siempre en que ese 2018 para las nuevas reglas est¨¢ demasiado lejos. Y, sin embargo, en la quiebra reciente del holand¨¦s SNS impidi¨® que Dijsselbloem castigara la deuda s¨¦nior: pagaron accionistas y poseedores de deuda de mala calidad, pero el Eurobanco impidi¨® a las autoridades holandesas traspasar esa l¨ªnea, como sucedi¨® tambi¨¦n con las cajas espa?olas. La legislaci¨®n acabar¨¢ llegando, pero tanto el BCE como la Comisi¨®n apuntan que es clave el ritmo con el que se imponga esa reforma: con algunos pa¨ªses en plena reestructuraci¨®n o con problemas a la vista, los llamamientos a acelerar ese proceso legislativo ¡°corren el peligro de conseguir una fragmentaci¨®n a¨²n mayor del sistema financiero europeo¡±, seg¨²n una fuente europea. En plata: es un torpedo para la l¨ªnea de flotaci¨®n de los bancos bajo sospecha, muy concentrados en los pa¨ªses que peor lo est¨¢n pasando.
La chapucera gesti¨®n de la crisis chipriota ha abierto varias heridas. Incluso dentro del consejo del BCE: ¡°Mario Draghi [su presidente] desapareci¨® del Eurogrupo hace 10 d¨ªas porque sab¨ªa que pod¨ªa aprobarse un castigo que no le gustaba, impuesto por el FMI y Alemania. Y J?rg Asmussen [miembro del consejo de gobierno y exasesor de Merkel] fue quien se qued¨® y cocin¨® el pacto¡±, apuntan fuentes del Eurogrupo. ¡°Las diferencias entre Draghi y Asmussen son evidentes¡±, seg¨²n las mismas fuentes, que apuntaban adem¨¢s el malestar en varios pa¨ªses ¡ªFrancia, Italia y Espa?a¡ª por las declaraciones de Dijsselbloem. ¡°El comunicado del Eurogrupo se pact¨® palabra por palabra, l¨ªnea por l¨ªnea. Luego Dijsselbloem, al d¨ªa siguiente, se salt¨® ese mandato, en lo que parece un comportamiento inaceptable, aunque se haya retractado y alegue que le han malinterpretado¡±, cierran las citadas fuentes.
Mosc¨² advierte de que la fuga de capitales del euro aumentar¨¢
El Gobierno ruso cree que la dif¨ªcil situaci¨®n del sistema bancario en Chipre incrementar¨¢ la fuga de capitales de Rusia, de donde salieron m¨¢s de 50.000 millones de d¨®lares en 2012. ¡°La situaci¨®n en Chipre, y en general, la situaci¨®n negativa del sector bancario en Europa, m¨¢s bien estimular¨¢ la fuga de capitales de Rusia", ha dicho Andr¨¦i Klepach, viceministro de Econom¨ªa de Rusia, citado por las agencias locales.
Klepach considera que las perspectivas de oscilaciones financieras a corto plazo en la isla mediterr¨¢nea y en la Eurozona suponen un riesgo para la econom¨ªa rusa. No obstante, sostuvo que el sistema financiero ruso es m¨¢s s¨®lido que el europeo y como ejemplo puso el Banco Comercial Ruso que opera en Chipre y que Mosc¨² considera el m¨¢s sano de ese pa¨ªs.
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