Silenciar la realidad
En econom¨ªa, la distancia entre la Espa?a real y la gubernamental es abismal
El ministro de Econom¨ªa, Lu¨ªs de Guindos, empez¨® el a?o por lo grande, siguiendo la estela de su jefe, el presidente de Gobierno. En las primeras declaraciones del a?o, en la cadena SER, afirm¨® que los que han mantenido su puesto de trabajo durante la crisis, unos 17 millones de personas, han perdido el miedo que ten¨ªan hace dos o tres a?os a quedarse sin empleo. Seguramente quer¨ªa decir que si no fuese as¨ª, no se podr¨ªa explicar que el consumo lleve creciendo cuatro meses consecutivos. Hasta hace poco no consum¨ªan ni los que ten¨ªan empleo.
Unos d¨ªas antes, y por dos veces casi consecutivas con una diferencia de 15 d¨ªas (en conferencia de prensa en La Moncloa, y en Telef¨®nica, ante los grandes empresarios) Mariano Rajoy hab¨ªa hablado del ¡°despegue definitivo¡± de la econom¨ªa y de ¡°las Navidades de la recuperaci¨®n¡±.
Se ha iniciado la escapada de las consignas propagand¨ªsticas con el objeto de ganar las elecciones. Pronto Guindos ser¨¢ sustituido por otro dirigente popular, y ¨¦ste por otro, y todos convendr¨¢n en que ¡°la recuperaci¨®n es una realidad¡±, y se guardar¨¢n la espalda ret¨®ricamente afirmando que ¡°esto no quiere decir que hayamos dejado atr¨¢s la crisis¡±.
Estas afirmaciones no se corresponden con la opini¨®n de los ciudadanos. Seg¨²n el ¨²ltimo bar¨®metro del Centro de Investigaciones Sociol¨®gicas (CIS), el 40% de los espa?oles cree que la situaci¨®n econ¨®mica es mala y el 42,3%, que es muy mala; el 47,5% entiende que es igual que un a?o antes y el 39,2%, que es peor que entonces; el 45,3% piensa que dentro de un a?o ser¨¢ igual y el 25%, que ser¨¢ peor. En cuanto al paro, un 76% afirma que es el principal problema del pa¨ªs.
?A qu¨¦ se debe tal distancia entre la Espa?a real y la Espa?a gubernamental? Negar la realidad ser¨ªa no admitir que muchos indicadores macroecon¨®micos (no todos) han mejorado en los ¨²ltimos meses, pero negar la realidad es, tambi¨¦n, minusvalorar o silenciar los rasgos que hacen de Espa?a un pa¨ªs devastado por la crisis y por la gesti¨®n de la crisis que ha practicado el Gobierno (los ¨²ltimos gobiernos). Gilliam Tett, periodista destacada del Financial Times en el seguimiento de la Gran Recesi¨®n ¡ªsobre todo en su fase financiera¡ª ha escrito mucho sobre los ¡°silencios sociales¡±, aquellos temas sobre los que se procura no hablar o se marginan del discurso oficial en materia econ¨®mica. Dice que esos silencios sociales, aspectos de la vida cotidiana que habitualmente se omiten o se ignoran, suelen ser tan importantes o m¨¢s que las cuestiones que son desveladas, ya que son esos silencios los que ayudan a reproducir un sistema y las estructuras de poder a lo largo del tiempo.
En los discursos de Rajoy y de Guindos no se ha mencionado el crecimiento espectacular de la precariedad entre la gente que a¨²n trabaja, facilitada sobre todo por la reforma laboral del PP (empleos a tiempo parcial, temporales, falsos aut¨®nomos, becarios,¡); la devaluaci¨®n salarial que ha dado lugar a una ca¨ªda permanente de la renta disponible familiar, muy superior a la de los principales pa¨ªses de nuestro entorno; la multiplicaci¨®n de la desigualdad de la renta y la riqueza, que ha crecido de manera muy acelerada y que ha hecho de nuestro pa¨ªs uno de los m¨¢s desiguales de Europa, acompa?ado de otros que no forman parte de nuestro entorno m¨¢s cercano; el deterioro sumamente alarmante de algunos pilares del sistema de protecci¨®n social, que ha dejado de ser universal (sanidad, educaci¨®n y, sobre todo, seguro de desempleo,¡).
El Gobierno del PP se ha apuntado, cuatro meses antes de las elecciones municipales y auton¨®micas y casi un a?o antes de las generales, a la ideolog¨ªa del pensamiento positivo que se basa en el optimismo de los dirigentes, no en la esperanza de los ciudadanos; que se trata de diseminar por contagio repitiendo mil veces el mismo discurso; y que cree que multiplicando el mensaje de esa mejora de la macroeconom¨ªa las cosas ir¨¢n menos mal (sobre todo para quienes lo expanden pol¨ªticamente).
A partir de ahora tratar¨¢n de que la gente vea la botella medio llena, aunque est¨¦ rota y hecha a?icos en el suelo desde hace tiempo.
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